La luz de mi vida (ObiRin)

Ida y regreso

Pasaron algunos meses, el equipo de Kakashi presentó el examen chunin, afortunadamente los tres pasaron y se convirtieron en chunins.

Algunos rumores comenzaron a surgir.

El tercer Hokage sabía que ya era viejo, no podía liderar como se debía a una aldea entera, así que nuevamente después de 12 años decidió volver a dejar el cargo, pidiéndole a Jiraiya ser el quinto Hokage. Jiraiya rechazó el puesto y recomendó a su compañera Tsunade, quien después de regresar a la aldea hace muchos años se convirtió en una ninja dedicada al hospital siendo la líder de este. Sandaime habló con Tsunade, ella después de pensarlo por mucho tiempo lo aceptó, quería cumplir el sueño que Dan y Nawaki no pudieron lograr, quería mostrarles que protegería la aldea por la que entregaron sus vidas y corazones.

Jiraiya descubrió gracias a los constantes viajes que hacía que existía una organización criminal llamada Akatsuki. Por lo que había escuchado, estos estaban en busca de los jinchurikis, no sabía precisamente cuál eran sus ideales o él porque de sus acciones, pero de algo estaba seguro. Akatsuki era peligroso, hasta ahora no habían hecho ninguna jugada llamativa, pero serían de temer en un futuro. Jiraiya quiso seguir con sus investigaciones, decidió hablar con Naruto, pedirle que viniera con él en su viaje. Debía fortalecer al jinchuriki del Kyubi, hacerlo crecer, enseñarle todo lo que sabía. Naruto aceptó viajar con el legendario sannin, le emocionaba la idea de ser entrenado por este señor, debía aprovechar esa oportunidad.

Ahora con el equipo separado gracias a la ida del Uzumaki, Kakashi habló con Sasuke y Sakura. Sasuke decidió entrar a la policía militar Uchiha para entrenar junto con su hermano mayor Itachi y Shisui. Sakura por su parte aprovechó la oportunidad, le pidió a Tsunade convertirse en su discípula. Tsunade aceptó. Rin al ser discípula de Tsunade también ayudaba con sus entrenamientos a Sakura, convirtiéndose como una segunda maestra de la pelirosa.

Cada quien tomó un diferente camino, pero por eso no dejaban de ser un equipo, debían aprovechar esas oportunidades y regresar más fuertes que nunca.

...

Después de dos años y medio de que Naruto se haya marchado de la aldea, este volvió más fuerte, no solo físicamente, sino también mentalmente. Jiraiya no solo le había enseñado cosas de batalla, también le había enseñado valores, ideales y enseñanzas de vida. Sasuke y Sakura no se quedaron atrás. Sasuke solía ser un chico muy antipático, pero eso no le quitaba el hecho de que quisiera ser un grande shinobi para poder superar a su hermano mayor. Sakura por su parte no se quería quedar atrás, aprendió y perfeccionó su ninjutsu médico y sus artes marciales, Sakura tenía mucho potencial, entre Rin, Tsunade y Shizune la ayudaban con sus entrenamientos.

Todos fueron a recibir al rubio Uzumaki a la entrada principal de la aldea, había cambiado físicamente, pero por dentro seguía siendo el mismo.

Kakashi, Sasuke, Sakura, Hinata, Kiba, Shino, Shikamaru, Ino, Chouji, Lee, Neji, Tenten, Rin, Obito y Tsunade estaban en la entrada recibiendo a Naruto y a Jiraiya.

- Pero que guapo te pusiste Naruto. - dijo Rin revolviendo el cabello rubio de Naruto.

Naruto sonrió.

- Naruto-kun, ¿Có-Cómo te fue en tu viaje? - dijo Hinata juntando sus dedos.

- ¡Me fue increíble! Ya los extrañaba chicos.

La expresión de Sasuke parecía de seriedad, pero en realidad le agradaba tener a Naruto de vuelta, el Uchiha no quería aceptar que era su mejor amigo y un gran rival.

- ¿Por qué esa cara Sasuke? ¿No te agrada tenerme de vuelta? - Naruto se acercó a Sasuke y se recargó en su hombro.

- Ya quisieras.

Ambos sonrieron, aunque Sasuke de una manera no muy notaria.

- Naruto, ya extrañaba tener que darte sermones. - Sakura se acercó al Uzumaki y lo golpeó ligeramente con su codo en sus costillas.

- ¡Naruto regresó con todo el poder de la juventud! - Lee levantó su puño.

- ¡La llegada de Naruto merece que vayamos a comer!

- Chouji, tú solo piensas en comida. - dijo Ino riendo.

Tsunade se acercó un poco más a los jóvenes.- Estaba pensando en hacerle una fiesta de bienvenida a Naruto el viernes por la noche. Siempre y cuando haya alcohol.

- Es una buena idea, pero el alcohol solo será para los mayores de edad. - añadió Kakashi.

- Mañana les daré los detalles, estaré organizando la fiesta. - dijo Tsunade.

Todos asintieron con una sonrisa.

Tsunade como era la Hokage le dejó encargados los preparativos de la fiesta a Shizune, esta reservó un salón algo grande en donde festejarían su regreso. Hizo unas invitaciones e invitó a la mayor parte de las personas que convivían con el Uzumaki, y finalmente llegó el día esperado, viernes.

Sakura fue a casa de Rin, desde que se volvió discípula de la sannin ellas dos habían comenzado a convivir más, Rin veía a Sakura como una hermana menor.

- Rin-san, ¿Qué se pondrá para la fiesta?

- Aún no lo decido, estuve pensando en algún pantalón con una blusa.

- ¡¿Qué?! ¡No! Debe escoger algo formal, algo que al llegar a la fiesta todos volteen a verla.

- Pero yo no soy la festejada Sakura-chan. - rió.

- Aún así, estoy segura de que a Obito-san le gustaría verla con algo deslumbrante.

Rin no tardó en sonrojarse.

- ¡Así que vayamos al centro comercial a comprar nuestros vestidos de fiesta!

Sakura tomó la mano de Rin casi a la fuerza y ambas salieron de la morada.

...

- ¿Qué le parece este Rin-san? - Sakura levantó un vestido rosa con lentejuelas y algunos diamantes incrustados.

- Demasiado llamativo.

- ¡Pero que lindo es este vestido! ¡Lo quiero! - Sakura le mostró a Rin un vestido rojo algo informal por encima de las rodillas.

- Se te verá genial, ve a probártelo.

Sakura tomó el vestido y se fue a los vestidores para probárselo, al salir Sakura tenía un brillo en los ojos, aquel vestido le había encantado.

- ¡Se te ve increíble Sakura-chan!

Sakura sonrió y regresó a los vestidores para ponerse de nuevo su ropa, ahora hacia falta el vestuario que usaría Rin.
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