7

24.4K 1.7K 188
                                    

Llegamos a casa media hora después, habían sido demasiadas emociones en un solo día y me sentía agotada, no podía imaginar como se sentiría Tayler. Lo miró, esta en la cocina buscando algo de comer en el refrigerador, me acerco a él y me quedo mirándolo un momento.

- Muero de hambre. - Me dice mientras le da una mordida a una manzana.

- Puedo cocinar algo para ti.

Él niega con la cabeza y voltea a verme, no dice nada pero puedo ver que su expresión es algo seria, eso me preocupa.

- ¿Pasa algo? - vuelve a negar con la cabeza, me gustaría escuchar su voz por lo menos. - ¿Te duele el brazo?

- Solo estoy pensando. - Guardo silencio porque no quiero presionarlo, quizá sólo necesita ordenar sus ideas.

- Verás, tu tendrás unos días libres de la empresa y quizá yo pueda pedir vacaciones...

Sentía que no hacía falta tanto misterio.

-¿Que te parece si salimos de viaje? ¿A la playa podría ser?

Yo sonrió porque eso era exactamente lo que necesitaba, un descanso de todo el trabajo que había tenido.

-Creo que es una gran idea. - Me acerco a él y le doy un pequeño beso.

Después de eso cocino algo fácil para los dos, podría dormirme en cualquier momento así que preferí hacer algo rápido y al parecer Tayler también lo agradeció ya que cuando terminó, fue al cuarto y cayó completamente dormido. Yo me acosté a su lado unos minutos después, estaba empezando a amanecer pero que importaba.

Despierto por el sonido de la regadera, miro la ventana y veo que esta oscureciendo nuevamente, no creí que dormiría tanto pero ahora me sentía como nueva.
Me levanto de la cama y voy hasta el baño, necesito hacer mis necesidades. Abro la puerta y Tayler me mira en seguida, parece un poco incomodo lavando su cuerpo sin que se moje su herida, me sonríe y continúa con lo suyo.

Muero de hambre así que voy a la cocina y busco algo rápido pero rico para cocinar, se me antoja una pasta así que eso es lo que haré. Dejo de escuchar el agua cayendo y unos minutos más tarde aparece Tayler con el cabello mojado y despeinado, se ve tan bien. Se acerca a mi y me besa la mejilla.

- Hable con Chase cuando dormías. - Me dice. - Se entero de lo que paso y solo quería asegurarse de que todo estuviera bien.

- Me hubiera gustado hablar con él. 

- Le pedí prestada su casa rodante. - Lo miro con la boca un poco abierta, no entiendo para que quiere la casa rodante. - Te dije que quería vacaciones. 

Sonreí porque ahora lo entendía, a mi mente vinieron viejos recuerdos, quizá no habían sido los mejores porque estábamos escondiéndonos, pero esta vez seria diferente. 

- Iremos a su casa hoy mismo. 

- ¿Hoy? pero tu necesitas descansar. 

- Descansare lo suficiente cuando estemos en la playa tu y yo juntos. 

No sabia que iríamos a la playa pero era la mejor opción y ademas también quería ver a Chase y su familia. Apago la estufa y me dirijo a la habitación para meter mis cosas en una maleta, no sabia cuanto tiempo estaríamos allí pero era mejor prevenir, cuando me di cuenta ya no cabía ni un calcetín más. Tayler había terminado mucho antes que yo y eso que lo había hecho con una sola mano. Arrastro mi maleta hasta la sala donde Tayler ya me esta esperando. 

Unos minutos más tarde ya estamos en el coche, Tayler había insistido en que el conduciría pero al final logre convencerlo de que me dejara hacerlo, quería que se sintiera relajado, aveces pensaba que cada momento que pasaba conmigo fuera de casa no podía estar relajado aunque tratara de disimularlo, es como si pensara que en cualquier momento algo me pasaría y odia comprenderlo pero no podríamos vivir preocupándonos porque pasara cada minuto de nuestras vidas, así que esperaba que en estas vacaciones se relajara un poco más. Sigo las indicaciones que el GPS me señala y una hora más tarde ya estamos en nuestro destino. 

Mi Salvación (TERMINADA) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora