❝𝖳𝖾 𝗉𝗋𝗈𝗍𝖾𝗀𝖾𝗋é 𝖼𝗈𝗇 𝗆𝗂 𝗏𝗂𝖽𝖺, 𝖢𝖺𝗋𝗅 𝖦𝗋𝗂𝗆𝖾𝗌❞ (𝐓𝐖𝐃)

T1/Capítulo 11: Destino Marcado.

La noche transcurrió “normal” y tranquila para mi gusto, era obvio que nadie había dormido y no tenían intenciones de hacerlo, sólo algunos del grupo amontonaban a los caminantes en un lugar apartado para luego quemarlos como una fogata. Hacían eso hasta que los primeros rayos de luz de la mañana se hicieron presentes.

Ahora estoy sentado a un lado de Carl, mirando el entorno tétrico que tenía hace unas horas atrás, hace rato que traté de ayudarle a Jim a quemar los cuerpos de los caminantes, pero éste y Dale no me dejaron.

Y algo más destacable, es que Andrea no se había separado del cuerpo fallecido de Amy, bueno, no del todo, porque al haberla mordido podría convertirse en cualquier momento y ese era otro tema aparte.

—Lee...— El menor de los Grimes me llamó, sin despegar mi mirada en el panorama.

—¿Sí?

—T-Todo va a estar bien, ¿verdad?

No pude responder ante ese comentario tan inocente y simple, era más que obvio que Carl tenía miedo de que esto volviera a pasar, sobretodo cuando su padre no estuvo desde el principio.
No quería mentirle, tampoco quería ilusionarlo con un típico: «“Todo va a estar bien”»

Así que no tuve más remedio que negar lentamente con la cabeza, volteándome a verlo directamente a su iris azúl, respondiendo.

—No lo sé, Carl. Ya no lo sé.— Y es que mi actitud realista salió a la luz, jamás creí que volvería a sentir este nuevo sentido de la supervivencia, justo como lo vivía con mi antiguo compañero.

Daryl se encargaba de que los caminantes no volvieran a reanimarse, cosa que veo realmente eficiente por si los zombies no “murieron” del todo.

Fijé mi vista en la silueta de Andrea, ésta nos daba la espalda a todos. Miré ahora que Rick comenzó a caminar hacia acá, asumo que terminó de contactarse por la radio que según también Morgan lo haría. De nueva cuenta miré a Carl quien estaba con la mirada gacha y triste, moviendo sus manos con nerviosismo.

Quise ir con Rick y con los demás para ver de qué hablaban, pero no me metería, así que con pesar me levanté, y caminé hacia ellos con calma.

—¿Sigue sin moverse?

—Ni siquiera nos habla.— Agrega Lori hacia Rick, sentada a un lado de Carol. —Estuvo ahí toda la noche. ¿Qué hacemos?

—No podemos dejar así a Amy, tenemos que resolverlo. Cómo a los demás.— Murmuró Shane con lástima, viendo también a la pelirrubia de ojos verdes.

Rick pareció comprender por lo sucedido, asintiendo, nos miró, hasta chocar su mirada en mí.

—Yo sé lo explicaré.

Dándonos una última mirada calmada, caminó hacia donde estaba Andrea, ésta ni sé inmutó, hasta que Rick no llegó ni un metro y la pelirrubia ya le tenía apuntando a la cabeza con su pistola.

«Genial. Andrea perdió un tornillo». Fue lo único que pensé con sarcasmo, me alarmó bastante que ella sacara el seguro, no dudé en sacar mi arma por si Andrea se pasaba de lista. Esa no era justificación por la pérdida de su hermana.

A medida que me acercaba a la escena, al parecer el pelicastaño notó de mi presencia que me miró en modo de advertencia, queriéndome pedir a la vez que no me acercara, que él lo tenía todo bajo control.

—Sé como funciona el seguro.— Pronuncia Andrea con seriedad mirando a Rick amenazante. No tenía intenciones de bajar su arma, y eso me ponía nervioso.

—Está bien, está bien.— Decía Rick en son de paz, tratando de calmar el tenso ambiente que empezó a emanar la escena. Rick empezó a retroceder lentamente sin quitar su mirada apenado por lo sucedido, apenas murmurando audible ya que lo alcanzo a escuchar. —Lo siento.