Café Amargo ••• |KyuSung|

11 ° Tensión

Kyuhyun entreabrió los labios apenas terminada aquella frase. Su respiración se detuvo, y en su cabeza estallaron mil fuegos artificiales.
Le... Gustaba.

— Kyu, avanza.

Cho regresó en si cuando el pelinegro lo empujó para que avanzara a la caja.

— Ah sí. Sí.

JongHoon colocó el código de su tarjeta una vez apareció el total a pagar.

— Era mi turno de pagar lo mío. — Reclamó Kyu cuando se dio cuenta de que Kim había pagado todo.

— Compraste dos boletos de avión a México. Creo que puedo pagarte un bloqueador solar y un par de sandalias.

Avanzaron hasta dónde una joven chica les entregó sus bolsas.
JongHoon cargó algunas pero sintió que ella los miraba con demasiado interés. De repente, se dirigió a Kyuhyun.

— Eres ... Eres Cho Kyuhyun, ¡El de Kyu TV!— dijo completamente emocionada. Kyuhyun asintió amable y con una sonrisa.

Ya lo habían reconocido un par de veces en la calle pero nunca cuando iba acompañado de alguien.

— ¡Wooow! ¿Puedo tomarme una foto contigo?

— Claro.

JongHoon sintió varias miradas sobre la actitud fanática de la chica y la amabilidad de Kyuhyun.

Posteriormente, lo miraban a él. Cuando obviamente no solía soportar miradas tan fijas y menos cuando se encontraba ahí parado.

La chica le sonrió ampliamente antes de guardar su celular.
— Gracias. Me encanta verte jugar. Eres grandioso, oppa. — dijo aquello último con voz chillona mientras levantaba los pulgares.

JongHoon contuvo la risa y dio media vuelta para el irse.
— Al contrario, gracias a ti.

Kyuhyun tomó otras bolsas y siguió a JongHoon hasta la salida.
Caminaron en dirección al estacionamiento sin decir nada. Hasta que estuvieron dentro del auto de JongHoon.
— Ahora yo me siento como si saliera con el actor y yo fuera el sirviente.

Cho arrugó el entrecejo. Eso jamás sería cierto.
— No digas eso. — JongHoon tenía el porte que muchos idols envidiarían.
Pronto supo que sólo estaba jugando cuando lo miró poner los ojos en blanco.

— Ya lo sé. No te creas tan especial... Oppa.

Jong hizo un tierno y exagerado puchero. Cho no perdió la oportunidad y lo acorraló contra el asiento. Demasiado cerca de sus labios como para hacerlo sonrojar.

— Yo sé que algún día va a ocurrir. Un día veré de tu boca un Sí y en ese momento... Ese oppa valdrá tres orgasmos—. JongHoon sintió un escalofrío cuando Cho dijo aquello en un susurro enronquecido y, le acarició con ternura la mejilla—. Y no creas que vas a librarte de lo que acabas de confesarme.

Intentó decir algo, pero otro beso corto y efímero disipó sus palabras.
— ¡Sh! Ya habrá momento para hablar... Te esperan largos días conmigo en México.

Kyuhyun rió divertido, malvado y travieso. Tal y cómo él era.

°°°

JongHoon terminó de doblar su ropa en la maleta. Al parecer no faltaba nada.

Sólo que Cho regresara de su viaje al baño para darle más detalles del improvisado viaje.

La puerta de su habitación se abrió de repente. Kyuhyun entró sin siquiera pedirle permiso. Jong notó al castaño con una de sus mascarillas en el rostro.