11: ¿Un abrazo?

932 55 69
                                    

24 de junio, 2020.

—Dejé la universidad.— dije. Mis padres quienes se encontraban frente a mí, intercambiaron miradas, luego mi papá habló.

—Pero, ¿Por qué?— su mirada, no la supe descifrar, pero sabia que se decepcionaría, él siempre quiso que estudiara administración de empresas, ya que en el futuro me debía encargar de las empresas de la familia junto con Andrea, ¿pero que podía hacer si no me sentía bien estudiando algo que no amaba?

—Porque no es mi sueño, papá.— tomé aire para hablar nuevamente. —sé que querías que estudiara eso, pero no me hace feliz.— dije. Papá se veía entre decepcionado y triste, y mamá, bueno ella se mantenía en silencio, pero notaba comprensión en su mirada.

—¿Qué se supone que harás ahora, Erin? Debes pensar en tu futuro.— me vio esperando una respuesta, y yo ya sabía que quería hacer.

—Volveré a pintar.— papá cerró los ojos y se sobo las sienes, si sabía que no le gustaría eso. —y si algún día tengo éxito me gustaría abrir mi propia galería.— dije ilusionada, el solo hecho de pensar que tendría mi propia galería algún día me hacía sumamente feliz, porque era mi sueño.

Además, había dejado de pintar cuando Leon y yo terminamos, porque no me sentía bien, pero había decidido poner en práctica en consejo de mamá toma tu dolor y conviértelo en algo hermoso. Es lo que haría.

—¿Estás segura, cariño?— interfirió mamá y yo asentí.

—Más que segura mamá, quiero ser como tú que seguiste tus sueños para convertirte en una de las mejores escritoras.— ella sonrió y asintió. —o como tú papá, tener grandes empresas siempre fue tu sueño, pero no es el mío.— murmuré.

Papá suspiró y pasó su mano repetidas veces por su rostro.

—Solo quiero que me apoyen para hacer lo que amo, ¿pueden hacerlo?— los miré suplicantes, realmente quería que mamá y papá estuvieran de acuerdo con lo que hacía, y si no era así, por lo menos tenía amigas que me apoyarían.

Ellos se voltearon a ver, luego hablaron.

—Está bien.— suspiró rendido papá. —te apoyaremos, pero si no resulta cómo querías prométeme que te involucraras en el negocio familiar.

—Lo prometo.— sonreí.

—Entonces tenemos a la segunda artista de la familia.— exclamó mamá y papá sonrió. Me levanté del sofá y los abracé a ambos.

Sí, era la segunda, porque mi abuelo materno, Lucien era un gran pintor, bastante reconocido en Francia. Mi abuelo era francés, y mi abuela alemana, aquí se habían conocido y aquí había nacido mi mamá, pero eso era historia aparte.

•••

—¡Mamá y papá accedieron a que me dedicara a ser pintora!— chillé en cuanto vi a mis amigas en la entrada al Allianz Arena. Ellas se emocionaron conmigo y nos abrazamos entre todas.

De paso saludé a la pareja de Ariana, Arón y él también me felicitó, era muy agradable.

—Por Dios, eso es asombroso.— Alessia aplaudió, hasta se miraba más emocionada que yo.

—Uff pensé que papá no querría, pero por suerte sí.— Andrea sonrió.

—Es genial Erin, realmente me alegro.— dijo Vic. —¿Entramos ya?— señaló hacia dentro y todas asentimos.

WE BELONG | Leon Goretzka Donde viven las historias. Descúbrelo ahora