Capitulo # 21

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REPRIMIDA
Capitulo #21
YA NO ME NECESITAS


Narra Darien

Darien: Al parecer ya no me necesitarás..

Dije sonriendo a mi joven esposa, mientras ésta intentaba poner su pie en el piso después de que el ortopeda le retirara aquel molesto vendaje de yeso, Serena me sonrió y cuál niño que empieza a dar sus primeros pasos avanzó hacia mi, depositó un corto beso sobre mis labios y susurro a mi oído

Serena: Presiento que ahora es cuando más te voy a necesitar...

Apartó su boca de mi oreja y mordisqueo un poco su labio inferior seguramente para que entendiera el contexto de sus palabras y valla que las entendí, amaba que fuera tan atrevida, que se me insinuara de tal forma una mujer que jamás había sostenido relaciones sexuales en el pasado con nadie, eso inevitablemente me llenaba de morbo.

Antes de retirarnos de aquel lugar, escuchamos atentamente las sugerencias del doctor, una de estas era no forzar el movimiento del pie, por lo que salimos de la clínica caminando lento hacia el carro para que el pie de Serena se acostumbrara a caminar nuevamente; puse en marcha el vehículo y minutos más tarde escuché a la rubia preguntar

Serena: Este no es el camino correcto para salir de la ciudad, no íbamos ahora para la hacienda?
Darien: No aún no, debemos pasar por la casa a recoger a Hotaru y a Zafiro, me pidieron que les permitiera acompañarnos y no le vi problema, espero no te moleste eso
Serena: Claro que no, no le veo inconveniente, Hotaru es muy buena compañía para mí y a ti te va a hacer falta un refuerzo en casa de mis padres.
Darien: Suena como si me fueran a hacer un juicio o quizás a golpearme en la hacienda, tu sabes que tu madre me adora... Bueno, no tanto como a tu tesorito, a ese lo aprecia más que a ti misma, pero de que tu madre me ama, me ama.

Carcajadas se escucharon después de mis palabras, seguido de él tono de mi celular, eché un vistazo a la pantalla del auto y divisé el nombre de Richard, pensé en no contestar, pero Serena oprimió el botón del altavoz y me vi obligado a hablar con él

Darien: Hola Richard como estás, a que debo tu llamada?
Richard: Necesito reunirme contigo para ultimar los detalles del vuelo a Houston con los inversionistas que te comenté
Darien: Creo haberte dicho que no es posible para mí en este momento, estoy con los preparativos de mi boda y no quiero dejarle todo a mi esposa, yo planeo casarme una sola vez en la vida, así que quiero participar de todo.
Richard: Si lo sé Darien, pero mis contactos me dieron cita para dentro de tres días, mira si queremos que este negocio funcione, no es bueno dejar pasar la oportunidad
Darien: Pues si quieres le digo a Diamante que valla... Mira, más bien yo te llamo mas tarde, ahora estoy conduciendo a la hacienda Tsukino y no puedo tener ésta conversación al volante.

Colgué la llamada muy contrariado; me molestó que Richard insistiera aún después de saber que Serena me necesitaba estas dos semanas, yo había sido claro al decirle días atrás que me era imposible; aunque quizás debo admitir que todo lo que el hombre hiciera de ahora en adelante me molestaba, sin duda ésta sociedad empezaba a pesarme desde el momento en que supe quien era en realidad mi socio y Serena estaba a punto de empeorar mi enojo con sus palabras.

Serena: Ve tranquilo a Houston, si tienes que ir por mi está bien, yo me quedo con tu familia, Hotaru me está ayudando con los preparativos de la boda, además ahora ya puedo andar sola y no voy a estar tan desvalida, no voy a necesitar tanto de tu ayuda.
Darien: Sí, ya sé que no me necesitas más Serena, no me lo tienes que recordar.

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