Sé Sólo Mío | TaeKook

TERCERA PARTE.

- ¡Pervertido!

Y el pelirrojo recibió un codazo justo en su estomago solo por tratar de besar al pelinegro. Otra vez, después de haber pasado al dormitorio de este para saludarle.

Taehyung quería dominar a Jungkook, hacerlo obedecer sus reglas. Y francamente creía que la mejor forma de hacerlo era conquistando al pelinegro. Jaja, pobre iluso.

Aun así había elaborado una serie de pasos para conquistar el corazón de hierro del menor. El primero: Endulzarlo con Labia barata.

- Ach... Pero qué te-¿Por qué pervertido? - Hizo puchero adorable y Jungkook rodó los ojos apenado -. Bebe, no puedes ser así de malito conmigo.

- ¡Cállate imbécil! Y te prohíbo que vuelvas a intentar violarme la boca - Respondió entre dientes.

- Pufff... Ni que te hubiera pedido que me la mamaras - Aunque si lo pensaba bien, podían repetir aquello -. Jungkookie, ¿quieres mamarme-

- JAMAS. EN. MI. PUTA. VIDA.

Y una de sus sexys piernas terminó golpeándole las bolas al pelirrojo. Otra vez.

¿Escuchan eso? Es el sonido de miles de espermatozoides muriendo.

Sus pobres hijos.

- ¡Maldi-

Jungkook corrió como alma que se la lleva el diablo y se encerró en el baño de su cuarto antes de que Taehyung le alcanzará.

- ¡Hijo de-! - Maldito dolor de bolas no le dejaba ni respirar - ¡Si le hiciste algo a mi pene te juro que-aghhh TE ROMPO EL ANO!

Silencio.

- ¡Jungkook abre la puerta!

Nada.

- ¡Jungkook!

¿Se había ido por el caño o que?

- ¡Jungkook abre!

- Nu~hu.

¿Qué verga dijo? Como sea, no importaba.

- ¡Jeon Jungkook abre la puerta!

La manilla giró rápidamente y la puerta se movió hacia adentro del baño dejando al descubierto a un pequeño pelinegro con una rasuradora en la mano y su teléfono en la otra.

Listo para defender su ano.

- ¿A quien llamas? - Interrogó colocándose en cunclillas y apartando de un manotazo la rasuradora -. Dame el teléfono.

- Nu~hu.

¿"Nu~hu"? ¿Cuantos años tenía? ¿Cinco?

- Dame el-

- ¿Aló policía?

La quijada de Taehyung cayó al suelo.

- Si, esto... Me quieren violar...

Arrebato el teléfono con una rapidez felina y Jungkook se arrojó a por el aparato dando golpes y arañazos al mayor.

- ¡DEVUELVEMELO!

- ¡NO LO HARÉ!

- ¡ES MIO. DÁMELO!

- ¡QUE NO-AGH ME CAGO EN LA PUTA... - Jungkook enseñó los dientes y Taehyung entró en pánico - ¡NO TE ATREVAS A MORDERME!

Reto aceptado. Dientes de conejo al ataque.

- ¡AHHHH. ESO DUELE! - Puto salvaje.

- ¡MI TELÉFONO!