FATAL ATRACCIÓN - TERMINADO✔

Capitulo 20. Pruebas

Irina

(Seis meses de embarazo)

Despierto, bostezando. Nuevamente, la cama estaba vacía. Apenas, podía levantarme, mi barriga, había crecido considerablemente. Eso, si seguíamos haciendo el amor, pero ahora con diferentes posiciones. No podíamos dejar de hacerlo, por más que quisiéramos. Éramos insaciables. De seguro salió a comprar o entrenar. No lo sabía con exactitud. Me sorprende al ver una nota, en la mesita de luz.

"Fui a investigar, vendré mas tarde"

Era extraño, era la primera vez, que me dejaba sola. En este tiempo, erick junto a zigor, investigaron el paradero del científico, argus, y confirmaron sus sospechas, el trabajaba como encubierto. Así, esta maldita organización, descubrieron mi embarazo, mezclados con el ADN de zigor. Estaba asustada, porque quería a mis bebés. Era un gran riesgo. Debía ocultarlos de esas mentes podridas.

Acaricia mi notable barriga. Podía sentirlos mover. Después, prepara el desayuno. Adoraba la manzana, y miel. Tenía antojos de esa fruta y miel. Por fortuna, no había aumentado mucho de peso. Era pura panza. Luego de terminar el embarazo, prometí, hacer dieta y bajar esos kilos (libras) de más.

Tenía puesto, la remera azul de zigor. Casi nada me entraba a causa de mi enorme barriga. Suena mi celular. Era gala. Avisándome que había llegado. Me detengo en seco, cuando observo a gala, rodeada por varios hombres vestidos de negros. Le cubrían la boca y uno de ellos, utilizaba su celular. Intento correr, pero alguien, me lanza, algo sobre mi cuello. Todo, se puso negro.

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Despierto, aturdida. Al lado, estado mi mejor amiga, desmayada. Estábamos, en una extraña, habitación blanca. ¡Otra vez, me habían secuestrado! Maldición. Y ahora, también, gala, estaba conmigo. Estaba aterrada, tenía miedo, por sus bebés. Sollozo de la angustia y dolor. Esto era un infierno. Quería que zigor, estuviera comnigo.

Gala despierta, aturdida. Solloza al verme y nos abrazamos.

─Lo lamento, irina. Ellos me siguieron y me sacaron el celular. Querían que salieras de la casa─ me decía entre sollozos. Limpie sus lágrimas, tratando de calmarla.

─Tranquila, gala. Saldremos de esta, como sea. Estaremos juntas ¿Si?

Afirma con la cabeza. Ella estaba temblando del miedo. Cuando, todo parecía empeorar. Se me rompe la fuente. Gala y yo, nos miramos aterradas. Estaba desesperada y quería llorar.

Al instante, sentí las primeras contracciones, no eran tan dolorosas, era soportable. Inhíbala y exhalaba. Mientas, gala, sostenía mi mano izquierda. En esos, llega, la doctora, de la última vez. Con tres hombres robustos.

─¡Salgan de aquí!─ Exclama gala, protegiéndome─ No le harán nada.

─Tranquila, solo la ayudaremos a dar a luz─ decía la doctora. Aunque no confiaba en ella, y gala tampoco.

Los dolores, era más insoportables. Apenas podía mantener los ojos abiertos. Estaba bañada en sudor. Me dolían las costillas, por la presión que estaba ocasionando los bebés. Me faltaba el oxigeno, lo podía percibir. Los bebés, eran fuertes.

La doctora, nota que me faltaba el oxigeno. Al instante, me colocan la máscara de oxigeno. Ella abre mis piernas, revisando, cuanto había dilatado.

─Estas completamente dilatada, para pujar─ Me dice, con firmeza─ A la cuenta de tres, empezaras a pujar con todas tus fuerzas.

Suspire y comencé a pujar. Sentía mucho dolor, como si algo estuviera saliendo e allí abajo. Me dolía y mucho. Era una sensación, tan extraña. Estaba bañada en sudor, sentía la mano de gala, sosteniéndome. Y escucho, escucho llorar a mi bebé. Lloraba con fuerzas. Solloce, al verlo. Era un niño de cabellos negros. La doctora lo envuelve con mantas y me lo alcanza. Le paso a mi bebé a mi mejor amiga. Sentía la necesidad de pujar. Esta vez, fue más fácil de hacerlo. Y escucho llorar a mi pequeña.