‹Ochenta y ocho›

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Tan solo unos días después YuGyeom volvía a casa de JungKook.
Sus padres habían salido a comer y tal vez de compras, le habían ofrecido ir pero se negó pensando que era la oportunidad que había estado buscando.
Además, sabía que su hermano JungHyun también la aprovecharía para salir.

Así que ahí estaban, en la cama del menor, YuGyeom sentado y JungKook entre sus piernas con su espalda recargada en su pecho.

—Entonces, ¿quieres hablar de eso? —Preguntó el mayor mientras daba caricias sobre su cabello, como una forma de relajarlo.
—No, quisiera poder evitarlo a toda costa. Pero debes saberlo. Creo que una explicación es lo menos que te puedo dar. —Suspiró y jugueteo con sus dedos—. Me sentí algo... abrumado, en un principio, cuando llegó MinGyu-ah. Fueron muchos recuerdos, sentimientos que había metido en lo más recondito de mi corazón. Cuando él me dijo que estaba interesado en mí, en algún punto parecía que me estaba dando esa oportunidad que en el pasado no tuve. Luego estaba ese lado de él en el que sabe cómo conquistarte sin que te des cuenta. Dice lo que quieres escuchar, te toca como sabe que te derretiras. Y eso fue un problema porque esperaba que me tocaras de esa manera. Quería pensar que estaba bien esperar, ir lento, pero también lo deseaba. Además de que seguía muy inseguro de lo que sentías, y de lo que significaba para tí. Pensamientos como que te cansarías de mi pronto, que no sería suficiente y más cosa así, fueron lo que me impulsó a terminar contigo. Te lo dije, no quería lastimarte, no quería que te sintieras engañado cuando te dieras cuenta de que tenía sentimientos por MinGyu. Pero no lo logré, lo siento.
—Ya no te disculpes Kookie. Pensé que desde que empezamos nuestra relación había dejado claro lo que sentía por ti.
—Lo sé pero no podía sacar de mi cabeza cuando te enojaste con los chicos y dijiste que tú y yo jamás seríamos nada. Pensaba que seguías a mi lado por lástima. Quería confiar en lo que decías pero fue difícil creerlo. —YuGyeom estaba apunto de hablar, cuando JungKook se giró rápidamente para verlo a los ojos—. Ya no pienso así. Cuando me dijiste que habías ido con MinGyu para asegurarte de que estaba bien, entendí que realmente me amas. Y con lo de después me dejaste claro que me aceptabas con mis defectos también, y que también darías todo de tí. —Le sonrió.
—Así es. Veo que debo decirte lo que siento más seguido. A veces es un poco difícil expresarlo pero lo haré, no quiero que te vuelvas a sentir así nunca más.
—No tienes que forzarte a nada. —Volvió a girarse y a acurrucarse entre sus brazos—. Siempre me lo demuestras, solo tenía que aceptarlas.
—¿Aceptarás todas las veces que te diga que te amo a partir de ahora? —Dijo con un tono meloso.
—Sí. —Soltó una risilla enternecido.
—Te amo, te amo, te amo, te amo... —Se lo susurró al oído varías veces antes de terminar entre sus labios.

Besos que pronto terminaron en algo más.

—Debes tener hambre

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—Debes tener hambre. —Dijo JungKook después de haberse vestido.
—No, ya te comí a tí, estoy satisfecho. —Dijo coqueto, pero al instante se sonrojó. El menor rió.
—No~ Hablo en serio.
—Está bien. Un poco. La verdad comí antes de venir, pero podría comer algo.
—Bueno... —Salieron de su habitación y se dirigieron a la cocina—. Siempre hay ramyeon.
—Estoy bien con eso. —Se encogió de hombros.
—Tengo una pregunta, ¿qué hacías en la escuela aquel día cuando me asusté de MinGyu? Ya todos se habían ido. —Preguntaba miento buscaba un recipiente en el cual calentar agua.
—HoSeok-ah, yo y otros chicos de tercer grado del club estuvimos hablando. HoSeok-ah está indeciso sobre a quién debería dejar como nuevo presidente.
—Uh~ ¿Quién será? —Lo miró emocionado.
—No puedo decirte. —Rió—. Solo te diré que, tanto HoSeok-ah, como JinYoung-ah y JaeBeom-ah tienen planeando decirlo en mismo día, quieren que se siga manteniendo la tradición de que los tres clubs colaboren.
—Eso me pone nervioso, JinYoung-ah podría elegirnos a JiMin-ah, TaeHyung-ah o a mi, ¿cierto? —YuGyeom se encogió de hombros. No sabía tanto.

Inseguridades - GOTBANGTAN AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora