WE BELONG | Leon Goretzka

22: Barcelona.

15 de agosto, 2020.

arianawiebe esperando que te encante el mejor país de todos osi osi.
|sergegnabry el mejor país es Alemania
|arianawiebe silencio

alehoffmann te extraño regresa pronto😭

vicmatutes recordándote que no faltes para cuando compre mi vestido o lloro.

sergegnabry regresa hermana, ya te extraño

goretzkateam si vieron la historia de @frenkiedejong se confirma que están juntos:(
|goreliebe mejor, ella no se merece a leon 👍🏼
|bayernwags tú que sabes si se lo merece o no 🙄

manuelneuer ¡Disfruta Grease! te estamos esperando con ansias.💙

annedejong ¡ya casi los alcanzo!

user al final si está embarazada?
|user al parecer sí
|user pero es de leon o de frenkie?🧐

fcbarcelonafamily 😍❤️💙

comentarios desactivados.

A leon_goretzka, kellersisters y 326 más les gustó tu publicación.

frenkiedejong  15 m.

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—¡Ya estoy aquí!— Frenkie y yo volteamos a ver hacia enfrente donde Anne venía corriendo hacia nosotros. Nos dio un beso en la mejilla y luego se sentó en la misma banca. —¿Vamos a comer?

—Aún faltan Olivia y Sergi.— respondió el rubio para luego mirar su móvil nuevamente.

Olivia Alvarado (multimedia) era la esposa de Sergi Roberto, la había conocido ayer que había acompañado a Frenkie al entrenamiento en la ciudad deportiva. Mexicana y sobretodo muy carismática, me había caído bien en minutos. Cuando escuchó que Frenkie me llevaría a recorrer un poco de Barcelona no evitó sumarse ella y a su esposo, así que aquí estábamos esperándolos frente a la hermosa basílica Sagrada Familia.

Leí algunos de los comentarios en la ultima foto que había subido, decidí no responder ni siquiera los de los chicos, nada más les había dado me gusta. Había decidido desactivar los cometarios pues comenzaban a llegar los que había estado evitando hasta entonces.

—Estamos aquí, perdón por tardar pero tuvimos algunos contratiempos.— la indistinguible voz de la mexicana se escuchó y yo saqué la vista de mi móvil para prestarle atención, ella y Sergi nos saludaron a los tres. —¿vamos a comer o aún no?

—Sí, vamos me muero de hambre.— exclamó Frenkie levantándose de su asiento, me tendió la mano a mí y yo la tomé, entrelazándolas.

—Genial, creo que sobro bastante aquí.— Anne bufó y nos siguió. Todos reímos y Olivia respondió.

—A la próxima le digo a Clement que nos acompañe.— ella le guiñó el ojo haciéndola sonrojar, en cambio yo la vi confundida no entendiendo nada y Frenkie frunció el ceño.

—¿Qué?— preguntó él.

Sergi soltó una risa, sin embargo se mantuvo en silencio.

—Ay ya Frenkie, sabes que a Olivia le gusta bromear.— murmuro con nerviosismo.

—Anne...— comenzó pero yo apreté su mano, él me volteó a ver y yo negué.

—Es una broma, tranquilo.— esbocé una sonrisa y él asintió. Volteé a ver a su hermana y en sus labios leí un gracias. —¿A dónde vamos?— pregunté.

—Hay un restaurante cercano por acá y sobretodo venden comida latina, les juro que es de lo mejor.— la pelinegra respondió con cierta emoción.

Todos seguimos la dirección que ella nos indicaba. Los chicos Frenkie y Sergi habían tratado de pasar desapercibidos poniéndose gorras y lentes oscuros y hasta ahora por suerte estaba funcionando.

Finalmente llegamos al tan aclamado lugar, tenía un ambiente agradable y no estaba tan concurrido, mejor para nosotros. Nos situamos en una mesa en forma de u y luego un chico vino por nuestras órdenes, yo no me decidía hasta que la experta en comida de su país me dijo que probara las enchiladas y Frenkie decidió optar por unos tacos.

—Erin, ¿y a que te dedicas?— preguntó Sergi mientras esperábamos por nuestra comida.

—Bueno, soy pintora.— respondí y él me miró con algo de sorpresa. —en enero del año siguiente iré a la universidad de Bellas Artes.

—Eso es genial, ¿y dónde estudiarás? ¿Siempre en Alemania?— ahora interrogó Olivia haciendo que Frenkie me voltee a ver, yo apreté los labios, aún no me decidía por cuál lugar optar y aunque la oferta más tentadora era Barcelona no me hallaba con valor de dejar Múnich.

—Aún lo estoy pensando, tengo tres opciones y es una decisión difícil.— solté una risilla nerviosa al sentir sus miradas encima.

—Deberías venir a Barcelona.— el holandés sugirió encogiéndose de hombros y yo suspiré.

—No lo sé.— murmuré con cierta incomodidad y desvíe la mirada hacia una enorme pecera que estaba en frente.

No quería sentirme presionada con mi decisión sobre donde estudiaría, era mi futuro y yo era la única que decidía lo que sería mejor para mí, por eso aún pensaba donde pasaría los próximos años. Una parte de mí quería salir de Alemania pero la otra me lo impedía, no iba a poder estar sin las personas que siempre había tenido a mi lado cómo a mis padres, Andrea y Alessia. ¿Lo ven? Era una decisión la cual necesitaba tiempo para analizar bien.

Finalmente diez minutos después nuestra comida llegó. Así que entre charlas y anécdotas se nos había pasado el tiempo, cómo a eso de las siete de la tarde habíamos regresado a casa, donde Frenkie, Anne y yo seguimos con el maratón de la serie que habíamos estado viendo.

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annedejong_  2h