«Vamos Lee, ya casi llegas», apenas divisé el límite de la carretera, podía notar a la distancia los autos entre el bosque. Sonreí levemente, he llegado a la carretera, espero que Sophia esté bien.
Olvidé que venía cansado por lo acontecido, está vez corrí hacia el barranco para subir con dificultad. Ya a la cima, ví la carretera, entre los autos noté que aún está la autocaravana de Dale, no sé habían ido todavía. Un alivio me llenó en el cuerpo, hasta pisar el suelo del cemento que daba la carretera, sin dudar caminé a pasos rápidos dónde se encontraban los demás.
Al verlos, sonreí medianamente. Me acerqué sigilosamente hasta que Carol sintió mi presencia.
—¡Lee!—. Ella no tardó en acercarse, mi sonrisa se borró al verla. Su rostro estaba lleno de lágrimas al igual que hacía muecas al hacer contacto visual conmigo. —¡¿Dónde está Sophia!? ¡¿No está contigo!?
Comenzó a preguntarme alterada, a punto de responderle, noté que los demás no tardaron en acercarse a mí.
Sin dudar, le respondí de inmediato. —Carol, tranquilícese.— Alcé un poco las manos intententando apaciguar el tenso ambiente que comencé a sentir. —¿Ella no está aquí?
—¡No! ¡¿Por qué dejaste a mi hija sola!?
Al instante, comprendí que por las reacciones de los demás que no pasé por alto, estaban preocupados y algo ansiosos viéndome, «Entonces... Sophia no está aquí». Traté de mantenerme lo más tranquilo posible para explicarle a la señora Peletier.
—Como saben, ella huyó gracias a los caminantes que la sorprendieron, la seguí antes de que la perdiera de vista.— Empecé a resumir la historia. —Cuando la encontré, traté de tranquilizarla, para ese entonces Rick apareció diciéndonos que dos caminantes lo habían seguido. Él nos ocultó y nos dió instrucciones de que nos mantuvieramos ocultos hasta que él volviera.
—¿Y luego? ¡¿Dónde está Rick!?
Lori me pregunta exasperada dirigiéndose hacia mí con una cara de molestia.
—¿Sophia...?
Miré a la señora Peletier, ella aún está llorando por su hija, abrazándose ella misma mientras era consolada por Andrea.
Bajé la mirada, aún así respondí está vez con seriedad. —Ella se fue y yo la seguí. Luego la perdí de vista.
Nada, tan sólo mi respuesta bastó para que nadie objetara nada, apenas levanté la mirada. Me sorprendí al ver que el señor Walsh se acercó a mí a grandes zancadas, con cara de pocos amigos.
—¡¿Cómo qué la perdiste de vista!? ¡Estaban juntos! Además...— No niego que su mirada asesina me asustaba, pero aún así, no me dejé intimidar, manteniéndole la mirada de la misma forma. —¡Por tu insolencia disparaste y haces que casi nos maten a todos!
—¡Shane!—. Lori y Glenn se interpusieron, pero tan sólo él los quitó hasta acercarse a mí. —¡Cálmate!
—¡No!—. Apenas me tomó por sorpresa que el pelimarrón me sujetó fuertemente de mi brazo izquierdo, justo en mi cicatriz.
—¡Agh!
Solté un quejido sonoramente, mandándole una mirada impresionada a Shane por sus acciones.
—Escuchame, mocoso.— Mascuya entre murmullos dirigiendo su palabra a mi persona, yo no le dejé de ver sorprendido sin poner resistencia, sabiendo que él es más fuerte que yo. —No vuelvas a disparar a lo loco, ni intentes hacerte el héroe de la historia. Gracias a tus estúpidos impulsos de disparar, a tus acciones, nos habrías matado.— Él no dejaba de mandarme una mirada asesina, de odio. —No porque seas el “compañero” de Rick harás lo que se te plazca. Para eso, existen los límites.
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❝𝗧𝗲 𝗽𝗿𝗼𝘁𝗲𝗴𝗲𝗿é 𝗰𝗼𝗻 𝗺𝗶 𝘃𝗶𝗱𝗮, 𝗖𝗮𝗿𝗹 𝗚𝗿𝗶𝗺𝗲𝘀❞ (𝐓𝐖𝐃)
RandomAclaraciones: ➜ La serie y los personajes no son míos, son basados en los cómics de The Walking Dead; creado por Robert Kirkman, Tony Moore y Charlie Adlar. ➜ El protagonista será basado en un personaje icónico de la saga de juegos de Telltale Games...