Confía

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Narra Sam

No sé quien se cree que es este tipo pero me cae super mal. No puede decidir por mi en algo tan privado, nadie tiene el derecho de obligarme a hacer algo. Estab tan de mal humor, con jaqueca y me costaba un poco caminar aún pues no habían pasado ni dos minutos desde que me levante, posiblemente y seguia borracha. Estaba tan cansada que me dormi otro rato más.

(#)

Me desperté, seguía en el mismo cuarto, vi la puerta cerrada y decidí salir, ya me estaba aburriendo de estar en este lugar. Me levante y fui pero la puerta tenía llave, no podía abrir yo me enojé y golpeé la puerta muchas veces para así tal vez poder abrirla como lo hice en el hospital.

Intenté abrir la puerta por mucho tiempo, quizás una media hora.

Narra Jack

Yo estaba en casa tratando de no pensar en Sam, estaba solo, Mia estaba en clases. No sabía ue hacer para no recordar. Sé que es imposible olvidarla, olvidar a Sam pues se que yo siempre la recordaré pase lo que pase, y me preocupa dejarla sola, así como estaba cuando la dejé. Me estaba durmiendo cuando recibí una llamada, no quice contestar porque estaba de mal humor, me estaba durmiendo cuando volvieron a llamar. Note que llamo Alex. Me pare de inmediato a contestar pero paro de sonar cuando llegue.

Tome mi teléfono y le llame de inmediato, me preocupe cuando no contestaba así que volví a llamar.

- ¿Alex? -dije yo preocupado cuando contesto la llamada.

- ¡Jack! -dijo aliviada al oirme.

- ¿Qué sucede Ally estan bien? -dije yo sin poder aguantar.

- ¿Estás con Sam? No contesta su celular.

- ¿Sam? -sentí que se me helado la piel- ¿Qué pasa con Sam, esta bien?

- Sam se fue, salió y no ha vuelto, estamos preocupados.... Creo que esta en problemas.

- ¿Desde cuando no esta?

- ¿Cuando te fuistes tu?

- Cuando paso dormida, después de su caída, en la noche me fui mientras dormían...

- En la mañana despertó, tuvo un deja vu, le grito a su mamá y se fue, pensé que tu sabías donde estaba, o que estaba contigo.

- Es casi imposible saber donde esta, eso fue hace poco más de una semana... Sam esta desaparecida.

- ¿Qué podemos hacer Jack?

- Esperenla donde la vieron por última vez, podría volver ahí.... Yo la buscaré -dije eso y escuche que Alex dijo por favor sollozando y colgué.

Aliste mi chaqueta y deje una nota en mi sofá.

Fui a rentar un auto. Tenía que llegar rápido. Debía llegar a San Francisco pronto. 

Narra Sam

Me desperte, ni se que hora ni que día era, ya había perdido el pasar del tiempo, ese tal Peter me había secuestrado, no se exactamente porqué pero sospecho de que tiene algo que ver con Alana ya que para ella trabaja supuestamente. Al menos era lo suficientemente considerado para dejarme un reproductor de música y unos audífonos, así al menos no me aburría aquí.

Estaba escuchando una canción, que aunque creo que ya la había oído no lo recuerdo. Poco a poco me fui durmiendo.

Vi que una cometa llego a chocar al árbol en el que estaba subida, y esa cometa casi me golpea, me seque las lágrimas y vi abajo enojada. Había un niño abajo.

- ¡Oye niña! ¿Puedes pasarme mi cometa?

- Rayos -murmure, tome la cometa ya que llego bien cerca a mi y con cuidado y rápidamente baje el gran árbol- ten cuidado....

- Soy Jack -dijo dándome la mano, yo se la tomé mientras sonreí.

- Y yo som Sam.

Desperté agitada, me costaba respirar, estaba sentada y abrazando mis piernas, yo no estaba en la cama, estaba en el suelo al otro lado de la habitación. Y estaba llorando. Me dolía el pecho, sentía que iba a desmayarme.

Pase un tiempo así, no se si fueron minutos o si fueron horas pero yo sentí una eternidad. Note que a mi par estaba un chico, abrazándome y respirando profundamente a mi par para que siguiera el ritmo de su respiración. Y así hice y pude respirar mejor finalmente.

- ¿Qué me paso? -dije un poco incómoda cuando él se separó.

- No lo sé, de algún modo veniste a este rincón por tu propia cuenta y no sé porque te encontré así -dijo ese chico, lo vi bien y era ese tal Peter, me separe de él.

- ¿Qué haces Peter? No te me acerques.

- Lo siento, creí que necesitarias ayuda para respirar, no lo entiendo, te ayudo y me agradeces así, ¿en serio?

- Si, en serio, muevete -dije yo separándome de él, ya estaba de pie y él se paro- dime algo chico.

- No tengo porque contestar tus preguntas -dijo ya saliendo del cuarto.

- ¿Trabajas para Alana? -pregunte gritando, él se detuvo y me vio sobre su hombro.

- Es complicado -dijo él- pero es cierto, trabajo para ella.

- Entiendo, ahora vete de mi vista -dije yo. Peter se dio la vuelta y me quizo arrinconar como aquel día, pero no lo deje.

- Tu no me diras que hacer -dijo frente a mi.

- Mas te vale que me obedezcas si no quieres verme enojada -dije yo sujetando su brazo.

- No te tengo miedo -dijo, esa fue mi señal para hacerle una llave, su mueca de dolor me hizo parar de aplicar fuerza.

- ¿Esta claro que no quieres hacerme enojar o te muestro más? -pregunte antes de soltarlo, él nego muchas veces y lo solte- así me gusta Peter, ahora dime, ¿me tienes secuestrada, donde?

- Si, en Los Angeles, estamos siempre en Califoria pero en otra ciudad no muy lejos de San Francisco.

- ¿Si decido irme hoy, llegare a San Francisco en cuanto tiempo?

- En cinco horas y media si no paras.

- ¿Raquel y Natasha donde estan?

- Las deje en el restaurante del chino de San Diego, eso queda a dos horas de aquí, quizas un poquito más...

- Gracias, por cooperar, debo dormir, ¿te vas a quedar o...?

- Ire a mi cuarto... Descansa -dijo eso y se fue.

- Bien -lo solté y camine a mi cama cuando note que él se fue, cerre la puerta antes obviamente.