New Feelings

Capítulo 10: La casa es un maldito desastre

Alexa se despertó en un lugar que no conocía.

No, espera. Sí lo conocía, solo que no era su casa.

Acostada con la mejilla contra lo que parecía ser un sofá, miró un poco alrededor. Una sala de estar terriblemente desordenada y sucia, y la luz de afuera entrando con tanta intensidad que le hizo doler la cabeza. Cerró los ojos con fuerza, pensando.

La fiesta de Rodrick fue anoche. Todo estaba claro hasta...la competencia de shots. Oh dios, esa fue una mala idea. La resaca la estaba matando.

Cuestión, luego de competir recuerda haber estado en el jardín trasero. Un rato con sus amigas y luego con...Rodrick.

Mierda, aún estaba en su casa.

Siguió pensando. Fumó con él en el patio trasero.

Sorprendentemente, ya no sintió la molestia y el resentimiento de siempre cuando pensó en él. Es más, incluso tuvo un pequeñísimo impulso de sonreír.

Okay, esto es raro.

Vamos, Alexa. Se que es difícil ahora pero haceme el favor de pensar más rápido.

Ellos estuvieron hablando, sí. De antes, de cuando eran amigos. Porque ella lo había...¿Perdonado?

Sí, lo perdonó porque él pidió disculpas por lo de Clark.

Qué.

Entonces, luego de hablar con el chico, volvió a la sala de estar. Recordó haber bailado un poco con Josephin y Maddy. Y quizás, solo quizás, también con él, pero no estaba claro.

Cuando la fiesta decaía, mas o menos a las cuatro y media de la mañana, se sentó en el sofá donde ahora dormitaba, y estuvo hablando con un par de personas, incluidas sus amigas.

Probablemente ahí fue cuando se quedó dormida.

Volvió a abrir los ojos, esta vez más lentamente para acostumbrarse a la luz. Se incorporó despacio, y se dio cuenta de que tenía la camisa verde de Rodrick encima, como si fuese una sábana.

Esto es...muy raro.

A un costado del sofá estaba el chico, durmiendo en el piso. Y del otro lado de la habitación, también en el piso, dormía Greg. Rodrick se veía tan, como decirlo, tranquilo mientras dormía. Como si por sus venas no corriera pura maldad.

De pronto, Alexa recuerda algo. ¡Rachel! Se suponía que debían volver juntas y su padre la recogería de su casa a las 11:30. Se fijó la hora en su celular: 11:10. ¡Mierda!

Se quitó la camisa de Rodrick de encima y se paró de un salto mientras marcaba a Rachel. Mientras esperaba, se puso sus botas y peinó como pudo su cabello.
-¿Hola?-Rachel sonaba recién levantada.
-¡RACHEL!-le dijo Alexa medio gritando medio susurrando para no despertar a los chicos. Caminó hasta la cocina.
-¡Alexa! Corazón, lo siento tanto...
-¿¡Como pudiste dejarme!?
-Estabas durmiendo tan tranquila...no quería molestarte...
-¡Mi papá va a matarme! Y además, ¡Es la casa de Rodrick! Dios mío, Rachel...
-Pero, ¡Se llevaban tan bien! Sabía que ibas a estar segura ahí y él fue súper amable...

Mientras escuchaba las excusas de Rachel, la voz de Susan Heffley por el correo de voz sonó por toda la casa. La señora decía que Manny se sentía mal y volverían de su viaje en una hora.

-¡Santo...!
-¡Cielo!
Era la voz de los hermanos. En otra situación, Alexa se reiría de ellos, pero ahora tenía otros asuntos que atender.
-Escucha, iré por tí ahora-se escuchó el ruido de las sábanas mientras su amiga se levantaba-Dile a Robert que te quedas a comer o algo.
-Okay, te espero.