Dia 25

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La mañana se asomaba por la ventana de aquella habitación, el mexicano sintió los rayos de sol en su rostro y entreabrió sus ojos percatándose que estaba en el pecho del estadounidense, sonrió y levantó su rostro, dio un beso en la barbilla de este y empezó a enderezarse sin embargo al hacerlo sintió... algo dentro de él...

-¿¡Que carajos!?- el estadounidense se levantó ante ese grito, sin embargo al incorporarse levantó levemente sus caderas -¡No! Ahhh~

-Mmmgh! What!?

Ambos dirigieron su mirada hacia el trasero del mexicano notando que, USA no había salido de él... se miraron.

-A mi también me gusta hacerlo contigo pero es muy temprano ¿no lo crees estrellitas?

-Se dice Buenos Días honey, y no, para mí no lo es.

-¿Cómo? Ahh~ el murica comenzó a penetrarlo levemente -w-wey ahh~ para~

-Yo ya paré, eres tú el que está saltando- el mexicano se dio cuenta por lo que paró de saltar. -¿Ya quieres que salga?

-mmm, Bueno un rapidín mañanero no le hace daño a nadie

-you pervert – besó la nariz del latino haciéndolo reír, USA se recostó mientras el latino movía su pelvis en círculos sintiendo como dentro de él crecía aquel miembro.

-Mmgh! Ya está despierto~

-I think..- comenzó a masajear el miembro del mexicano, deslizaba  sus manos por todo el tronco de arriba abajo, los dulces sonidos del latino hicieron acto de presencia excitándolo en breve.

-Ahh! Mmm~ el mexicano se estremeció y curvó levemente su espalda.

-Te corrijo ahora ya está despierto.

-Ajá...- dijo entrecerrando un ojo, su interior a penas iba despertando, luego de que se acostumbró comenzó a saltar, todo iba marchando de maravilla.

-Oye.. ah! Mm! No ahh! Se te hace raro Mmgh! Que PH no haya..- la puerta se abrió estrepitosamente.

-HELLO!!.. GUYS?

-Tenias que invocarlo?

Canadá servía el desayuno, mientras hablaban de lo ocurrido el día anterior.

-Entonces ya se arreglaron?

-Así es.. -decía el mexicano mientras jugaba con el anillo

-¿Tengo buen gusto no crees?

-¿Si de que? Si me dijiste que viste que lo estaba viendo.- USA besó la mejilla del mexicano

-Aun así, yo lo había visto antes

-Ay si tu como no- el otro levantó los hombros en indiferencia, el mexicano sonrió y negó.

-oye Can,¿ hoy ocuparemos ese cuarto?- preguntó emocionada la empresa

-Si PH hoy la ocuparemos, claro si nuestra OTP no pone ningún obstáculo.

Después de eso se quedaron esperando a que estuviera lista la escenografía, PH los llamó para entraran a aquel cuarto.

-Que demonios.../ what the hell....

-¡No podía esperar para abrir este cuarto! -la emoción en PH se notaba a leguas y no era para menos, era espaciosa, las paredes tenían colores rojos, negros y destellos violetas los cuales llamaron la atención del estadounidense.

-¿Por qué la pintura violeta?

-Eso lo sabrán hasta mañana

Observaron que en una de las paredes colgaban látigos de varios tamaños, al centro había un curioso mueble curvo y otro más recto, el suelo era diferente al resto de la casa pues en su totalidad estaba forrado por una alfombra esponjosa color guinda, el mexicano se percató que en una esquina colgaban sogas y cadenas del techo, tragó duro al verlo, habían dos barras a los costados cada una con algunas cajas negras de cuero y al fondo unos escalones pequeños que daban a una cama circular algo grande a decir verdad, impecable por el momento, las almohadas tenían formas circulares y otras más alargadas inclusive el respaldo no parecía ser duro si no parecía afelpado y acolchonado, en definitiva una sala erótica digna de una película triple x.

30 días de OTP by CanadáDonde viven las historias. Descúbrelo ahora