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Era de noche en Nueva York, Lucrecia, Nadia y Guzmán habían salido a tomar un café y conversar, habían invitado a Adam pues el chico se había vuelto un amigo para ellas, tenía más cercanía con Lu pues había algo que le inquietaba en ella, él era de analizar a las personas pues estaba estudiando psicología.

Estaban ya los cuatro bebiendo y conversando, hablaban más que todo de los últimos sucesos en España y también expresaban su preocupación por no saber nada de Samuel, Guzmán era el más afectado con el asunto, sentía que había dejado a su amigo abandonado, jamás se perdonaría si algo llegara a pasarle, después de todo Samuel y Ander eran sus mejores amigos.

"Es Omar" interrumpió Lu la conversación al ver que su teléfono sonaba insistentemente, Nadia pronto se puso en alerta, pues tenían un horario ya establecido para conversar y en la tarde le había comentado a su hermano que saldría con los chicos y que hablarían en un horario diferente.

L: "Omar, darling ¿qué ha pasado?"

O: "Hola cari, nada para que se alarmen" - contestó Omar para tranquilizar a su hermana quien ya se encontraba a lado de la mexicana viendo a través de la pantalla, Guzmán solo escuchaba atentamente y Adam guardaba silencio sin entender una palabra pues aún no entendía muy bien el castellano.

L: "Casi nos matas del susto"

O: "Pasa que estoy con Ander en el piso del Samu y hay una carta dirigida a Carla"

L: "¿A Carla?" - preguntó con sorpresa Lu.

O: "Si, tiene sellos militares, así que debe ser de Samuel"

L: "Carajo, no me cuelgues, intentaré enlazarla" - dijo mientras dejaba en pausa la videollamada de su amigo y marcaba el número de Carla.

Todos esperaban expectantes a que la rubia contestara, Carla ya se encontraba en su piso, bebía una taza de té junto a su madre en el balcón del apartamento, se había vuelto ya una costumbre, conversaban un largo rato, sobre las bodegas, la universidad, Samuel, este último era el tema que había abarcado sus conversaciones los últimos dos días.

....

A la marquesa le causaba mucha curiosidad la relación de su hija con Samuel, el chico había cambiado la conducta de su hija de forma drástica, el vibrar de un móvil interrumpió el relato de Carla quien le comentaba a su madre sobre los asquerosos macarrones que había tenido que comer, Beatriz reía divertida al escuchar a su hija comentarle la anécdota.

B: "Contesta cariño, puede ser importante"

C: "Es Lucrecia"

B: "Vamos, es tu amiga y no hablan hace mucho, los macarrones pueden esperar para mañana" - dijo mientras se levantaba y besaba la cabeza de su hija dejándola sola con su videollamada.

L: "Gracias al cielo Carla"

C: "Tranquila Lu, ¿qué pasa?"

L: "Espera que pondré a Omar"

C: "¿A Omar?" - preguntó sin entender nada de lo que Lucrecia hacía, pronto todos podían verse entre sí, hasta Guzmán se había acercado a la pantalla del móvil de Lu, Adam decidió que era mejor darles su espacio y salió a fumar un cigarrillo mientras ellos conversaban.

A: "Hola chicos" - dijo Ander al verlos a todos, es bueno verlos, inmediatamente todos respondieron el saludo de diferentes formas.

O: "Hola Carla" - interrumpió Omar un pequeño silencio incómodo, todos miraban a la rubia expectantes de su reacción, ella solo siguió viendo sin entender de qué se trataba esa intervención, jamás había cruzado palabra con el musulmán, excepto para pedirle alguna bebida en el Teatro Barceló, "estamos con Ander en el piso del Samu y hay una carta dirigida a ti"

C: "¿Cómo has dicho?"

A: "Tiene sellos militares, creemos que Samuel te la ha enviado" - Carla empezó a respirar de forma acelerada y un nudo en su garganta se formaba.

L: "¿Carla, estás bien?" - dijo Lu para sacarla del estado de shock en el que se encontraba

C: "Ábrela Omar, necesito saber que dice ahora mismo" - todos se sorprendieron de la decisión de la chica, esperaban una respuesta racional, que tal vez pidiera que se la enviaran a Valerio quien se había convertido en su intermediario.

Omar se apresuró a buscar un cuchillo para abrir el sobre, tomó la hoja que se encontraba doblada en tres y la estiró para iniciar la lectura, todos guardaban silencio y escuchaban atentamente las palabras que empezaba a pronunciar Omar.

Las lágrimas empezaron a rodar por las mejillas de todos, únicamente Guzmán sabía de los sentimientos tan intensos que Samuel tenía hacia Carla, Nadia estaba enterada de algunos encuentros que habían tenido pero jamás pensó que existía tal amor, Ander tomó la carta y leyó los últimos párrafos pues la voz de Omar era cortada por el llanto.

G: "Eso solo significa una cosa" - dijo Guzmán cuando la carta terminó de ser leída, todos se sobresaltaron pues habían quedado en silencia, además Carla lloraba desconsoladamente, cosa que tenía a todos sobresaltados.

N: "¿De qué hablas Guzmán?" preguntó Nadia.

G: "Samuel está en el Sahara"

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De la guerra y el amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora