La realidad es un limbo, no es el último estrato de la percepción.
Entre parpadeo y parpadeo se escurre esta mentira que juega con opacidades, luces y sombras.
No hay literatura que ponga los signos o los símbolos correctos en sus coordenadas adecuadas para revelar el auténtico límite.
Ni esbozo grueso o fino que pueda por asomo referenciar la verdadera experiencia real.
Soy el beneficiario de la estafa de los caracteres que, apilados sin lógica, van cayendo amontonados sobre superficies que recuerdan a sus propias formas, conjugándose, definiéndose, derritiéndose entre los pensamientos que los proyectan.
Se retuercen las raíces que me atan al cuerpo, este cuerpo que fue necesario en el pasado y ahora se vuelve prescindible, con la magnética predisposición de regar el suelo con sangre para sembrar la sangre que cultivará el futuro.
Y ahora entre estas líneas, ¿Qué sentido tiene la supervivencia física?
Pero, ¿acaso no estoy burlando a la muerte?
Vivo para lo que necesito, y eso que necesito no me corresponde a mí proporcionármelo, yo solo dispongo del temperamento para ejecutarlo.
Mientras tanto, entre sospecha y desengaño, estoy intentando desbaratar al enemigo con sus propias armas.
Yo soy el enemigo.
Estas son las armas.
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TAQUIPSIQUIAS
PoesiaMASA MADRE STOP ÓSMOSIS INVERTIDA STOP PLACER CASTRADO STOP LO QUE ES A PARTIR DE LO QUE NO ES STOP RENUNCIA A LA FELICIDAD A CAUSA DE LA FELICIDAD STOP PEQUEÑO PROBLEMA DE DICCIÓN STOP EXORDIO TAJANTE STOP PROPORCIÓN DORADA STOP QUE ARDA LA PALABRA...
