PRIMERA PARTE.

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Hay personas que solo quieren ver el mundo arder.

Y Choi Yangmin es una de esas.

La Omega femenina más hermosa de todas. De cara de princesa de porcelana, de ojos cual cachorro incidente y labios finos y definidos, de un suave rosa pastel y textura apetecible.

De un cuerpo delgado y acorde al modelo de Omega femenina perfecta.

Ella era así. Y sobretodo, era la Omega perfecta para el alfa perfecto.

Ella seguía las reglas de Kim Taehyung. Era sumisa a un Alfa, era obediente y era exclusiva.

¿Por qué entonces el amor de su vida no estaba con ella?

- Hey Yangmin.

Genial. Otro idiota con quién gastar tiempo y saliv-

- Ah, primo Yugy - Sonrió encantadora - ¿Cómo esta-

- ¡Dime dónde puedo encontrar a ese alfa que tiene a mi Jungkook!

Oh.

Yangmin era buena creando conflictos. Era bastante buena de hecho, y desperdiciar la oportunidad de crear rivalidad entre Taehyung y el tonto de Yugyum era algo que no iba a desaprovechar.

- Oh primo... No creo que debas hacer lo que estás pensando.

Yugyum parpadeó y ladeó la cabeza. Yangmin pensó que se veía más idiota así pero igual sonrió con ternura mientras le abrazaba.

- Primito no debes retar a Kim Taehyung - Le dijo y sintió a su primo tensarse ante el apellido.

Oh. Un Kim... Una línea de sangre casi pura.

Realmente letales en un combate.

- ¿E-El alfa de Galletita es un Kim?

- ¿Galle-Oh - Tosió para disimular su risa -. Claro... El Alfa de Jungkook - Masculló -. Si, fue algo tan triste como Taehyung lo obligó a-

Yugyum se apartó de golpe.

- ¡¿Lo obligó?!

Oh. El alfa se molestó.

Yangmin contuvo una sonrisa.

- ¿Cómo? - Interrogó. Su voz haciéndose más gruesa. Amenazante.

- Fue durante el viaje escolar... - Comenzó a decir con fingido gesto preocupado -. Lo marcó estando en su celo... ¡Se aprovechó de él!

Y hubiera sido preferible que Yangmin se ahorrará el "se aprovecho" Porque Yugyum salió por aquel pasillo hecho una furia, segregando rabia por cualquier poro, sus colmillos punzando en su boca y un único pensamiento en su mente.

- Oh, ¡primito ten cuidado! - Yangmin se quedó viendo por dónde su primo se dirigía, sabiendo que buscaría una pelea que no tendría oportunidad de ganar -. Idiota.

Aquello sería una pelea donde saldría muy lastimado.

- Que más da - Se encogió de hombros y caminó hasta su casillero, colocando la combinación y abriendo la puerta con un sonido chirriante.

Miró el interior, sacando de allí la chaqueta negra que Taehyung le había prestado, abrazándose a la prenda y aspirando hondo el aroma.

No dudó en volversela a colocar, sin importarle que le quedara ancha, deleitándose con el aroma del Alfa y permitiendo que éste se impregnará en ella.

- Me pregunto, ¿cómo reaccionara galletita cuando me vea con ésto? - Se miró en el pequeño espejo dentro del casillero y sonrió contenta, guiñándole un ojo a su reflejo antes de cerrar la puerta e ir a buscar a Jungkook.





















Se sentía mareado.

-... Entonces Namjoon escogió el nombre de Rap Monster, dijo que era el indicado y que nunca se arrepentiría. Pero tres días después lo cambio a RapMon - Contó Yoongi con desinteres mientras comía una patata.

Todo daba vueltas.

- ¿Se acuerdan de Juancho? El estudiante de intercambio de México - Preguntó Hoseok y los demás asintieron -. Bueno, él escuchó el nombre artístico de Namjoon y nos dijo que RapMon era muy similar al nombre de su tío paterno, Ramón Ernesto Guillermito Antonio de la Cruz Palacios y Ponte, el que vende elotes.

Jungkook quería vomitar.

- Entonces, Yoongi y yo comenzamos a burlarnos de Nam sobre su apodo y le preguntábamos: "Hey mijo, ¿en cuanto los elotes wey?" y él se molestó mucho. Así que se cambió el nombre-

- Otra vez - Indico Yoongi.

- Otra vez - Concordó Hoseok -. Y ahora se llama RM.

- A ver cuánto le dura hasta su siguiente crisis existencial - Comentó Yoongi dándole un sorbo a su jugo, arrugando el gesto cuando le sintió mucha azúcar.

Ugh. Demasiado dulce, le daría diabetes.

Jimin se rió a carcajadas y Seokjin a su lado también lo hizo. Los de la mesa de atrás voltearon a verle creyendo que se estaba ahogando. Rápidamente los otros dos alfas también comenzaron a reírse, siendo imposible no resistirse a la risa "Jin Limpiaparabrisas" más única y original de todas.

Jungkook respiró pesado y apoyo sus codos sobre la mesa, tragando duro mientras sentía las náuseas hacerse más fuertes.

- Me v-voy a clases...

Se levantó de la mesa y tomó la bandeja, regresandola a una de las cocineras, toda la comida sin tocar aún en el plato.

No tenía apetito.

Jimin se le quedó viendo mientras abandonaba el comedor, mordiendo su labio con confusión antes de girarse a ver a los demás.

Quiso hablar pero no hallaba la forma de decir algo o, al menos, de decir eso.

Y es que le habría dicho a Jungkook aquello desde hace semanas, claro, así habría sido si su amigo no estuviera confundiéndolo todo el tiempo.

Primero con que odiaba a Taehyung y, más que nada, deseaba separarse de él. Eliminar aquella Marca y por supuesto, disolver el contrato de matrimonio.

Y Jimin, como hijo de unos abogados muy prestigiosos, logró mover algunos contactos y gracias a uno de ellos, consigo lo que su amigo le había pedido hace tiempo.

Ya sabía cómo divorciar a Jungkook de Taehyung.

El problema ahora era que no estaba muy convencido de que Jungkook aún quisiera ese divorcio.

Y aún menos ahora que su amigo creía que su lobo estaba predestinado al de ese alfa.

En serio... Jungkook era una montaña rusa de decisiones.















Lo vio sentado debajo de un árbol en el campus, su rostro mostraba malestar mientras respiraba hondo y acomodaba sus cabellos.

Se acercó hasta él caminando firme, su aroma demasiado fuerte le hizo dudar pero aún así se colocó ante él. Su mirada bajando a la suya debido a que aún permanecía de pie.

- Kim Taehyung - Pronunció y el Alfa gruñó en respuesta.

Rápidamente los demás Alfas del campus giraron a verles. Sus aromas volviéndose fuertes y Yugyum supo que todos ellos era subordinados de Taehyung.

Lobos capaces de pelear por él.

Por matar por él.

- Quiero reclamar a tu Omega como mío.

Esta jodido.

Sé Sólo Mío | TaeKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora