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—Jimin —exclama, acercándose al nombrado que caminaba por los pasillos junto con las demás personas, pues el timbre del receso acababa de sonar—, ¿me esperas en el patio? Yo voy por el almuerzo

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—Jimin —exclama, acercándose al nombrado que caminaba por los pasillos junto con las demás personas, pues el timbre del receso acababa de sonar—, ¿me esperas en el patio? Yo voy por el almuerzo.

—Claro hyung, no te tardes —luego de dedicarse unas sonrisas, el pelirrojo se desvió hacia la cafetería.

Ese día decidió elegir jugo y ramen para ambos, a decir verdad, la comida que daban allí era bastante rica.

Ya con las cosas listas caminó hacia el jardín trasero del colegio pero lamentablemente, en su camino se cruzaron una omega y un beta que le impidieron seguir el paso.

—¿Disculpen?

—Tú eres el famoso Min YoonGi, ¿cierto? —Pregunta el chico dándole una mirada de arriba a bajo.

—Lo soy, pero ahora estoy algo ocupado.

—Oh sí, no te preocupes será rápido —el beta era el que seguía hablando, la chica solo se mantenía al márgen de brazos cruzados con una pequeña sonrisa—. Somos un grupo exclusivo, dentro están los alumnos más deseados o talentosos. Oímos que eres muy bueno en básquetbol y corriendo, ¿cierto? Además eres un omega muy atractivo —Min chasqueó su lengua al oír aquello.

—Perdón pero aún no me he presentado. Y debo irme.

—¿De verdad te irás? —Gruñe la omega—, te estamos dando una oportunidad donde finalmente pueden respetarte siendo parte de nosotros. Además, finalmente podrás dejar a ese molesto y quisquilloso chico que se hace llamar omega.

Y eso fue la gota que derramó el vaso.

La mirada de YoonGi se oscureció por completo, y casi sin detenerse a pensar sus acciones, tomó uno de los paquetes de ramen y se los lanzó, aunque un poco más en la muchacha. Ambos soltaron una exclamación y lo observaron.

—No se me vuelvan a acercar —finalmente, el pelirrojo continuó su camino hasta el patio del colegio, encontrando a primera vista a su querido amigo esperando impacientemente su presencia. Cosa que le hizo sacar una risilla, intentando olvidarse lo que acababa de ocurrir.

—¡Yoonie hyung! —Exclama con una sonrisa—, se tardó.

—Lo lamento Jiminnie —toma asiento a su lado—, ten —le extiende el ramen y su jugo. YoonGi se dedicó a tomar de su cajita de jugo de naranja.

—Hyung, ¿y su comida?

—No tengo hambre —miente, distrayendose en las conversaciones que surgían.

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Yo Soy Alfa [YoonMin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora