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—CURACIÓN—
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IRVETTE.
HABÍAMOS LLEGADO, TODOS, sanos y a salvo. Todos estábamos en el apartamento de Bucky, el cual se veía un poco incómodo con tanta gente en su casa. Estaba nerviosa, ahora de verdad tendría que enfrentar la situación. La situación de que tenía un hermano mayor apunto de quebrarse y que sentía un enorme rencor y enfado hacia mi y mi familia.
Luke estaba apoyado en una de las paredes, con la cabeza hacía atrás y los ojos cerrados, a su lado estaba Dani, quien no decía nada pero le miraba de vez en cuando. Enda...digamos que él estaba en shock, acababa de descubrir que su mejor amiga era malvada y trabajaba para una de las organizaciones de espías más peligrosas del mundo, además de haber sido tomado como rehén. Pietro andaba de un lado para otro del diminuto apartamento, frotándose la barbilla y pensando en dios sabe qué.
Me acerque a Bucky, que miraba a todos de forma analítica.
—¿Qué piensas?—dije mirándole aunque él no lo haya hecho.
—Que tenéis que salir de aquí.—me miró.—Somos demasiados, y muchos estamos siendo buscados, es peligroso que estemos todos juntos.—me explico con voz suave y profunda.
Le mire dubitativa, por supuesto, y como siempre, tenía razón.
—Pero, ¿cómo lo hacemos? Enda y Luke necesitan ayuda.—dije angustiada, deseaba estar con mi hermano pero Enda estaba mal, no podía ignorar eso.
Bucky pareció pensar un poco, hasta que vi como a sus ojos llegaba una idea.
—La prioridad es Luke, ese chico parece que esta apunto de explotar. Literalmente.—me miro alzando las cejas.—Dani, tú y él deberíais ir a ver a tus padres, son los más indicados para esto y mientras Pietro puede volver a la base y cubrirte. Yo llevare a Enda a su casa y me asegurare de que este a salvo, cuidaré de él.—dijo al ver ponía cara de preocupación.
Pietro fue el primero en irse a la base, Dani trataba de convencer a Luke de irse a casa de mis padres y yo me acerque a Enda.
—¿Estás bien?—le pregunte con cautela, él enfoco su mirada en mi y se puso algo más serio.
—¿Cómo voy a estar bien? Mi mejor amiga ha amenazado con matarme.—dijo indignado y alterado.
Baje la cabeza algo avergonzada.
—No sabes cuanto siento haberte metido en todo esto, era lo que menos quería.—dije apenada.
Enda me miro con una expresión de pena en el rostro mezclado con un poco de molestia.
