Confía

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Narra Sam

- ¿Actuar, piensas que sólo actúo? No Sam, no está bien esto de hacerme pasar por tu novio pero.... de verdad me gustas -cuando dijo eso dejé de reír en cuanto lo oí tan serio, yo le gusto a Nicolás- no pretendo que me correspondas y no quiero seguir formando parte de esto, de ser novios falsos porque no estoy dispuesto a jugar con mis sentimientos contigo.

- Yo... -no pude decir nada, no sabía que decir.

- Sé que no sabes como actuar ante esto, lo sé por tus expresiones y quiero que sepas que no tienes porqué hablarme ni corresponderme después de esto, solo busco tu amistad y espero poder ganarmela como se debe por eso estoy siendo honesto contigo desde ahora -dijo y se aclaro la garganta- buenas noches Sam -dijo y se fue.

Yo seguía sin saber que decir respecto a todo esto, Nick ya se había ido y ya estaba sola. No podía hacer nada más que irme con mamá directo a la fiesta de nuevo.

Narra Max

Fuimos al carro los tres, si los tres, mi papá, Alex y yo, agradezco a Alex que este aquí conmigo, aunque sea para ayudarme a enfrentar la verdad sobre mis padres, no sé qué esperar de esta charla pero sea lo que sea no será bueno y es necesario tener una buena excusa para no perder el control al oír la verdad.

Fueron los dos metros que debía caminar, los dos metros más difíciles de mi vida por el hecho que del otro lado de esos dos metros mi vida cambiaría radicalmente, por fin conocería la verdad que tanto tiempo he buscado y anhelado escuchar.
He pasado por muchas cosas, experiencias buenas y malas, no perfectas pero tampoco destruidas, mi vida es como un libro oscuro, he sabido buscar la luz pero no todo está claro, esto no está claro.

Cerré la puerta del carro tras subirme, me puse el cinturón de seguridad, iba a la par de mi padre.

Mire a mi padre indicándole que estaba listo para escuchar la historia que cambió mi vida a los seis años.

- ¿Estas seguro? Esto puede ser muy fuerte y no quiero que nada cambie... -dijo papá.

- Nada va a cambiar, eso ya pasó pero aún debo saberlo, tengo derecho a saber lo que pasó -dije y papá suspiro.

- Tu madre y yo fuimos mejores amigos, luego novios y luego esposos -dijo empezando a narrar lo que pasó- lo que pasó fueron simples errores, justo lo que ella y yo habíamos tratado de evitar....

- ¿Qué clase de errores? -dije deseando evitar oír lo que temía saber.

- Infidelidad -susurro- de los dos -dijo sorprendiendome.

Hubo un silencio incómodo por un rato. Hasta que siguió contando.

- Tu madre estaba embarazada cuando se casó conmigo -dijo- fue de un amigo mío, su ex esposo -dijo viéndome de reojo- tu padre.

- ¿Cómo se llama?

- Se llamaba Ernesto -dijo- murió de cáncer y sus últimas palabras fueron "Cuida a Cristina y a Max como si fuera tu hijo", todos estos años al menos te he podido cuidar a ti, pero no de la manera en la que me encargo cuidarte.

- Cuéntame como conociste a mamá.

- No.

- Si, tengo que saber.

- Esta bien -suspiro y siguió manejando.

- Te contaré pero no te diré los nombres.

- ¿Cuántas novias tenías antes de mamá?

- Averigualo en la historia.

Suspiro y empezó a contar.

Yo era un joven de unos veinte años más o menos, era en 1990. Un día conocí a una chica en mi trabajo, se llamaba Michelle, ella era la chica de los anuncios del trabajo, yo trabajaba en un radio y ella ponía los anuncios y nos llevaba agua y comida a veces, luego un día me habló.

- Hola, te he visto aquí antes, ¿porqué nunca me hablaste antes?

- Simple, hacía mi trabajo y no puedo hablar en los comerciales, eso es una regla que supongo que tu haz puesto.

- Pues han habido programas cortos y tu te vas rápido.

- ¿Así que no puedo ir a cuidar a mi tortuga antes? Dime, ¿cómo es que una chica tan bella como tu, habla con un chico como yo?

- ¿Porqué no? Supongo que debo estar celosa de tu tortuga ahora, soy Michelle.

- Lo sé, yo soy Juan.

- Lo sé, te he visto entrar.

Meses después de esa conversación empezamos a ser novios. Michelle era genial, pero luego de meses decidimos dejarlo, pasamos de ser novios a amigos.

Luego conocí a otra chica en un centro comercial, se llamaba Nicole, era nueva en el lugar.

- Hola, soy nueva aquí, ¿me puedes ayudar?

- Claro, soy Juan.

- Y yo Nicole, vengo de Wisconsin y estoy perdida, busco trabajo.

- Yo vengo de Texas, yo trabajo en la radio, ¿que clase de trabajo buscas?

- Ser enfermera, no conozco ningún lugar aquí en San Francisco.

- Estas en lo correcto, no hay ningún hospital aquí, pero en Los Angeles si hay.

- A pues hasta pronto, me iré a Los Angeles.

- ¿Estas renunciando a todo esto por un trabajo?

- Así es, y no sólo es un trabajo, es el trabajo de mis sueños.

- Espera ahí papá, ya sé quien es mamá, es Nicole pero ¿qué pasó luego?

- Yo quise que cambiará de idea pero tu madre es terca -sonrió- así que me fui con ella. Me tenía loco por ella -se rió y sonrió, nunca lo había visto tan feliz.

Narra Sam

Me fui a la fiesta, ¿que más podía hacer? Llegué a la fiesta, no veía a nadie conocido, ni mi mamá ni mi abuela Lana, ¿porqué?, no tengo ni idea pero había llegado a una conclusión yo sola:

Me gustaba estar sola y fue por eso que disfruté la fiesta al máximo.

Me acerque a la barra y pedí 7up pero en vez de eso me dieron algo amargo, era nuevo sabor para mi, nunca lo había probado y luego de un rato estaba mareada pero por alguna razón no me importaba y seguía bailando. Seguía bailando hasta que alguien me tomó de los brazos y nos fuimos de ahí, no veía bien quien era pero ya sabía quién era, habían muchas personas tomándome foto, no entendía nada solo que al salir de ahí me desmaye.