Lejos de mí

Capítulo 11

Todos dicen que la vida es corta, pero al mismo tiempo dan instrucciones para vivirla. La vida no es un manual que debas cumplir, es un regalo que debes experimentar, pero yo perdí a uno de los mejores regalos que me dio la vida. Una semana, una maldita semana llevo sin hablar con Ethan.

Él me llamo al principio, me dejo mensajes y aún le pregunta a Sam por mí, pero yo fui una tonta. Lo ignore completamente y ahora que estos dos últimos días no he escucho nada de él, el vacío se siente.

Quiero salir con él, quiero seguir con nuestra estúpida lista, quiero estar junto a él para ayudarle a superar sus miedos y quiero que él me ayude con los míos.

Maldita sea quiero escucharlo cantar y tocar la guitarra.

Pero mi orgullo no me lo permite y todo esto me está quemando por dentro. No puedo creer que se haya vuelto indispensable para mi tranquilidad.

Sam entró a mi cuarto tirando la puerta a un lado del golpe que le dio.

— Te vas a levantar en este instante, Kaitlyn.

— No quiero. — Llevaba toda la tarde acostada en mi cama.

— No voy aceptar un no como respuesta. — se me tiro encima—. Pareces que estuvieras superando una ruptura.

— Vete a la mierda.

— Vamos, Kat. — estaba intentando quitarme el edredón—. Ethan te extraña y es obvio que tú haces lo mismo.

— ¿Ethan? ¿Quién es ese?

Sam me golpeó. Por primera vez ella es la agresiva y no yo.

— Deja de ser tan... tan Kat y levántate en este instante.

— No.

— Eres una zorra. — volvió a golpearme—. Es que vas a dejar todo tirado. Tus planes y todo.

— ¿Cuáles planes?

— La lista con Ethan y tú futuro.

— ¿Cual futuro? Yo no tengo futuro.

— ¡Kaitlyn! No digas eso por favor.

— Estoy diciendo la verdad.

Mi futuro no existe, solo estoy atrapada en un ciclo del presente.

— Levántate. Te tengo una sorpresa.

Esto no saldrá nada bien. Ya lo presiento, hará una estupidez.

— Sorpresa de que, no me digas que ya estás embarazada. — Me reí al ver su cara.

— No me digas eso. Sería una muy mala madre.

— De eso no tengo duda.

Me empujo tan fuerte que termine en el suelo.

—Solo digo la verdad.

Yo también sería una mala madre, no estaría preparada para nada y mi paciencia no es una virtud para admirar.

— Dejaste morir hasta tus plantas en estos días.

Solo me levantaba para ir a la universidad y al trabajo. No estuve pendiente de nada y se me olvidó cuidar mis hermosas plantas que ahora no parecían tan hermosas.

Sam me arrastro hasta el baño obligándome a tomar una ducha y luego me obligo a cambiarme para salir a cualquier lado.

— Hasta no disfrute la serie sin él. — confesé mientras esperábamos el transporte—. No pude reírme junto a él mientras veía como Sookie invitaba a Jackson. Ellos eran nuestra pareja favorita de toda la serie.