MI EXTRAORDINARIO VIAJE INTERDIMENSIONAL

CAPITULO 23 SIMULTANEAMENTE...

Varios días antes...

Alana caminaba de un lado a otro en sus aposentos. Se sentía algo ansiosa esperando por la rectificación de una noticia. Minutos después ella misma abre la puerta, al sentir alguien acercándose. Era Blossom, su hombre de confianza.

- Entra (murmuro Alana, moviéndose a un lado para permitirle la entrada).

- Dos hombres salieron de la habitación del señor Moki, mi señora, Pleristes no vino con ellos.

- Mandaste a seguirlos? (pregunto Alana seria).

- No mi señora, me dijo que no lo hiciera (contesto Blossom).

- Asi es... contacta a tu amigo de la cantina y posada, confirma lo que hablamos... esta noche cuando todos se acuesten pasa por mi (le explico Alana).

- Por supuesto mi señora, con su permiso (haciendo una inclinación de cabeza, antes de salir de la habitación).

Alana sabía que algo se estaba tejiendo a escondidas. Cuando los tres primeros extranjeros cayeron a Einar lo intuyo. Al caer dos más, era más que lógico pensar que no era coincidencia. Fue testigo de primera mano de un suceso similar hace más de 40 años, pero en esa oportunidad las manos adecuadas se interpusieron.

Villmaris acababa su última ronda nocturna. Después de los recientes acontecimientos trataba de mantenerse lo más alerta posible. Una semana había transcurrido desde que Triameth y Natasha se habían marchado. No tenía noticias de ellos. Tampoco nada inusual había ocurrido, pero seguía teniendo esa sensación de miedo en su corazón. Esperaba que estuvieran bien, sea donde sea que fuera eso. Entro a su habitación, encontrando para su sorpresa a Alana y su sirviente Blossom.

- Señora (haciendo una reverencia a la anciana).

- Lamento presentarme de esta manera joven Villmaris, pero el destino de todo el universo depende de nuestras acciones venideras (explico Alana, dando un paso a Villmaris).

- No entiendo, señora (contesto Villmaris, señalándole una banqueta para que esta se sentara a hablar).

- Sospecho que Moki es un traidor del reino...

- (Villmaris abrió los ojos por la sorpresa, pero no debía fiarse, después de todo, las acciones de Triameth y Natasha eran por la sospecha de un traidor o traidores entre los ancianos. Que los extranjeros se presentaran en el llano esa noche lo confirmo)... porque cree esto señora?

- Moki ha estado llamando a sus hombres en privado con cierta frecuencia desde que los extranjeros cayeron... mientras que su mano derecha Pleristes, ha sido visto con una mujer inusual en las afueras del pueblo (explicaba Alana, ya sentada).

- Una mujer inusual? (repitió Villmaris).

- El señor Pleristes frecuenta una cantina cerca de los límites del pueblo... tiene una casa propia, pero se ha estado quedando intermitente en la posada del lugar, con una dama alta, con cabello corto y capa negra, dicen que no parece de estos lados (intervino Blossom).

- Has recibido algún reporte inusual de la zona? (pregunto Alana)

- Realmente no... (era cierto, pensó Villmaris, manteniéndose reservado, hasta no estar seguro de si podía confiar en ella).

- Debes estar alerta... hare que confíes en mí, entregándote al traidor (Le aseguro Alana).

Villmaris solo asintió con la cabeza. Acto seguido la anciana se retiró con su hombre de confianza.

Dos días después, Willamo hacía llamar a Moki a sus aposentos.

- Qué asunto privado querías discutir conmigo hermano? (pregunto Moki tomando asiento frente a Willamo, en los aposentos del segundo).