𝗦𝗨𝗡 & 𝗠𝗢𝗢𝗡 │ DOTAE

FIVE

     La luz que fluye a través de las paredes del vidrio de la oficina de DoYoung, no es cálida, ni reconfortante. Los rayos se sienten como un láser penetrando a través del traje de DoYoung. Está molesto por el fuerte calor. El mes de febrero acaba de comenzar pero el clima se pone cálido al azar.  

DoYoung se recuesta en su silla de oficina de cuero y cierra los ojos. Se frota la sien con su mano derecha. Recientemente, siente que toda cosa y persona lo está molestando. Todos los eventos que sucedieron en las últimas veinticuatro horas se sienten extraordinarios y extraños. Siempre ha tenido su vida bajo control, como una bola de hilo bien acomodada. Pero siente como si alguien hubiera tirado de la cuerda en un intento de desenredar la pelota. DoYoung lo odia.

Después de abrir los ojos nuevamente, DoYoung se sienta derecho en su silla y estira los brazos hacia arriba. Se quita la chaqueta del traje y la coloca en el respaldo de su silla.  Después de asegurarse de que no haya manchas de sudor en su camisa de vestir, también se quita el chaleco. Está a punto de reanudar el trabajo cuando, de repente, escucha pasos corriendo apresurados.

La persona que choca virtuosamente contra su oficina es un rostro que le resulta desagradablemente familiar a DoYoung. Su cabello color cereza es un desastre como si acabara de levantarse de la cama. En sus pies trae las mismas zapatillas Adidas que DoYoung usa cuando lava su ropa. Lleva un pantalón de chándal gris. DoYoung nota una mancha de café en la camiseta blanca que trae TaeYong, junto con una camisa de franela azul. Las gafas descansan sobre el puente de la nariz de TaeYong.  

TaeYong respira con dificultad después de entrar a su oficina; sus manos están en sus rodillas. Unos segundos más tarde, la recepcionista de la planta baja le sigue, sosteniendo sus tacones en su mano. DoYoung puede decir inmediatamente que corrió descalza tras TaeYong— Lo siento —apenas resopla—. No podía-... —tose un poco antes de continuar— No pude detenerlo.

DoYoung levanta una ceja mientras ve a los dos intentar recuperar el aliento. Finalmente, niega con la cabeza y suspira— Está bien. Hablaré con él. Gracias. —la empleada asiente débilmente y sale cojeando.  

TaeYong inhala profundamente y se pone correctamente de pie— Wow —exhala. Su voz casi se quiebra—. Hay un montón de pisos.

—¿Por qué estás aquí? —DoYoung dice de inmediato. Cierra el archivo en su escritorio y mira a TaeYong— Te ves como un vago.

—Oh, cierra la puta boca —las cejas de Taeyong se fruncen mientras su voz vuelve a la normalidad—. No todo el mundo tiene 365 trajes de diseñador para cada día del año.

—Incluso yo no lo tengo —replica DoYoung—. Subiste doce pisos para llegar aquí. ¿No tienes nada importante que decir?

TaeYong frunce el ceño y se sienta en la silla de invitados al otro lado de DoYoung— ¿Cual es la prisa?

—Estoy ocupado.

TaeYong mira la placa de identificación de DoYoung antes de hablar— Sobre ayer. No estaba pensando con claridad. No quise decir lo que dije —DoYoung no responde, así que TaeYong continúa—. Pero eso no significa que me arrepienta. No me disculparé porque cuanto más pienso, más me fastidia —mira hacia arriba, directamente a los ojos de DoYoung—. ¿No estás cansado de eso? ¿De hacer lo mismo durante años?

El repentino contacto visual alarma a DoYoung, y su estómago se siente un poco revuelto— No, no lo estoy —aparta la mirada de los ojos de TaeYong y en su lugar, se concentra en sus cejas—. ¿Qué sabrás tú sobre lo que hago? —su voz suena débil, casi un poco derrotada. El tono sorprende a DoYoung.  

TaeYong se burla— Mi trabajo ha sido seguirte esperando que hagas algo diferente. Lo odio —gira sus ojos—. He estado haciendo esto durante un año. ¿Te imaginas estudiar periodismo durante años de la forma en que lo hice y hacer sólo esto al comenzar mi carrera? 

La repentina dureza en la voz de TaeYong hace que DoYoung se agite un poco— ¿Qué quieres decir? —su voz es baja.  

—No todo el mundo lo tiene tan fácil como tú. Quiero ser periodista. Pero no puedo empezar por donde quiero. Así que empiezo desde abajo. Estoy persiguiendo a las celebridades con la esperanza de descubrir algún escándalo en ellos con la esperanza de acercarme a lo que realmente quiero hacer —la voz de TaeYong es amarga y aguda. DoYoung está a punto de responder al comentario de "fácil como tú", pero TaeYong habla primero—. Sin embargo, no estoy aquí para hablar de eso. Como alguien que tiene la tarea asignada de seguirte día tras día, puedo confirmar que no haces nada.

El corazón de Doyoung golpea contra su pecho. Se siente increíblemente molesto y tiene ganas de empujar al hombre frente a él fuera del edificio. Pero en algún lugar, en el fondo de su mente, hay un sentimiento constante de soledad y tristeza. Está palpitando, de la misma manera que lo ha hecho durante años— No llames nada a mi trabajo. —dice, su voz se quiebra al final.  

TaeYong tira lentamente del final del hilo, insitando a que la bola se desenrede. DoYoung sólo puede quedarse de pie y mirar mientras los pedazos de control que ha acumulado comienzan a deslizarse entre sus dedos como arena. No puede entender por qué está sucediendo, pero es así. DoYoung se siente indefenso y solo, y simplemente quiere que las cosas vuelvan a estar tranquilas y normales.  

—¿Así que no estás cansado? ¿Realmente quieres seguir viviendo de este modo? —la voz de TaeYong es fría y suave. Pero para DoYoung, se siente burlona y maliciosa.  

TaeYong observa a DoYoung apretar el puño hasta que sus nudillos se ponen blancos. Mira el rostro de DoYoung, buscando una reacción. Pero sólo parece vacío. Finalmente, Doyoung responde.  

—No —susurra. Su puño se abre, pero sus manos casi tiemblan—. No lo estoy. 

TaeYong ha tirado del hilo demasiado fuerte, y la bola se está desenredando demasiado rápido.  

DoYoung se cae de la piedra a la que ha estado pegado durante años. 

Pero poco sabe él que TaeYong serán las suaves olas que lo llevarán al siguiente paso.

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ESTA ES UNA TRADUCCIÓN. El autor original es yeondreams