Capitulo # 16

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REPRIMIDA
Capitulo # 16
EL TERREMOTO SERENA


Narra Darien

Salí detrás de la señora Ikuko y Haruka, justo después de que ellos atravesaran el umbral de aquella habitación; lo hice por que aunque la pena ajena me corría por lo que acababa de pasar Serena, necesitaba dejarle claro que yo no tenia el mas mínimo interés de romper el trato que ella y yo habíamos hecho, que aunque esta rubia me encendiera la sangre mis verdaderas intenciones eran respetar ese trato hasta el final, total ya solo faltaban 3 semanas para que Serena y yo nos casáramos por la iglesia y una vez pasado este tiempo podía tomar ese tesoro a mi antojo con total libertad

-Darien: Señora Ikuko espere por favor, necesito hablarle...
-Haruka: Darien no te preocupes, te ofrezco una disculpa y te aseguro que esto no volverá a pasar
-Darien: Esta bien Haruka, pierde cuidado, yo entiendo a tu madre; señora Ikuko, yo hice un trato con usted y soy un hombre de palabra, le aseguro que las cosas se harán como se pactaron, que necesita para que crea en mí?
-Ikuko: No pueden seguir durmiendo juntos muchacho, ustedes no están unidos ante Dios, entiende eso
-Darien: Esta bien, si necesita que lo haga, lo haré, me iré a otra habitación, pero créame que no hay razón para que dude o desconfíe de mi
-Ikuko: No es de ti, de quien desconfío muchacho
-Haruka: Madre basta, vas a seguir, deja a Serena en paz, ya es una mujer adulta y casada, entiéndelo, no te corresponde, Darien nuevamente, disculpa a mi madre

Haruka hizo que mi suegra entrara a aquel auto y lo puso en marcha; yo me quede allí unos minutos pensando aquellas palabras que me había dicho, a que se refería con eso, por que su preocupación no era por mí, si no por su hija al parecer; será entonces que serena no era la chica inocente que podía dejarse manipular o seducir por cualquiera como todos creíamos, tendría que preguntarme entonces, quién era Serena realmente y por que su madre tendría una percepción como esta de ella?

Recordé Entonces los sobrenombres con los que se llamaron los hermanos hace un rato en aquella sala, el le había dicho a ella terremoto y ella a él, muro; sin duda podría pensar qué se refería a que era un terremoto porque Serena podía moverle el mundo con su belleza a quien fuera, de hecho eso me había pasado a mi; pero sin duda era algo que tendría que preguntar pues la verdad tenía la duda o mas bien curiosidad latente así que volví de nuevo a la habitación en donde encontré a Serena conversando con Hotaru

-Hotaru: Mira ya mi primo volvió, los dejo entonces para que hablen, por que igual no pueden hacer nada mas jajajaja

Mi inapropiada prima se retiró, después de aquel molesto comentario por lo que me quedé a solas con mi esposa, allí me propuse averiguar sutilmente porque su madre tenía más miedo de las acciones de ellas que de las mías propias, será acaso que Serena era mucho más caliente que yo y yo estúpidamente la subestimaba? Al ver el rubor en sus mejillas, descarté esa posibilidad, ella estaba muy avergonzada, eso era evidente, ahora creo que simplemente son exageraciones de la señora Ikuko, los Tsukino y sus cosas; yo tenía claro que mi mujer era una dama, con deseos si, pero dama al fin y al cabo y jamás se le insinuaría a nadie, ni siquiera a mi, es cierto que en estos días había descubierto que serena podía ser un poco intensa, ardiente, apasionada e incluso podría dejarse llevar por bajos instintos pero había que tener en cuenta que para ella y para el mundo yo era su esposo, su cónyuge no habría nada malo en eso no habría pecado y tampoco reproche moral entonces no entendía nada por lo que decidí dejar de darle tantas vueltas al asunto preguntar para empezar a conocerla de verdad.

-Darien: Porque terremoto?

-Serena: ¿Cómo dices?

-Darien: Porque tu hermano te llama terremoto? Yo diría que el título es extremo, tuviste que haber hecho algo muy grande para poder mover el piso de mucha gente... Digo eso es lo que hace un terremoto no?
-Serena: Pues el título me lo puso Haruka, deberías preguntarle a él
-Darien: Mi esposa eres tú, no voy a preguntarle a él lo que tú puedes responder; no te parece que es justo que empecemos a conocernos, a hablar de nosotros de nuestros gustos... Serena de verdad me gustaría saber cuál es tu color favorito, tu comida favorita, a dónde te gustaría ir qué te gustaría conocer en París; en fin conocernos... por que no empezar diciéndome por que te llamaban terremoto?
-Serena: bueno... dicen que en cada familia hay una oveja negra, creo que soy la de mi familia
-Darien: tú, en serio por favor Serena; no tenías un celular de alta gama que se presta para muchas cosas, nunca has tenido novio e intuyo que fui el primer hombre que te beso, como puede ser entonces la oveja negra de tu familia?
-Serena: La oveja negra es la que actúa diferente a cómo actúan los demás, ese es su principal trabajo y te equivocas, no eres el primer hombre que me besa...

Mis ojos se abrieron, mi ceja izquierda se elevó un poco del asombro, lo dicho yo la estaba subestimando.

-Darien: Ahhh no? Entonces hay alguien a quien tengo que matar ya?
-Serena: jajajaj, estas loco, fue hace mucho, tenia 15 años cuando ocurrió, pero no creo que quieras saber de eso
-Darien: Ohhh pero si quiero, cuéntame por favor, me encantaría escuchar la historia de tu primer beso o fueron besos?

Le pregunté mientras rodaba una silla en la habitación y me sentaba frente a ella

-Serena: Tenia 15, conocí en el verano a un chico muy agraciado y elegante, era muy educado y evidentemente no era de Santa Lucia, se las ingenio para entrar en la hacienda con sus padres que eran conocidos de los míos, se quedo por las vacaciones y bueno nos hicimos novios a escondidas y hasta nos íbamos a escapar jajaja que locura...

La escuchaba atentamente y noté que mientras contaba su historia la mirada le brillaba, quizás en la remembranza de una valentía del pasado , era evidente que escapar para ella habría sido su mas grande hazaña, claro de haberlo logrado.

-Serena: Lo cierto es que Andrew nos descubrió, se lo dijo a mi padre quien obviamente lo impidió y además encargo a Haruka de cuidar que no cometiera mas estupideces de allí en adelante.
-Darien: Que pasó con el chico?
-Serena: No lo sé, nunca supe nada mas de Richard, nuestros padres no se hablaron nunca más, por nuestra culpa perdieron dinero, negocios, inversiones, por eso Haruka me llama Terremoto, le di una buena sacudida a la vida de mi familia... pero bueno, eso fue hasta esa edad, ya que después de eso cambié mucho... Supongo que cuando te repiten tantas veces que lo que haces está mal, no te queda otro camino que dejar de hacerlo o dejar de hacerlo.
-Darien: Ósea que desde entonces, eres obediente y una hermosa oveja blanca jajaja
-Serena: No... Ciertamente si así fuera ya estuviera casada hace un par de años y no contigo ya que mi padre quiso casarme con un amigo de él, un hombre mayor, viudo y que además tenía dos niños, pero me negué rotundamente y preferí estudiar.
-Darien: debo suponer entonces que conmigo si querías casarte ya que no te negaste
-Serena: supongo que así es...

Me levante de la silla y caminé hacia ella, me incliné un poco, tomé su barbilla y la besé en la boca

-Darien: Gracias por compartir amor, creo que lo mejor será ahora que descanses, yo voy a ir a dormir a la habitación de huéspedes
-Serena: ¿Porque?
-Darien: Se lo prometí a tu madre, que dormiríamos separados por estas 3 semanas, no quiero mas problemas con ella, no quiero que vuelvas a pasar por otra escena como la de hoy.

Besé su frente y me dispuse a salir en medio del silencio de la rubia, sabía que estaba enojada por lo que no dije nada más, pensé que se guardaría el enojo y entendería mis razones para irme de la habitación, pero obviamente me volví a equivocar con Serena.

-Serena: Si te vas ahora, es mejor que inicies de una vez el proceso de divorcio...

Me giré rápidamente con un gesto de asombro

-Darien: ¿Que dices Serena?
-Serena: Lo que escuchaste... No voy a tolerar ni una vez más el atrevimiento de mi madre y tu capacidad para prometer cosas que me involucran, sin siquiera consultarme; estoy harta Darien, por que según yo me casé para salir de esa cárcel en la que vivía y ahora resulta, que aunque mi padre me suelte la rienda mi madre ahora controla a mi marido.
-Darien: No es así Serena, a mi no me controla nadie, solo quiero hacer las cosas bien, evitar problemas, solo son tres semanas y volveremos a estar juntos, sin limitaciones, sin problema alguno, entiéndelo por favor
-Serena: No tengo nada mas que decir Darien ya sabes lo que sucederá...  me niego a seguir siendo la idiota útil de todo el mundo.

Caminé hacia la puerta de salida y antes de marcharme con tristeza le respondí

-Darien: Te pido que pienses un poco la situación en la que me pones, pues lo único que debe tener un hombre en esta vida es palabra y si yo no la tuviera... Jamás seria digno de ti.

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