En el pueblo de Aquifer, ya habían pasado más de 2 semanas que no tenían noticias de los reyes, estaban todos al pendiente de su llegada.—¿Donde está el rey Adrew? — preguntó uno de los monarcas, Actem, el padre de Agara, al enterarse la ausencia de la casa real, no dudó en venir al pueblo. Pues estaba estipulado que si se abandona el reino, cualquier otro monarca podría ejercer el control.
La historia de los reinos submarinos se divide en dos, solo había dos pueblos pueblos, dos pueblos se dividían todo el océano de Athikus. El pueblo de Aquifer y el pueblo de Deltem. Deltem gobernado por Actem era un pueblo que carecía de control sobre el agua, ellos eran buenos en batalla. En cambio, Aquifer era experto en controlar el agua, pero carecían de capacidad de batalla, era un pueblo pacifista.
El padre de Adrew había arreglado el matrimonio de su segundo hijo, estratégicamente con la hija de Actmen. Pues como Irish el heredero al trono iba a casarse con Nahir, su descendencia podría seguir con el legado del control del agua. Solo faltaba Adrew, si casaba a su hijo con la princesa de Deltem, ya habría una unificación de ambos pueblos.
Los habitantes no dejaban entrar al monarca al pueblo.
—Esta en su palacio — murmuro un habitante, si bien su pueblo estaba conectado con su monarca, en caso de Adrew, estaba más allá conectado con sus habitantes.
Se creó una conexión especial, todo mundo amaba al rey de Aquifer, por ser tan benévolo con el pueblo.—Esta indispuesto ahorita—
—Esta ocupado con la reina Eitabel—
—Esta con el príncipe Endel —
—Esta tomando una siesta—
—Esta comiendo, no desea ser molestado—
Miles de voces ayudando al rey Adrew, aunque estaban ahorita prácticamente indefensos, pues los únicos inmunes a los dones del agua, eran los habitantes del mundo submarino.
Eran inmunes a las melodías.
—¡Es mentira! —gritó el monarca — bien sino quieren respetar las reglas, tomaré el control a la fuerza, vendré todos mis hombres — marchándose con su caballeriza.
—¿Ahora que haremos? — decía uno de los soldados que custodiaba la entrada, el general hablo para calmar al pueblo — El rey Adrew y la reina vendrán, confíen y esperen pacientemente, ellos sabrán de esta guerra inmediatamente, el agua se los hará saber —
Nahir estaba bebiendo café, ya había pasado una semana en que Endel había salido de la cirugía. Marlén se había encargado de hacerle todas las curaciones a Endel, no se despegaba de él a menos que sea absolutamente necesario. Nahir se encargaba de curar las heridas que le producían estas curaciones.
Cuando termino de curarlo recibió de sus habitantes la noticia fatídica de sus habitantes.
—Guerra — murmuro Nahir tirando su cafe, pálida. Tenía que estar con Aquifer, tenía que demostrar su lealtad ante el pueblo, podría morir en batalla si es necesario, por su preciada Aquifer como lo hicieron sus padres.
Nahir no era prima biológica de Adrew o Irish, pues los anteriores reyes sólo tenían un hijo.
Pero cuando nació Irish, entre los habitantes nació una niña, ella se decía que ella nació con los poderes que el recién nacido no. Y no era porque el rey de Aquifer había engañado a la reina, sino porque el Don siempre tenía que ser heredado.
El rey al saber de la naturaleza de la niña, no dudo en traerla al palacio, pues su destino era estar con su hijo. Los padres de La Niña habían servido tanto a los reyes, que perecieron cuando tuvieron que salir en batalla afuera de Aquifer.
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Cuando nos une el agua
FantasyAdrew legítimo gobernante de las ciudades submarinas de Athikus, considerado un rey para muchos de sus habitantes. Todo se pone de cabeza cuando el rey de las ciudades submarinas ha desaparecido. "¿Dónde estará?" Irish tomando el cargo de su herman...