Mi refugio//bughead

❝Capítulo 9❞

Los rayos de luz atravesaron la ventana de la rubia, llegando directamente a la cara de los adolescentes quienes se removieron.

—Buenos días, espero no haber pateado mucho anoche. —dijo la rubia mientras se sentaba. Miró al pelinegro quien se estaba despertando y se quedo embobada con su pelo despeinado (quien no xd).

Jughead negó—que yo recuerde no me pateaste. —murmuró. Luego de estirarse se puso serio, cono si hubiera recordado algo—¿cómo estas? Digo...por lo de ayer.

Betty bajo la cabeza—estoy bien. Muchas gracias por ayudarme. Pero quiero que me respondas honestamente, ¿por que lo hiciste? Si te recuerdo a alguien que odias, ¿no deberias haberme dejado?

Jughead trago saliva—jamas dejaría a una chica ser violada. —mentía. Sabía que mentía. Pero no le diría la verdad. —nadie lo merece.

Betty asintió nuevamente, pareció pensar un poco y luego abrió la boca, pero Jughead, como si hubiera leido sus pensamientos, la inerrumpió: —No te voy a decir a quién me recuerdas, todavía no. —Betty asintió(nuevamente xd) y se levantó para ir al baño, dejando a Jughead pensando en la nocha anterior.

Su hermana estaría orgullosa. El lo sabía. Al día siguiente sería su cumpleaños y Jughead no tenía dinero para ir a su antigua ciudad a visitar su tumba. Se sentía mal pero no había mucho que pudiera hacer. Solo llorar todo el día mientras se culpaba de su muerte.

Perdido en sus pensamientos estaba cuando la rubia salió del baño y lo vió, con los ojos cristalizados. Decidió no preguntar, ya era mucho que el la haya acompañado a dormir, no quería invadir su privacidad. Se limitó a salir de la habitación a preparar el desayuno. Jughead agradeció mentalmente que no haya preguntado, no quería hablar con nadie de su pasado, no todavía.

Fue al baño y bajo. Betty estaba preparando tocino y huevos. —¿quieres? —pregunto señalando el cafe. Jughead asintió y tomo una taza, para ir a sentarse junto a la rubia en la mesa. —se que ya lo he dicho mucho, pero en serio, gracias. —jughead sonrió. Se sentía feliz por haber hecho algo bien en su vida. Betty sonrió al ver a Jughead sonreír, no lo había visto hacerlo desde que había llegado a principio de la semana. —Tienes una linda sonrisa, Jug—dijo Betty. La mirada del pelinegro se oscureció y su sonrisa se borró. Betty se alarmo. ¿Había dicho algo malo?

—Gracias por el desayuno, pero me voy. Y me llamo Jughead. —este se paró y se fue con los ojos cristalizados. Su hermana lo llamaba Jug, y Jughead no se sentía a gusto con alguien más diciendolo. Le hacía recordar demasiado a ella. ¿como hacía Betty para recordarle tanto a las personas que más le dolían?

Jughead llegó a su casa y suspiró. Ahora vivía solo, no tenía que preocuparse de si su padre estaba en casa o no, pero se sentía solo.

Extrañaba a su hermana y alejaba a todas las personas que intentaban acercarse a el. Se sentía como una mierda. Era una mierda. Se convencía cada día de eso. Su hermana era lo único que lo mantenía feliz, pero ya no estaba.

*flashback*

Jughead llegó a su casa y suspiró de alivio al ver que su padre no estaba.

Ya no podía ni dirigirle palabra desde su cumpleaños. Subió al segundo piso y se dirigió a ver a su hermana, quien tenía la mirada perdida en la ventana. Jughead trató de contener las ganas de llorar y se sentó a su lado en la cama.

—hola Jb, ¿como estas?—la niña lo miró melancólicamente. —mierda, me voy a disculpar toda la vida. Pero lo siento, fue mi culpa. No hice nada, soy una mierda. —dijo y sus ojos empezaron a cristalizarse.

Su hermana sonrió triste y abrazó a su hermano que ya estaba llorando—no fue tu culpa, fue de papá. No te disculpes. Y no lo digas de nuevo, no eres una mierda. Nunca serás una mierda. Eres muy valiente, ¿tu crees que no se lo que papá te hace?—Jughead miro a su hermana apenado—Jug, ya tengo 14, puedo ver tus moretones aunque andes cabizbajo. Gracias por estar cada dia preocupandote por mí cuando tienes tu mierda con la que lidiar. Te amo. —dijo y le beso la frente. Jughead la abrazo mientras lloraba. La amaba demasiado, ella era más valiente que él y lo sabía.

*fin del flashback*

Jughead se sentó en el sillón y luego de pensar un rato se paró bruscamente y fue hacia su armario. Luego de buscar un poco encontro su alcancía y la abrió. Tenia muy poco dinero y todavía no tenía trabajo, por lo que no podría darse el lujo de viajar. Solo quería ir a la tumba de su hermana, visitarla y decirle que la amaba. Pero no podía. Buscaría trabajo y viajaría en el aniversario de la muerte de su hermana.

Luego de unas horas ya había almorzado y se acosto en su cama. Quería pensar, despejar su mente. Sin darse cuenta se quedo dormido, despertando ya en la noche. Cenó y se acosto de nuevo, esta vez sin dormir. El día siguiente era un día doloroso, un día que debería ser solo risas. Pero Jughead estaría solo, triste, sintiendose una mierda. Él sabía que eso no era lo que querría su hermana, pero estaba muerta, ¿no le iba a poder regañar o si?

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Se viene el cumpleaños de Jellybean y Jughead planea llorar todo el día...excepto que una rubia le cambiará todos los planes;)

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