Lucy: Una Profecía Infernal [Sin Editar]

XIII Una Celebración Infernal

4 de Julio, 2019.
Filadelfia, Pensilvania.
9:00 AM.

Harry

El sonido constante de unos rasguños en la puerta interrumpe mi sueño y comienzo a abrir los ojos lentamente, rayos de luz entran por la ventana iluminando mi rostro y cegando momentáneamente mis vista, tallo mis ojos con la parte trasera de mis manos y un bostezo sale de mis labios. Giro mi rostro y miro a Lucy quien está durmiendo, sonrió al ver su rostro relajado, todo su cuerpo transmite tranquilidad y paz, el verla dormir es quizás una de las cosas más bonitas que he visto al despertar, su respiración es calmada y sus labios están entreabiertos, su ceño está fruncido ligeramente dándole un toque chistoso, sus pestañas se ven un poco más largas de lo normal, unos pequeños rayos de luz iluminan su rostro haciendo que sus mejillas se sonrosen ligeramente.

Estar con ella en el mismo lugar y compartiendo la misma cama es como una bendición, una bendición que pagaría con sangre tarde o temprano

Verla ahí durmiendo solo era un golpe a la realidad, el destino que nos espera es solo la prueba de que por más que intenté estar con ella eso no será posible, el plan de mi padre aún seguía en marcha.

Aleje esos pensamientos de mi cabeza permitiéndome disfrutar de la vista y la sensación de tener el cuerpo desnudo de Lucy junto al mío.

Los rasguños en la puerta se hicieron más insistentes y el quejido de Hades se hizo presente. Me levanté de la cama, me puse mi boxer que se encontraba en una esquina de la habitación y camine hasta abrir la puerta, un Hades muy alegre comenzó a girar y a mover su cola con entusiasmo sobre su eje, le sonreí y me.incline para rascar su cabeza suave y peludita color grisácea.

El husky subió de un salto a la cama y comenzó a lamer los dedos del pie de Lucy que sobresalía de la sábana. Entre el sueño la chica comenzó a reír, su acción me divirtió tanto que me acerque a ella, tome un mechón de su cabello y lo pase por su rostro lentamente, ella arrugo ligeramente su nariz, reprimi una carcajada para no despertarla aún, volví a pasar las hebras de cabello por su mejilla haciendo que la chica rascara esa zona, una vez más reprimi una risa.
La chica segundos después comenzó reir, Hades lamía de nuevo sus dedos, está vez no pude aguantar y estalle en risas, la chica se removió en la cama y paso sus manos por su rostro.

Lucy abrió lentamente sus ojos, dejando ver el brillo del color verde en ellos, sus cojos conectaron con los míos por un segundo y después se desviaron hacia Hades, frunció el ceño y con su mano empujó mi pecho.

-¡Oye! - exclamó la castaña con tono somnoliento.

-Buenos días -canturree y me acerque a ella dejando un beso casto en su frente.

-Buenos días -susurro la chica, su mano axuno mi mejilla y sonrió, sus ojos encontraron los míos y un brillo indescifrable relucía en ellos.

Volví a acercar mi rostro al de ella y presione mis labios sobre los suaves labios de ella, la chica pasó su delgado brazo alrededor de mi cuello acercándome más a ella, el beso se profundizó, su lengua se abrió paso por mi boca rosando la mía, jugueteando sus dedos con mi cuello, mandándome una corriente eléctrica que se encaminó por mi espina dorsal, con una mano sobre su espalda la pegue más a mi cuerpo, nuestros pechos desnudos se tocaban, la piel quemaba al contacto con la suya. El beso no cesaba y la insistencia en nuestros cuerpos aumentaba cada vez más, la chica gimió sobre mis labios cuando una de mis manos se deslizó sobre uno de sus pechos y comencé a jugar con la cima del mismo.

Una masa peludita se interpuso entre nosotros haciendo que Lucy sonriera sobre mis labios, poco a poco me separé de ella abandonando sus labios, nuestros pechos subían y bajaban ya frenéticos. Nuestra vista viajo al pequeño obstáculo entre nosotros, Hades estaba recostado sobre el regazo de Lucy con la pancita hacia arriba y la lengua fuera, adoptando una posición tierna.