CATHARSIS

Capítulo 14

Horas antes del ataque al Banco donde murieron 40 personas, Prieto había apretado el gatillo lo suficiente como para que Tamayo tomara aquella decisión.

- Haz lo que tengas que hacer Luis- Dijo con tal angustia que Tamayo sintió escalofríos.

No le dijo que asesinara a esa pobre gente, o que no lo hiciera... Le dijo que tomara la decisión correcta y fue cuando el mierdero se armó. El gobierno esperaba entrar e intervenir lo suficientemente rápido como para salvar algunas vidas, preferiblemente la de los rehenes, pero nada funcionó bien aquel día y la solución inmediata para calmar los ánimos de la gente era meter preso a Tamayo, tratarlo como el peor criminal y que pagara por toda la mierda que había hecho, misma mierda que ellos habían dado la orden de cometer. Karma. Tamayo, Karma.

- No puedes hacer más nada Luis, entregate- Dijo Prieto brindando su mejor semblante de amigo y compañero leal.

- Maldita sea mi vida, joder. Si tan sólo te hubiera escuchado... No le hubiese ordenado a Sierra interrogar a aquel chaval y no sólo eso, puta mierda - El sudor empezó a correr por su frente brillante - Autorizar el disparo que ejecutó a Nairobi, la puta tanqueta de mierda, la luz verde a Gandía dentro... Y la de Putín - Se burló en medio de su angustia - Ni por mejor buen comportamiento salgo del hueco en menos de 30 años, estoy jodido-

Prieto había llevado su grabadora y todo estaba siendo grabado, era nuestra carta. No pasó demasiado tiempo para que le llegara su hora. Luego de la charla con Prieto volvió a su hogar, donde fue detenido horas más tarde. No puso resistencia, no se quejó y antes agradecía a la vida por tener la oportunidad de poder despedirse de su esposa e hijos. Al día siguiente habría una audiencia frente al juez, donde acusaban a Tamayo por todas las negligencias que había cometido en el segundo atraco de los Dalís y a Prieto de cómplice, así que no perdió el tiempo en llegar a su casa y acabar la recopilación de pruebas que le presentaría al juez.

Al día siguiente Prieto no perdió el tiempo en llamarme al teléfono satelital que habíamos acordado usar sólo en caso de emergencias.

- Dime - Abrí los ojos esperanzada.

- Alicia, lo tenemos. Rendiré declaración después de presentar estas pruebas-

- Joder- Exclamé aliviada, sentí como si alma me volviera al cuerpo - ¿Cuando será?-

- Mañana temprano, se le vino hasta el rey encima al pobre Tamayo-

- Pobre mi abuela, Luis. Más que merecido lo tiene el infeliz-

- Calculo que puedan estar volviendo a España en un par de días-

- ¿Qué ha pasado con Sergio Marquina?-

- No hubo más comunicación con el profesor luego. Están buscando por tierra y aire-

- Joder-

Al colgar vi a Andrés acercarse y le sonreí, él levantó las cejas - ¿Qué ha pasado?-

- Tenemos las pruebas- él sonrió, aún había tristeza en su rostro pero no dudo en venir a abrazarme.

- Tendremos la fuga más corta en la historia- Dijo y yo me reí. Sentí su corazón latir y eso me causó una alegría extraña.

- ¿Crees que tu hermano finalmente venga? No sé si tenga cabeza luego de lo sucedido con Raquel-

- Lo hará, debes irte antes de eso-

Me separé de su abrazo y le miré con la mayor seriedad - No me vengas con que no vienes tú tampoco-