𝐋𝐄𝐀𝐕𝐄 𝐓𝐇𝐄 𝐀𝐋𝐏𝐇𝐀 ᵏᵒᵒᵏᵛ

𝖈𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 𝖔𝖈𝖍𝖔

𝔄𝔱𝔯𝔦𝔞. 𝔇𝔦𝔞 𝔡𝔢𝔩 𝔰𝔬𝔩𝔰𝔱𝔦𝔠𝔦𝔬 𝔡𝔢 𝔦𝔫𝔳𝔦𝔢𝔯𝔫𝔬.

Atria. Día del Solsticio de Invierno.

Las banderas del reino se izaron desde que la luz del sol tocó la tierra. Todas las personas se habían levantado desde muy temprano, ya que casi todos tenían deberes que atender para que la fiesta se celebrara justo a tiempo.

Hoy era el tercer y último día que se celebraba la fiesta, era el día más importante entre los que marcaban la celebración, ya que culminaría otro año de buena salud y prosperidad en el reino de Atria. Esta vez, los reyes de Vennia habían venido a celebrarlo, ellos, al ser de un reino más cálido que el suyo, era la primera vez que celebraban algo así.

— Hoy deberían salir a disfrutar del último día del festival — mencionó Jackson mientras leía un libro.

En estos días, había tratado de aprender todo acerca de los lobos libres. Así que, siempre andaba muy preguntón, pero el único que respondía sus preguntas, era Yugyeom.

Jungkook no era una persona muy habladora.

— Hoy vendrá un grupo muy famoso de cantantes mujeres, será increíble. También, habrá presentaciones de bailes.

— ¿Usted no irá? — preguntó Yugyeom.

— Puede que sí, pero, no lo creo. Nosotros no tenemos permitido ir, porque uno nunca sabe si alguien decidirá atacar al rey — dijo soltando una risa nerviosa — Además, el reino hace esto, para que sean unos días un poco menos pesados de llevar.

La Gran hibernación se acercaba, y todos estarían muy ocupados al prepararse.

— Tenemos que agradecerle a la Diosa Luna por lo que nos ha brindado

La Diosa Luna es un mito. O eso era lo que pensaba Jungkook.

—̷

Las calles se encontraban llenas de personas, vivas entre tantos colores y olores, llenas de música, comida, entre otros. Taehyung caminaba con más dificultad; aborrecía las fiestas grandes desde que perdió la vista.

— ¡Tae! — escuchó una voz llamándolo — Tae-Tae, que bueno que te veo — dijo encontrándose de frente con el omega.

— ¿Qué quieres, Jimin? Estoy ocupado.

— Sólo será un momento.

— Tengo entregas que hacer.

Jimin miró las manos del omega sosteniendo una canasta con cosas.

— Un momento. Creí que la señora Cheng te había dado estos días libres — dijo Jimin confundido.

— Si, lo ha hecho. El trabajo que tenga que hacer o las cosas que tenga que entregar, no es de tu incumbencia — empezó a caminar, chocando con el hombro de Jimin

— Si es así... sé que tu trabajo empieza desde temprano — dijo pensando — ¿Estás perdido?

— No... — masculló, mientras sus mejillas empezaban a tomar un color rojo.

Jimin lo pensó un poco más. Taehyung era muy directo, le gustaba hacer las cosas lo más rápido posible, terminar e irse; en el trabajo y en la cama.

— ¿Es por tu olfato que no te puedes ubicar bien? ¿Sabes dónde estás?

— Claro que lo sé.

— Bien... Dímelo, entonces.