♡ Una Mujer -tomtord- ♡

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Un torpe soplido para apagar las velas, justo al terminar todos de cantar la conocida canción. Los aplausos no se hicieron esperar y todos los adultos se acercaron a dar felicitaciones al niño. Que día mas importante, Caym no podía sentirse mas especial.

El primer cumpleaños con su mamá.

Paul y Patrick regresaron del viaje a tiempo para estar el día especial, pero no solos. Alfhild Larsson estaba allí, visitando por primera vez en años a su hija y su nieto. Torny no podía estar más feliz, toda la vida tuvo contacto con su madre solo por vía online, desde su nacimiento fueron separadas por el padre y todo el tema de la estadía de la menor en Londres solo logro complicarlo todo mucho mas.

Entonces, era una bonita sensación, algo reconfortante, poder verse en persona al fin.

Alfhild era la que mas abrazaba a su nieto, lo mimaba y lo trataba con besos y pellizcos suaves en las mejillas.

—hvem er den lille store?

—Jeg, Jeg er det!

Nuestra protagonista sonreía de pie del otro lado de la mesa. —cuatro años ya—. Escucho decir a Paul cuando este se le acerco.

—si, es un poco chocante, lleva conmigo unos meses después de todo.

—tranquila, lo importante es que esta contigo.

—si, al fin conmigo.

Se callaron, viendo a Pat y a Amy peleándose con el pastel, a Alfhild haciéndole cosquillas al pequeño. Se sintió bien... y poco a poco, se tomaron de las manos entrelazando los dedos. Simple gesto al que estaban acostumbrados, pero que generaba sensaciones completamente distintas en el uno y el otro. Sensaciones que no estaban listos para tratar, porque podía arruinarlo todo.

Horas después, habiendo abierto regalos y pasado bonitos momentos, la pequeña celebración comenzó a disipar. Comenzando con que Caym callo dormido de los primeros. Torny lo dejo en el cuarto que le pertenecía a ella, dormiría con él y dejaría la cama del niño para que durmiera la abuela. Paul fue el único que insistió en quedarse y la noruega no se quejo al respecto pues no seria la primera vez que el castaño duerme en su sofá. 

Amy y Patrick se fueron a la casa de la brasileña ¿por qué aun no son pareja? No lo sabemos, van a su tiempo.

El silencio no se hizo esperar y pronto la casa estaba a oscuras, todos durmiendo bajo el cuidado de las estrellas.

Al día siguiente, Torny despertó con un animo bastante bueno, no tardo mucho en levantar al niño y tomarlo en brazos para ir a ver a Alfhild. Fue así que dejo al peque con su abuela para que se vistiera mientras ella se iba a hacer el desayuno, no se molesto en quitarse la pijama. Se puso a calentar agua y, mientras ponía un par de cosas en la mesa, fue que lo escucho.

—y esa camiseta?

Sus ojos se desviaron rápido a la derecha, captando al castaño, que se veía de recién despertar con los cabellos desordenados y los ojos pesados. Se estiraba un poco en lo que miraba serio, esperando una respuesta. Y en cualquier otro momento le abría respondido con normalidad, diciendo que usaba esa camiseta para dormir de vez en cuando...

En cualquier otro momento... pero ahora no. Porque llevaba puesto lo único que tiene de ese día que jamas olvidara, lo único que Tom dejo en su casa. Una camiseta gris con un estampado blanco en el pecho.