Capítulo Décimo Sexto

1.3K 292 19
                                    

Helery

Habían pasado algunas semanas desde aquella noche, faltaba tan solo tres días para que nuevamente la Celebración de la Luna llena se llevara a cabo. Mi siguiente víctima había sido Kayler, pero como era de esperarse, él tampoco era, tenía un buen atributo debajo de sus pantalones color negro brillante, pero no era ni la mitad de lo que tenía mi chico misterioso, estaba ansiosa por ir a la fiesta, pues algo dentro de mí me decía que él volvería.

Había renunciado a seguir con mi búsqueda, ni siquiera les había mirado la entrepierna a Mariano y Jimmy, sabía de ante mano que todo sería un fracaso, pues por más que quisiera y buscara, no lo iba a encontrar ¿Por qué? Porque al parecer aquel chico solo había aparecido como por arte de magia esa noche, pero como había llegado, se había esfumado. Debía encontrarlo a como diera lugar, quería saber la verdad todo, si lo había hecho porque realmente le atraía o solo se había aprovechado de mi estado de embriaguez. Mi cabeza daba vueltas y seguía sin recordar, pareciera que nunca hubiera pasado dicho momento, pero el dolor que yacía en mi vagina, me hacía eliminar ese pensamiento.

—¿Ya sabes qué vestido te pondrás? —negué mientras acariciaba al gato—. Recuerda que allí te espera el amor de tu vida.

—¿El amor de mi vida? —cuestioné con burla—. Creo el amor de mi vida se quedó atorado en un condón.

Sammer me miraba con seriedad mientras yo reía, ella seguía tratando de encontrar un buen vestido para la ocasión, el timbre de la puerta sonó y antes de que Sammer dijera algo, yo me levanté, dejé al gato y caminé hacia la puerta, sí nuevamente era Hazza, me encargaría de matarlo allí mismo, pero no, era un joven el cual me entregó un paquete sin decir nada, ni siquiera me puso a firmar algún recibo o pidió propina, que extraño.

—¿Tienes algún admirador secreto y no me dijiste? —alcé una ceja y ella solo me miró con sorpresa— ¿No sabes quién te lo dio?

—No, el joven no me dijo nada —musité mientras le quitaba la tapa a la caja, saqué lo que había dentro y casi se me cae la boca.

—Es bellísimo —chilló Sammer tomando el hermoso vestido azul celeste totalmente brillante—.Es perfecto para la fiesta. Tú siempre tienes las mejores cosas, no es justo.

—¿Cómo puedes decir eso hermana?  T-tal vez se equivocaron, esto no debe ser para mí. —dije para luego sacar mi celular— llamaré a la empresa para ver de...

—¡No Helery! Te lo pondrás y punto.  —exclamó Sammer quitándome el celular.

No dije nada más, decirle no a Sammer, era como decirle no a una pared, no me iba a escuchar y de todas maneras me lo iba a hacer poner, era extraño dicha situación, últimamente mi vida había dado un giro de 180°; antes era una chica normal con un novio guapo y una mejor amiga envidiable, ahora tenía un gato como mascota que cada día me ponía más nerviosa, me quedé sin novio, sin mejor amigo y ambos mencionados me engañaron ¡Ah! Por último, follé con alguien en plena borrachera y no tengo ni la menor idea de con quién fue ¿Qué más podría pasar? La mala suerte había caído sobre mi cabeza, después de todo, la vida podía cambiar en tan solo un segundo, no hay que desperdiciarla.

Gracias por leer 😍

Candy Cat (En Edición) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora