–Mi madre me matara, me metera en un convento de monjas toda la vida y una vez haya envejecido esparcira mis cenizas por una iglesia junto con agua bendita. –Dije tomando varias veces aire dramaticamente.–No exageres, solo sera un mechon y ya, señorita drama. –dijo Sabrina rodando los ojos divertida. Claro, a ella no le afectaria porque no conoce a mis padres.
Todo por seguir las ideas de tu amiguita, ¿no puedes salvar ni tu propia vida o que?
En ese instante Daniel volteo a verme con una cara de obviedad como si estuviera leyendo lo que pienso.
Es verdad, no salvaste tu vida en ese puente, menos cuando una loca con cabello de unicornio se le ocurre secuestrarnos para hacer sus grandes experimentos en nuetra cabeza que posiblemente terminen en desgracia.
–Ademas, hablaré con ellos si te dien algo. Pero anda, entremos de una vez. Erick, acompañame primero para ver si hay turnos a esta hora. –Agrega con una sonrisa en su rostro pasando dentro de la peluquería.
–Yo tambien quiero. Veré si hay colores bonitos. –Agrego Eva caminando denrto de la peluquería junto con Sab.
–No te preocupes, sera solo un poco y si definitivamente no quieres podemos hacer otra cosa que a la loca de Sabs le agrade. –dijo Erick dandome una última sonrisa amistosa antes de entrar.
Si es que algo más le agrada a esa loca.
Doy un gran suspiro de alivio rezando el padre nuestro mientras esperaba a que salieran. Parece que a Sab ayer por la noche vio un vídeo en tiktok de unos amigos que se pintaban el cabello de color del arcoiris, y se le dio por pasar casa por casa a secuestrarnos a todos para hacerlo. A Eva le encanto idea, como lo imaginamos, a Erick lo convncio diciendo que era algo para verse cool el dia de su cumpleaños, para el cual faltaban un par de dias, a mi casi que me secuestra, aunque no le costo mucho ya que me dormí como a las 3 de la madrugada y andaba como zombie, y a Daniel obviamnte lo trajo Erick. Asi que aqui estabamos, un sabado por la mañana esperando fuera de la peluqueria porque a una de mis amigas se le ocurrio hacer un asesinato con nuestro cabello.
–Deja de hablar sola, me averguenzas. –dijo Daniel a un lado mio sacandome de mi transe, lo cual me hizo mirarlo rápidamente. Se me habia olvidado que el estaba ahi.
–¿Disculpa ?, a mi me averguenzas tu, parece que si me doy la vuelta me robas. –Dije con algo de molestia dandole la epalda.
Nos quedamos en silencio unos minutos hasta que sin mas hable. Ya odiaba los minutos incomodos con él.
–¿De que color te lo pintaras tú? –Pregunte sin más, volteando a verlo sentandome en el suelo para empezar hablar.
–Me da igual, y no te sientes ahí, debe estar todo sucio.– dice mirándome algo fastidiado. Volteo a verlo con una cara que juro decía en mi frente "matate" lo cual hizo que su semblante cambiará a uno de diversión.
Me cae mal. Me cae muy mal .
–Aveces me caes tan mal. –me levanto del suelo con una notoria cara de fastidio. –De todas formas, ¿no te castigan o algo por pintarte el cabello? –Pregunto aún intentando mantener la conversación.
Niega levemente recargándose en la pared, fijando su mirada al frente.–Mi mamá también se cambia el color del cabello, y mis tíos tienen de diferentes colores, así que estoy acostumbrado. –comenta algo despreocupado.
–¿Tu mamá tenía el cabello color arcoíris? –Levantó una ceja sorprendida.
Que rara su mamá, ¿seguro no es un alien hijo de un unicornio o algo así?, Lo que faltaría.
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Huyendo De Las Sombras. © ✓ [Sin corregir]
Teen Fiction-Ya se te pasará. Sólo es una etapa, pero ya verás que todo pasará pronto. -me dio una sonrisa triste y salió de mi habitación. Por más que lo intentará ya era muy tarde, ya lo había decidido..., iba a suicidarme.