❛Kim DoYoung no es de los que hacen amigos. Su duro y estricto mundo sólo le recuerda su fría realidad, una que lo obliga a abandonar ideales superficiales y metas brillantes. Se dice a sí mismo que sus acciones están junto al deber, por lo que, aun...
En la barra tenuemente iluminada hacia la parte trasera del club, DoYoung se sienta en su usual asiento, trazando líneas distraídamente en la madera y tomando pequeños sorbos de su vino. Hoy, el cantinero guarda silencio y no dice ni una palabra. El club en sí está relativamente está lleno de multitudes. Combina a DoYoung con el fondo pero lo contrasta y lo distingue del resto de la gente. Toma otro sorbo de vino cuando su paz se interrumpe de repente con un mensaje de texto de su teléfono.
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Después de recordarse a sí mismo que debe silenciar el número de TaeYong más tarde, desliza su teléfono en el bolsillo de su chaqueta y se prepara para el bombardeo de preguntas. Ve a TaeYong caminando hacia la barra. Sus gafas permanecen apoyadas en su nariz pero su cabello está sólo apenas arreglado, como si se hubiera pasado un peine por su cabello color cereza una vez y ya estuviera satisfecho con eso. TaeYong usa la misma franela azul de esta mañana, pero reemplazó la camisa blanca por una negra limpia. DoYoung mira el agujero en los jeans negros de TaeYong; no puede decir si TaeYong simplemente está en bancarrota o está a la moda. Lo que más se destaca es la sonrisa vibrante en el rostro de TaeYong. La sonrisa brillante es la misma que la de un niño que recibe su dulce favorito.
DoYoung está absolutamente aterrorizado.
TaeYong se sienta en el taburete junto al de DoYoung. Le sonríe al camarero y le dice:— Una cerveza, por favor. Pura. Y coca. En las rocas¹.
—Podrías haber dicho sin y con hielo. —murmura el camarero en voz baja, pero le da a TaeYong sus bebidas.
Todo el tiempo, DoYoung evita mirar a Taeyong. Traza la madera, pero sus palmas están un poco sudorosas. Toma un sorbo más largo de lo habitual de su vino.
—¡Entonces! —TaeYong comienza alegremente después de tomar un largo trago de cerveza— Esto es una locura. ¡El próximo CEO de Skyline me invitó a salir!
Doyoung casi escupe su vino— No —dice bruscamente—. Definitivamente no es eso.
—Estaba bromeando —otro trago a la cerveza. TaeYong está medio terminándosela—. Fue tonto preguntarte cómo obtuviste mi número. Eres rico. Duh. Por supuesto que tienes acceso a cosas así. La verdadera pregunta es, ¿por qué me llamaste aquí? —mira a DoYoung, curioso y expectante.
Por alguna razón, Doyoung no puede responder la pregunta. A él también le gustaría saber la respuesta— No lo sé —dice después de un rato—. ¿Por qué lo hice? —la pregunta es más para él que para TaeYong. Aguanta la respiración durante dos segundos y vuelve a hablar— Me hiciste algo. —le dice a TaeYong.
Una risa encantada se escapa de la boca de TaeYong— Sé que soy bastante encantador, pero enamorarse de mi tan rápido es un poco-...
—No —DoYoung interrumpe, sintiéndose irritado—. Deja de bromear. Desde que empezaste a molestarme, algo se siente mal. No me siento bien —DoYoung vuelve a mirar la barra de madera—. Hiciste algo.
—Todo lo que hice fue llamarte por tu falta de interacción social —TaeYong termina su cerveza—. Tal vez solo estás solo. —dice con un tono casual, pero las palabras golpean a DoYoung con fuerza.
—¿Es eso realmente? —niega con la cabeza— No me importan esas cosas. Eso no está bien. —por dentro, siente pánico y preocupación, pero la voz de DoYoung es lisa como el hielo.
TaeYong pasa a su coca y toma un pequeño sorbo— ¿Por qué no te importaría? Todas las personas necesitan a alguien con quien pasar el rato. La vida sería tan aburrida sin amigos y familiares. ¿Cuál es el punto de vivir si no estás siendo feliz con los demás? —toma otro sorbo de su coca y mira pensativamente a DoYoung— También podrías ser un zombi sin propósito en la vida.
De repente, DoYoung termina el resto de su vino de una sola vez— No entiendo —su voz comienza a sonar un poco ansiosa y siente que vuelve a perder el control—. Si es así, ¿por qué me molestaría ahora? He estado bien antes. —le da a TaeYong una mirada nerviosa. TaeYong se sorprende a sí mismo; el frío director es ahora un tren humeante que se desvía de sus vías.
—Quizás siempre te estaba molestando —dice con cuidado—. Y te acabas de dar cuenta ahora —aparta la mirada de DoYoung y juguetea con sus dedos—. Eres un tipo inteligente. Es obvio que todo lo que haces es trabajar. Nunca te concentras en hacer cosas inútiles.
—Si son inútiles, ¿por qué debería hacerlo?
—Porque es divertido —dice TaeYong, sintiéndose repentinamente emocionado—. Escucha, el hecho de que no sea algo que te brinde ningún beneficio físico no significa que sea inútil —sacude la cabeza y trata de frenar sus palabras—. Hay cosas que no te dan beneficios tangibles, pero te hacen feliz. Como dulces o juegos, ¿sabes?
—Detesto las cosas así. —dice DoYoung con cansancio.
—Hombre, te estás perdiendo la dulzura de la vida. No estás ganando nada viviendo de esta manera. No eres realmente feliz —TaeYong, sintiéndose decidido, apresura sus palabras—. Te mostraré lo mucho que te puedes divertir sin hacer nada.
La última frase de repente hace que DoYoung vuelva a su solitaria realidad— ¿Qué estoy haciendo? —murmura para sí mismo. Sin más, se levanta y se va.
TaeYong sólo sonríe para sí mismo, ya planeando lo que haría a continuación. Termina su coca y sale del club con pasos ligeros.
(💌) ESTA ES UNA TRADUCCIÓN. El autor original es yeondreams
¹ En las rocas: es una expresión para pedir hielo cuando estás en un bar.
