Capítulo 52 El Templo De Ciudad Vermillion

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Rika nos preocuoaba; era como si se tratase de una persona completamente diferente.

Se había vuelto asustadiza, amable y... Rosa.

¿Esto podía empeorar?

—¡Hola a todos! —mientras pensaba, llegamos a la sala de estar y Rika saludó a todo el mundo con singular alegría. Incluso había decenas de esclavos afuera de la cabaña por cuestiones de espacio y ella se asomó por la ventana para saludarlos.

Entre tanto, Billy se levantó de su asiento para observar el estado de Rika.

—Me alegra que estés bien ¿cómo te sientes?

—Yo... —¿acaso se estaba sonrojando?—. Me siento bien, gracias —incluso su tono cantarín había bajado mientras desviaba la mirada.

—Que gusto saber eso —Billy la abrazó con alegría—. Te dije que este plan era peligroso, pero que bueno que todo salió como querías.

—Gra-gracias —Rika bajó la mirada mientras tartamudeaba cuando Billy la soltó.

—Por cierto, sobre el beso que te di antes, creo que me precipité mucho, lo lamento.

—¿Me besaste? —¿la besó?

Ella se tocó los labios con sorpresa en sus ojos.

—Espero que no estés enojada.

—No lo estoy, pero entonces ¿eso significa que yo te gustó? —ella hacía una mirada que nunca antes la había visto hacer; estaba sonrojada y mantenía los ojos en el chico, pero era como si a la vez quisiera mirar hacia otro lado.

Aún así Billy fue quien se sonrojó más mientras Eris y Shira miraban con interés.

—Bueno, si... Tú me gustas.

El rostro de Rika se iluminó con una sonrisa antes de volver a juntar los labios con vergüenza.

—Esto es muy repentino, recién te conozco, pero... —ella sujetaba los pliegues de su vestido como toda una señorita avergonzada mientras giraba el cuerpo de un lado a otro—. Pero yo...

—Pero tenemos que continuar nuestro viaje, ya no hay tiempo que perder —interrumpí frustrada mientras jalaba a Rika de la muñeca.

—Pero...

—Ella tiene razón —asintió Billy—. Es peligroso para ustedes quedarse más tiempo. Ya nos encontraremos cuando visiten la alianza comercial.

—Entiendo —Rika mostraba tristeza por despedirse y se soltó de mi agarre—. Hasta pronto —se acercó a Billy se paró de puntillas y ¡besó su mejilla!—. Gracias por todo.

Yo estaba muriendo por dentro. ¿A donde fue mi adorada, malvada y grosera Rika? Ella es solo una impostora.

Comenzamos con los preparativos y reunimos a todos.

—Que increíble —Rika estaba impresionada por la vista de todos los esclavos reunidos afuera y comenzó a identificarlos con emoción.

—¿Qué es ella? —o más bien a preguntar.

—Una sucubo.

—¿Y él?

—Un hombre tigre.

—Oh, cielos —y repentinamente se cubrió los ojos—. Puedo ver... Ver la "cosa" del sujeto.

Ante su reacción, Shira se burló.

—Sí, algunos de ellos están muy bien dotados y el trapo que les dimos no alcanza para cubrirlos.

Emisaria de la Diosa del mal. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora