Ese Conde. [Ciel Phantomhive & Lectora]

XVII

-¡Oh, Lady! - Una voz detuvo mi andar entretenido entre la gente. Giré en busca de su dueño para encontrarme a una chica asiatica de grandes ojos y cuerpo más que desarrollado.-¡Aquí atrás! - La chica se apartó ligeramente dejando ver el familiar rostro de un hombre asiático.

-¿Lau? - No sabía que él tenía pareja, aunque la verdad, sabía poco de él en contexto. Me acerqué para poder escucharle sin que el bullicio me lo impidiese. 

-¡Esta es RanMao, ¿No te parece muy linda? Esta acompañándome! - Explicó reposando su barbilla en el hombro delgado de la chica. La tenía totalmente rodeada de la cintura y encajada en su cuerpo.-Tenía pensado que veria al conde Chatfield y a la condesa. 

-¿Los conoces? Eso es nuevo. 

-¡Puede ser! 

-Me separé de ellos para buscar... algo... - Tosí levemente cubriendo un segundo mis labios con mis dedos. Estaba a punto de soltar la sopa como si nada. El arqueó las cejas y soltó una risita. 

-¡Hey, conde!-Gritó de repente y giré rápidamente. 

-¿Uh? ¿Qué estas haciendo con una de tus chicas aún cuando tus clientes estarán aquí? - Ciel observó con duda al hombre, apenas de reojo. 

-¡Meh, Ranmao es mi hermanita, mi hermanita claramente!-Acarició la mejilla de la joven y desvié la mirada.-Además pense que sería bueno si ella me acompañaba a disfrutar el evento. 

-Es cierto, darán Curry a la audiencia. - Comenté, y Ciel al oír mi voz volteó la cabeza para encontrarse conmigo con una expresión de sorpresa. - ¿Listos para competir? 

-¿Tú... viniste? - 

-No soy una fantasma. Vine.-Aunque después de la decepción que parecía haberle causado a mi padre, comenzó a ser reticente con dejarme disfrutar de ningun evento social por como esté pudiese afectar a mi concentración y a que aceptara alguna clase de castigo. Aún así, tuve que aprovecharme de unos pucheros y fingir la mejor actitud para ganarme un lugar en el carro. Él relajó la mirada y volvió a girarse para seguir caminando. El chino pronto abandonó su asiento y comenzó a caminar con él, yo los acompañé.

-¿Entonces el mayordomo del príncipe va en serio?

-Él traicionó a su amo, quien creía un dios. Claro que va en serio. - Un poco más alla estaban los tres sirvientes junto a Soma, pero quería ver su reacción hasta que se encontrasen de sorpresa conmigo, sobre todo el principe que se veía mucho más recuperado y animado que cuando lo vi la última vez.- Es seguro suponer que lo que hace, lo hace "por el bien del príncipe". Probablemente le prometió que una vez hubiese cumplido el plan la chica sería devuelta. Pero si eso es así, suena como una mentira para mí. 

-No parece sorprendente de alguien como el hombre que vimos. - Bufé.

-Bueno, seguramente si tuviera éxito en su plan, dejarlo ir sería arriesgarse a una filtración de su fraude... Si yo fuera West... 

-¿Debería asesinarlo?-Lau comentó esto con una gran sonrisa campante, Ciel gruñó y yo solo pude sostener la respiración un segundo. 

-¿Tú... Seriamente piensas que matar a alguien es válido? 

-No lo digas como si fuese un juego.-Observé a mi alrededor con curiosidad de si a nadie más le llamo la atención una charla de ese estilo. 

-Meh, ¡No es nada tan malo!-Encogió sus hombros en un gesto despreocupado. - Estoy más interesado en como actuará hoy, mayordomo. 

-¡Oh cielos, ese es el Conde Phantomhive!-Otra voz interrumpió la conversación haciendo que Ciel se girase en su encuentro. 

-Lord West.-Su voz sonó con simpleza, y sólo dedico una mirada impasible al hombre rubio trajeado con extravagancia que caminaba a pasos largos hacía nosotros.