Hyukjae se encontraba en su oficina, sentado en la silla de su escritorio, bajo la atenta mirada de la persona que estaba del otro lado de su escritorio.
Su vista estaba fija en los documentos que tenía entre sus manos, ignorando por completo la presencia del hombre que se encontraba frente a él.
—¿Y bien?— Rompió el silencio el hombre.
—¿Qué cosa?— Respondió Hyukjae sin levantar la mirada.
Donghae señaló la revista que tenía entre sus manos.
—Voy a casarme— Dijo alzando su vista.
—Sí, eso ya lo sé, vas a casarte con Jennette Hardy. ¿Acaso no pensabas avisarme que te vas a casar?— Preguntó.
—No veo porque hacerlo.
—Soy tú hermano, Hyukjae— Le recordó. —Tenía que enterarme por ti, no por una revista de la farándula— Arrojó la revista en la mesa del escritorio. —No hay revista que no hable de tú compromiso.
Hyukjae dio una mirada rápida a la revista que Donghae había puesto en la mesa del escritorio.
—En Corea es de lo único que habla. Cuando los reporteros me preguntaron sobre tú compromiso, me tomó por sorpresa, que no supe que decir y todo porque mi hermano no tuvo la decencia de decirme.
La mirada de él se posó en su hermano. Se levantó de su asiento hasta el bar y se preparó una copa.
—No sé por qué tanto escándalo.
—Te vas a casar— Exclamó Donghae, como si fuera obvio. —Vas a unir tú vida a ella de por vida, claro que importa.
—¿No era lo que tanto querían?— Le preguntó.
—Por supuesto que sí, pero no de esta manera—Le respondió. —Sólo me fui unos días de Corea y regreso con la noticia que te viajaste a New York y que te vas a casar, incluso a nuestra nana le sorprendió la noticia.
—Deberían estar felices, cumpliré lo que tanto han querido— Dijo él. —Jennette pertenece a una de las familias más cotizadas de New York, así que no veo el problema. Dos grandes imperios uniéndose por amor.
—¿Amor?— Bufó Donghae. —Ya Heechul me puso al tanto de los acuerdos que se han hecho con la familia Hardy.
Hyukjae encogió sus hombros, sin importancia.
—Lo único que sé, es que me necesitan— Dijo sin remordimiento.
Donghae se le quedó viendo, había algo más, podía estar casi seguro.
—¿Qué es lo que planeas, Hyuk?
—Nada.
—No mientas— Le recriminó.
—¿Por qué crees que lo haría?
—Te conozco Hyukjae— Dijo acercándose a él. —¿Qué fue lo que te hizo Jennette?
—No hay nada que decir.
—Sin embargo— Guardó silencio por unos segundos. —Ese es el motivo.
Hyukjae no dijo nada.
—¿Sabe quién eres?
—No— Respondió con amargura. —Jennette no tiene por qué acordarse del estúpido que estaba enamorado de ella en la preparatoria.
—No voy a dejar que le hagas daño— Declaró.
—Y yo no voy a dejar que te metas en mi vida. Yo decidiré con quien casarme, y si decido casarme con Jennette, lo haré.
