JungKook está enamorado de su hyung, YuGyeom. Pero él creé que éste jamás se enamoraría de alguien tan insignificante.
JinYoung y Jackson se mueren por el otro, y lo saben, pero a JinYoung le da mucho miedo empezar una relación por tantas insegurida...
JinYoung era bueno ocultando sus emociones, siempre tratando de parecer un hombre fuerte y serio, y aunque lo era, tenía algunas debilidades, y los únicos que podían notarlas eran Jackson y JaeBeom. Y este último era el único que sabía lo que pasaba con JinYoung y Jackson. Por eso mismo no se sorprendió cuando JaeBeom lo arrastró entre las repisas de la biblioteca alejándose lo más posible de sus amigos.
—¿Y a ti que te sucede? —Preguntó Beom cuando encontraron privacidad. —No es nada. —Deja de hacerte el difícil y solo dilo ya. —Solo, es Jackson insistiendo. —No, no es sólo eso, ya estabas acostumbrado a que Jackson insistiera. Dime la verdad. —JinYoung suspiró viéndose atrapado por su mejor amigo. —En realidad es todo lo contrario, Jackson dejó de insistir. —JaeBeom lo miró serio, esperando a que contara todo—. El prometió que dejaría de insistir si le decía que no me gusta, y lo dije. Pero supongo que no creía que de verdad lo dejaría de hacer. —No te engañes JinYoung-ah, sabes cómo es Jackson, sabes que cumple lo que promete. —El mencionado asintió dándole la razón—. ¿Ahora que? Era lo que querías ¿no? ¿Cuál es el problema? —Es raro, tú lo dijiste, estaba acostumbrado a que insistiera. —JinYoung-ah. —El más alto lo miró a los ojos con seriedad—. Ni siquiera yo sé porqué te resistes tanto. ¿Qué te detiene? No me gusta verte de esa manera, preocupado todo el tiempo. ¿Por qué no puedes dejar que Jackson-ah te haga feliz? Porque sabes que cuando estás con él eres muy feliz, te ríes todo el tiempo cuando hablan.
JinYoung bajó la mirada al piso pensativo.
—Lo estaba pensando y creo que es inseguridad o algo así. —¿Inseguridad a qué? —No lo sé, es confuso para mí. Solo pienso todo el tiempo que no estoy seguro de que la relación con él pueda funcionar.
JaeBeom suspiró y negó, pensado que su amigo era un poco tonto para no darse cuenta de las cosas.
—Yo creo que quieres mantener todo, toda tu vida bajo control y en orden, y Jackson es algo que no puedes controlar, ni lo que sientes por él, y eso te asusta. —JaeBeom... —Dijo sorprendido por las palabras de su amigo.
¿Ese era el problema?
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Al llegar a su casa, y después de hacer sus tareas, se recostó en su cama y no pudo evitar darle vueltas y vueltas a las palabras de JaeBeom.
Era verdad que cuando estaba con la compañía del chino se sentía realmente cómodo. No podía parar de reír con las cosas que decía y hacía. Aún cuando hablaban seriamente sobre algún tema, era agradable.
Jackson seguía tratándolo como si nada pasara o hubiera pasado. Y eso lo ponía incómodo. Por eso mismo, al siguiente día, después de que su tiempo de club se acabara, se dirigió al gimnasio, y como esperaba el más bajo se encontraba fuera del lugar, descansando en la brisa del agradable día. JinYoung se sentó junto a él en el pasto, con sus espaldas sobre la pared del edificio, sin decir nada por unos minutos.
—Lo siento si te he herido todo este tiempo. —Comentó JinYoung. —Supongo que no importa. —Claro que importa, y soy un gran idiota por no haber pensando en eso. No lo mereces.
Jackson se quedó en silencio. ¿Para que servía eso ahora? No estaba cambiando nada.
—¿De verdad te rendiste? —No me rendí, solo hice lo que pediste. —Era mentira lo que dije antes. —Jackson soltó una risita. Él siempre supo que era mentira—. Hablé con JaeBeom-ah, y me hizo darme cuenta de algunas cosas. —El contrario lo miró dándole toda su atención—. Dijo que tenía miedo de las cosas que se salían de mi control, y tú eres incontrolable Jackson-ah. —Ambos rieron—. Es solo que yo, no quiero que las cosas cambien entre los dos, ¿sí? Estoy tan cómodo cómo estamos que no quiero que sea diferente. —No cambiaría nuestra relación apenas, porque contigo soy yo, solo yo, soy genuino, y no puedo cambiar a algo que no soy, menos contigo. —JinYoung asintió sin mirarlo. Sabía que él era así. Simplemente Jackson Wang, simplemente Wang Jiaer.
Wang miró el perfil pensativo de Park. Le encantaba. JinYoung lo volvía loco. Le parecía demasiado hermoso, tanto físicamente como su personalidad.
Había algo que JinYoung no sabía, y es que el más bajo ya había pasado su duelo de aceptación de sus sentimientos. Porque sí, al principio, tampoco aceptaba que el contrario le atraía.
Jackson había llegado en segundo grado, su coreano no era muy bueno, pero JinYoung había sido amable con él y lo ayudó a mejorar y entender las clases mejor. Hicieron una relación muy cercana en poco tiempo, y no se dió cuenta cuando esa linda amistad se transformó en amor. Por eso mismo se asustó de sí mismo. Además, él, en china siempre había salido con chicas, él creía que era totalmente heterosexual.
Sin duda Park JinYoung le puso su mundo de cabeza. Pasó un tiempo para darse cuenta de que no tenía remedio, que estaba perdidamente enamorado y que necesitaba a JinYoung más cerca. Así que, de alguna forma entendía que el más alto estuviera algo confundido aún, pero estaba siendo algo cruel con él. Simplemente rechazándolo sin delicadeza una y otra vez. A pesar de que sabía que a JinYoung también le gustaba, este siempre se negaba. Lo más lejos que había llegado una vez, fue cuando lo había acorralado contra una pared del baño, tratando una vez más de que dejara de resistirse. Se había acercado a su rostro con la intención de besarlo, pero JinYoung giró su rostro, aún así Jackson no perdió la oportunidad de tenerlo débil contra él y dejó un par de besos a lo largo de cuello. Suspiros salían de los gruesos labios del más alto, pero no tardó mucho en alejarlo y salir corriendo.
Recordando esto, Wang pensó en intentarlo una vez más. Atrajo el rostro de JinYoung al suyo, observando que este cerraba sus ojos algo temeroso. Sus labios tan juntos, solo rosandose y sintiendo los suspiros contrarios sobre estos. Ambos dudosos sobre si era la mejor idea, porque eso solo significa que habrían de intentarlo. JinYoung trató de alejarse, pero Jackson fue más rápido y atrapó sus labios en un suave y lento beso. El coreano no pudo resistirse más, solo se dejó llevar.
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