𝗦𝗨𝗡 & 𝗠𝗢𝗢𝗡 │ DOTAE

FORTY NINE

     TaeYong sólo se siente adormecido por todas partes. Se acuesta en la cama y mira al techo, su cuerpo está inmóvil a excepción de sus dedos golpeando enérgicamente la manta. No puede permitirse pensar; tan pronto como lo hace, lo envuelve la culpa y una sensación de autodesprecio. Está tan molesto con su propia reacción por como se sorprendió de que DoYoung alguna vez lo haya visto como algo más que un amigo.

No es que TaeYong haya visto a DoYoung como algo más que un amigo. Pero confunde a TaeYong porque nunca pudo imaginarlo. ¿Kim DoYoung? ¿Un heredero corporativo? No había forma de que él se permitiera siquiera enamorarse de alguien tan fuera de su alcance como ese. Pero DoYoung hizo exactamente eso. DoYoung miró más allá de sus diferencias y vio a TaeYong por quien era. El pecho de TaeYong pica hasta la boca del estómago porque él no había hecho lo mismo. Se siente superficial. 

La mente de Taeyong vaga hacia las posibilidades en las que quiere darse una bofetada por pensar. ¿Y si sólo mirara a Kim DoYoung? ¿No como heredero corporativo, sino como el hombre apacible y tranquilo que es? ¿Un hombre que es más reflexivo de lo que se conoce a sí mismo y un hombre que se reconforta en su silenciosa comprensión? TaeYong casi patea sus mantas por la frustración. Cree que es injusto y terrible por pensar en esto ahora y no antes. 

Un quejido escapa de su boca. Él piensa que es terrible, realmente lo cree. Cierra los ojos, tratando de conciliar el sueño. Pasan horas antes de que lo haga, pero todo lo que puede pensar hasta entonces es que DoYoung lo ayude a seguir adelante.

.    .     .

—TaeYong, quiero que conozcas a alguien. —le dice el productor a TaeYong, que acaba de llegar al trabajo.

Las palabras apenas se registran en la mente palpitante de TaeYong. No puede decir si es por la falta de sueño o por el estrés que ha tenido al pensar en DoYoung, pero la parte posterior de su cabeza arde de dolor— ¿Qué?

—Ella es Sung YooKyung. ¿La conoces, verdad? Ella presenta las noticias de las 7:00 a.m.

La mujer de pie junto al productor sonríe cálidamente— Hiciste un gran trabajo la última vez, TaeYong. —dice.

TaeYong sólo puede asentir mientras apenas le sigue.

—Está embarazada. —continúa el productor.

—Uhhhh. —TaeYongs arrastra las palabras, sin saber muy bien cómo responder—… ¿Felicitaciones, supongo?

YooKyung se ríe alegremente y niega con la cabeza al productor— TaeYong, me mudaré a un lugar un poco más local. Ya que estoy comenzando una familia y todo, quería ir a un lugar un poco más suburbano. Creo que serás un gran reemplazo para mi horario.

Las cejas de TaeYong se disparan con sorpresa— ¿En serio? —la severidad de su dolor de cabeza de repente se siente minúscula.

—Entonces, ¿lo quieres o no? —pregunta el productor con impaciencia. 

—¡Por supuesto! —TaeYong sonríe ampliamente— ¡Buena suerte con su hijo! —dice, volviéndose hacia YooKyung y estrechándole la mano.

.    .     .

TaeYong se encuentra nuevamente en la habitación de SungYeol, acostado en su cama y contando la cantidad de veces que su propio pecho sube. Habiendo comenzado el año escolar, la computadora de SungYeol está apagada y se concentra profundamente en sus libros de texto y tarea. TaeYong no puede evitar sentirse un poco mal por interrumpir su momento de concentración, pero se encuentra a sí mismo para hacerlo de todos modos.

—Siento que han pasado tantas cosas. —dice TaeYong lentamente, mirando de reojo a SungYeol. 

SungYeol cierra suavemente su libro— Iba a tomarme un descanso de todos modos —gira en su silla para mirar hacia TaeYong— ¿Qué quieres decir?