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Temprano por la mañana, tomé una de las chompas de lana de Jungkook.

Me la puse sobre la camiseta gigante que había sacado ayer de sus maletas y entonces salí de la habitación.

Cuando habíamos visto a Jungkook caer, había intentado ir con él, pero Namjoon y Yoongi me detuvieron y me dijeron que si yo iba tras él no podría protegerme lo suficiente.

Lo comprendí y por el bien de ambos solo dejé que el jet partiera. Dimos una gran vuelta hasta llegar a donde nos encontramos.

Primero llegamos a América, conseguimos combustible y compramos un departamento para despistar a la gente que nos seguía desde Corea, después de eso tomamos nuevamente el jet y salimos con destino a Japón.

Al llegar allí contactamos con unos amigos de Yoongi que lo habían ayudado en su búsqueda por Jimin hacia ya un largo tiempo. Ellos nos ofrecieron asilo y nos ayudaron hasta que se cumplió una semana más.

Dentro de esa semana veía constantemente las noticias por el televisor, tenía miedo de que se anunciara algo fuera de lo normal o que pasara algo que me indique que Jungkook estaba en peligro, pero a pesar de todo eso nunca hubo nada.

A la mitad de la segunda semana en Japón, nuestros nuevos amigos nos consiguieron transporte para atravesar el mar hasta llegar al puerto de Corea, el Jefe había sido muy lindo con nosotros y nos había comprendido acerca de todo lo que pasábamos.

Y ahora, con tres meses de embarazo, un pequeño bultito en el estómago y una casa protegida en Seúl, finalmente tengo noticias de él.

Caminé lentamente por el pasillo de la casa, aún es temprano para levantarse pero yo no podía hacerlo más.

Ayer por la noche habíamos recibido una carta de Hosoek, en ella nos decía que Jungkook y él están bien y que pronto ejecutaran un plan para acabar con el presidente.

Además de la información y los planos del edificio, Jungkook mandó una carta especialmente para mi.

En ella decía que lamentaba mucho no haberme acompañado en este mes, que cuando volviera se encargaría de llenarme de besos y que no debía preocuparme, que prefería mil veces más que este lejos de él a tener que verme sufrir en un lugar como ese.

Pero aún estoy triste, realmente hubiera deseado tenerlo a mi lado pero también sé que en mi estado no habría sido de ayuda. Solo espero que el día en que volvamos a reunirnos llegue, solo falta un día más.






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Dentro de este tiempo, colaboramos con el presidente. Tuvimos un acuerdo en el que establecimos que le seríamos de utilidad siempre y cuando dejara a nuestra familia apartada.

No confío en él, pero si tengo una oportunidad en la que los demás no se vean involucrados me parece correcto tomarla.

Después de una semana, empezamos a ver en los laboratorios. Siempre estuvimos amenazados así que nadie desconfía realmente de nosotros, por el momento solo hemos reunido información y datos que pudieran acabar con la reputación del jefe.

Pero la verdadera oportunidad apenas se presentó hace unos días, los representantes de los países aliados se reunirían para observar resultados. Durante este mes entero solo había nacido un bebé de entre veinte chicos en el laboratorio, no había sido algo realmente bueno hasta que se le hicieron pruebas al niño. Resulta que el bebé recién nacido había adquirido la mutación naturalmente, lo que lleva al proyecto a una victoria asegurada.

Solo hacía falta mostrar los resultados en la reunión, si esto satisfacía a los representantes se empezaría con un nuevo proyecto.

- Hey Jungkook. - me llamó Hosoek.

Me levanté de la cama con pereza, hoy es domingo y mañana seria el día en que finalmente podríamos poner de rodillas al maldito bastardo que nos había atormentado durante mucho tiempo.

Las armas y todo lo necesario ya estaba equipado, los guardias que habíamos conseguido para aliarse a nosotros también estaban enterados y tenían el plan bien repasado así que lo único que había faltado era mandar una carta hacia donde se encontraban todos.

- ¿Qué es? - pregunté abriendo la puerta.

Hosoek suspiró entregandome una foto.

- Esta mañana la encontré en la puerta, Lisa me dijo que Taehyung se encuentra más calmado después de saber que estamos bien, así que ayer se sacó una foto para que vieras que esta a salvo y que puedas estar tranquilo. - me explicó con una sonrisa. - Parece que el embarazo se le nota un poco más.

Si, se le nota de una forma tan tierna que hace que mis ojos se llenen de lágrimas. Si esto salía bien volvería a verlo, si seguía con esto podría protegerlo y es todo lo que vale la pena en mi mundo.

- No llores. - dijo divertido dándome palmaditas en la espalda. - Tenemos un día de distancia, él y todos los demás están esperado así que no hay que defraudarlos Jungkook-ah. Solo veinticuatro horas para toda la vida.













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Bueno, este es el penúltimo capítulo.

Peroooo aún falta xd este fic tendrá un epílogo y un extra.

El próximo fic será publicado el mismo día que el extra .

Baiii~~\♤♤♤♤♤♤

The Prostitute (Kookv) {[>M-PREG<]}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora