27

11.2K 1.1K 75
                                        

Han pasado casi dos semanas desde que dejé la casa de Tayler, por suerte Halsey me ayudó a encontrar un pequeño apartamento a las afueras de la ciudad, para su gustó de ella estaba demasiado lejos y aburrido, me había ofrecido su casa para vivir ahí un tiempo pero para mi era justo lo que quería, alejado de todo y aunque solo tenía un pequeño cuarto, baño y comedor era perfecto para mi. Pero había un problema y era que estaba completamente vacío, al parecer había dejado pasar ese pequeño detalle pero por lo menos tenia incluida una cama y una pequeña mesa.

No había visto a Tayler desde que dejo su casa hace dos semanas, lo extrañaba demasiado pero ya había tomado una decisión y no podía echarme para atrás, aunque no podía negar que esperaba por lo menos una llamada o mensaje de su parte, por lo menos para saber si ya estaba en mi nuevo apartamento. Le había mandado un mensaje hace una semana contándole que había encontrado donde vivir y hasta le mande la dirección, pero no recibí alguna respuesta de su parte y eso me decepciono un poco, quizá estaba enojado conmigo. 

Tenia un poco de ropa ya que había llevado a la casa de Tayler para estar ahí un tiempo pero en poco tiempo usaría toda y no tendría que ponerme ya que estaría sucia, por suerte había visto una lavandería a solo una cuadra de aquí así que podría lavar ahí mi ropa. No sabia cuanto tiempo estaría aquí pero esperaba acostumbrarme en poco tiempo. Había recibido algunas llamadas de los socios de la empresa pero ninguna la había contestado, estaba empezando a estresarme ese tema así que ese mismo día tome una decisión, la empresa no podía seguir sin alguien que la manejara y no podía dejar pasar un día más, tome mi celular y marque el tercer numero en la agenda.

- Nora, cariño, que sorpresa. - Escucho su voz del otro lado del celular. 

- Hola ma. - Es un poco raro estar hablando con ella por celular, hace mucho no lo hacia. 

- ¿Pasa algo?

- Necesito hablar contigo, es sobre la empresa. - Ella se queda en silencio. - ¿Puedes venir a mi casa? 

- Estaré ahí lo antes posible, ¿Estas con Tayler? 

- No...yo te mando la dirección. 

Le mando la ubicación por mensaje y en solo una hora ella esta ahí, parece un poco confundida de que este en un nuevo apartamento y además que este completamente vacío, quizá hubiera sido mejor que nos viéramos en un café. 

- Lo siento, olvide que no tengo muchas cosas aquí.

- No pasa nada cariño, vi un restaurante por aquí cerca, vayamos ahí. 

Yo acepto ya que es mejor que estar de pie, salimos del apartamento y subo en su coche, tenia demasiadas preguntas que hacerle. ¿Cómo era posible que aun conservara ese coche? 

Todos estos días había estado sobreviviendo de solo comida rápida así que comer algo que no fuera hamburguesas me hacia un poco de ilusión, pido una pasta y un corte de carne, sabia que eso me haría gastar más de lo que tenia contemplado pero no me importo, mi madre opto por una ensalada y una copa de vino, siempre había sido tan elegante.

- ¿Pasa algo con Tayler? - Pregunta de golpe.

- Solo estamos tomando un poco de tiempo. - Ella asiente. 

- Es un buen chico, siempre supe que terminarían juntos. - Yo sonrió un poco, aun sentía un poco de rencor, me había dejado en los momentos más difíciles de mi vida. - Entonces...

- Quiero hablar contigo sobre la empresa. - Le digo. - Creo que lo mejor es que tu te hagas cargo de todo. - Ella parece estar sorprendida. 

- ¿Estas segura Nora? Creo que haz hecho un gran trabajo y los socios te aman... - Espera, ella como sabia eso, al parecer se da cuenta de mi confusión ya que continua hablando rápidamente. - Tengo contacto con algunos, ya sabes, los conozco de hace años y a ti te conocen desde que eras una niña. 

Mi Salvación (TERMINADA) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora