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La casa de Beomgyu era relativamente grande, en comparación a su pequeño departamento. Su habitación era linda, tenía una cama matrimonial con cobijas esponjosas y una ventana al jardín que sabía, su abuela cuidaba con mucho cuidado.

-Listo, usa esto, Yeonnie-

-Gracias Beom-

Cambió sus prendas por la pijama que su amigo le prestó. Era calientita y olía a suavizante de telas floral. Bastante grande para su tamaño pero aun así perfecta.

-¿Por qué tú amigo sabe quién soy?- preguntó Beomgyu acomodándose en la cama

-No es que supiera quién eras. Solo que le he hablado de ti-

-¿Como por qué yo no sé nada de él?- le reprochó -¿Y por qué le cuentas de mí?-

Yeonjun fue y se acurrucó con Beomgyu, a veces el drama salía de él y le daba por hacerle muchas preguntas.

-Eres mi mejor amigo, ¿Cómo no voy a hablar de ti?-

-¿Pero por qué no me habías contado de él? ¿Qué privilegios goza? ¿Hay alguien más a quien me estés escondiendo?-

Le dio un besito en la mejilla y lo abrazó como si fuera un enorme peluche.

-Tal vez...- susurró

-¡Yeonjun!-

-Shh... Tu familia ya está dormida-

-¿En serio soy tu mejor amigo?- preguntó como reclamo

-Lo eres-

-Entonces cuéntame todo Yeonjun, todo-

Se restregó en el cuello de Beomgyu y rio, su amigo era gracioso cuando se ponía así. Celoso.

-Bueno, Taehyun es el heredero de una familia muy adinerada-

-De eso me di cuenta. Dime todo aquello que no me has dicho-

Meditó un poco y con una voz muy suave y avergonzada terminó por hablar.

-Estoy algo confundido... ¿Recuerdas a Kai?-

-El jugador de americano-

-Pues... Él... Él... Él...-

-¡Oh Yeonjun! Ya dime-

-Me hizo tener un orgasmo- susurró y se escondió en el cuello de su amigo

-¡¿Qué?!-

Al instante Yeonjun le cubrió la boca y le advirtió con la mirada que moderara su tono de voz.

-Es que... Él ha sido lindo conmigo últimamente. Dice que quiere ser el único-

-Claro, no quiere que alguien más te toque y que seas su objeto sexual, solamente-

-No...- dudó -¿Seré solo su objeto sexual?-

-¿Acaso le ves otro interés en ti?-

Hizo un puchero y vio a Beomgyu a los ojos, en ellos brillaba la esperanza de que Kai no lo quisiera solo por sexo.

-Puede que él tenga un interés diferente en mí-

-Yeonjun, no te ilusiones, por favor-

-Pero estoy confundido, ¿recuerdas al chico de la biblioteca?-

-Tu amor platónico-

Asintió y se apartó del cuerpo calientito de su amigo para acomodarse mejor en la cama.

-Pues... Ya sé cómo se llama... Bueno... Muchas cosas pasaron-

-¡Choi Yeonjun! ¡¿Por qué no me habías dicho?!-

Mi preciosa bola de arroz >>> soojun  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora