Kambe seguía sentado en la silla y mirando al bebé a los ojos, ya que había despertado hace unos minutos atrás. Tomándolo desprevenido. Era como una competencia de miradas y el que ganó fue Kambe mientras el bebé terminó por cubrirse su rostro con la frisa.
— mamá -llamó asustado- mamá
Daisuke se levantó con su rostro serio y abotonó su saco antes de tocar su reloj y que una pantalla flotante saliera y mostrara en grabaciones de cámara a Haru caminando junto al doctor hacia la habitación.
— Tu padre ya viene por ahí. -le dijo y el bebé sacó su cabeza fuera de la frisa para mirarlo a los ojos-
5 minutos más pasaron y ambas personas que su pantalla mostró, aparecieron por la puerta. Haru al ver a su bebé despierto, corrió hacia este y dejó salir su amargo olor. Marcó a su hijo con el mismo y el bebé así lo hizo con su mamá. Pequeños ronroneos como los de un gato se podían escuchar de ambos seres.
— Papá te llevará a casa y nos bañaremos juntos. -le dijo con una sonrisa y ojos cristalinos-
Daisuke y el doctor veían la escena atentos. Uno con pena y el otro con el ceño fruncido por el olor que desprendía dicho omega. El doctor sacó a Kambe fuera de la habitación para hablar sobre Katou. Le llevó a su oficina, donde minutos antes le había practicado parte del examen físico a Katou.
— Tome asiento detective, porque será una charla larga. -le advirtió con un semblante serio y triste-
— Vaya al grano, ¿Sucede algo con ellos? -preguntó y cruzó sus piernas; una encima de la otra-
El doctor sacó ambos expedientes y se los mostró a Daisuke. Este último a medida que leía, su ceño se fruncía hasta que dejó salir un gruñido por la rabia que sentía.
— Cómo puede ver, Katou Haru, que es su nombre o al menos es el que aparece en su récord médico, no es el padre del niño. Sin embargo, no se necesita parirlo para sentir que lo es, un claro ejemplo son ellos mismo. -sonrió un poco- El joven Katou, no tiene glándulas de marca. Es por eso el hedor que desprende, no obstante, eso no es tan solo una de las causas del por qué su hedor es tan fuerte y así de amargo. -dejo salir un suspiro pesado- Katou no puede tener hijos, otra razón para su amargo olor. -concluyó- Debido a eso es posible que su omega no responda a las voces u ordenes de un alfa. También el que no tenga su ciclo correspondiente de lo que en realidad es un celo.
— No sirve. -clarificó Kambe con su semblante serio-
— -el doctor se aclaro la garganta e ignoro el comentario de Daisuke para proseguir- Le hice unas pruebas de sangre y todo parece estar en orden, aparte de lo dicho anteriormente. También le practiqué un examen de violación y salió positivo. Tiene cicatrices en su recto. Cicatrices en todo su cuerpo, aquí las marque. -señaló un dibujo del cuerpo humano ya con líneas marcadas en el expediente- Le hice algunas preguntas, y me dijo que vive en el cementerio. Usted sabe que esas no son condiciones para criar un bebé ¿cierto?
Kambe se quedó callado mientras absorbía toda esa información que le decía el doctor y leía del mismo expediente que le fue entregado.
— ¿Él lo sabe?
— ¿Todo de qué?
— Que no puede tener hijos.
— Al parecer no, quizás sus padres le echaron de casa por eso. Diría que fue a temprana edad, porque parece no recordar muchas cosas y mucho menos a sus padres. Tampoco sabe el porqué de su hedor. Parece que también tuvo fracturas en las costillas, piernas, y brazos. Cómo se muestra en los rayos x que le hice. Las cuales dejaron atrás feas cicatrices, y tampoco le dieron los cuidados debidos para que dichas fracturas sanen cómo era correspondiente. Por eso es que al caminar cojea de una de las piernas. Debe saber que es normal que le duela en algunos días más que otros. -aclaró-
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A Soul Battle
FanfictionUn omega de 39 años, Haru Katou y su hijo de dos años. Daisuke Kambe, un alfa de 27 años. ¿Qué les deparará la vida a esto dos seres? ¿Cómo sus caminos se cruzarán? {Soy un asco haciendo pequeñas descripciones, así que solo pasen a leer y espero...