🍁P&M🎶

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JiMin lloraba...

YoonGi estaba tratando de consolarlo.

Luego de cenar, ambos salieron del local, para hablar con tranquilidad.
Pero tranquilidad era lo que menos había en el ambiente entre ambos.
Subieron al auto de YoonGi, y se parquearom frente a un parque, que debido a la hora estaba vacío.

Antes de qué pudieran salir del auto, YoonGi decidió preguntarle a JiMin sí JungKook y YooJung eran sus hijos, el rubio detuvo todos sus movimientos, la sonrisa en su rostro desapareció

- Perdoname...- la voz de YoonGi se escuchó en el auto. Ni siquiera entendía que esto sería dificil para JiMin.

- Ahora me odias...- JiMin susurró- Nunca quise ni un centavo tuyo, solo quería que los niños tuvieran a su otro padre... ellos preguntaban y yo no sabía que decirles, no podía decirles nada porque no sabía nada- JiMin ahogó un sollozo- Todos te buscamos, queríamos volver a verte, HoSeok te buscó aún por el poco acceso a información... tuve tanto miedo, todo se volvía cada vez mas complicado...

- No... JiMin... no te odio- dice YoonGi apresurado- Tú deberías odiarme por dejarte pasar todo este tiempo solo, debía al menos...

- ¿Cómo ibas a hacerlo?- JiMin preguntó dolido- Volviste a la universidad y no me reconocías y yo simplemente huí a casa de mi padre... acababa de enterarme que estaba embarazado... TaeHyung y HoSeok no volvieron a verte luego de ese tiempo... desapareciste... otra vez...

- JiMin...- YoonGi hizo que el rubio le mirara, aún con la vista empañada por las lágrimas- Lo siento... aunque realmente ni siquiera eso basta para cubrir mi ausencia, nuestros hijos... ellos me necesitaban, tú me necesitabas, yo cada vez puedo recordar pequeños fragmentos de antes...

- ¿Me recuerdas?- JiMin preguntó con un destello en sus ojos.

- Un poco... aunque siempre te he extrañado todo este tiempo- afirmó.

YoonGi se atrevió a besar a JiMin en un arrebato. JiMin se aferró a YoonGi, en una necesidad de sentirlo real, de que allí estaba junto a él.

Un beso en medio de la desesperación y el dolor que ambos alvergaban. Luego de unos minutos, YoonGi sonrió juntando su frente con la de JiMin.

- Cuentame...- susurró. JiMin le miró un poco confundido- Cuentame todo lo que mis hijos han hecho estos años...

JiMin abrió sus ojos sorprendido por la petición del pelinegro.

- ¿Tú... quieres?- preguntó ilusionado, con ese brillo de esperanza, de que YoonGi le estaba pidiendo hablar de sus hijos, de ambos.

- Claro...- sonrió volviendo a tomar las manos de JiMin y llevandolas a sus labios, solo para besar el dorso de ambas- Quiero saber a quienes estas manos le entregaron amor...

JiMin asintió, sonrojado y aún dentro del auto, acomodó su cabeza sobre el hombro de YoonGi, y el pelinegro se apoyó levemente en él, sin soltar sus manos.

- Dime, ¿qué quieres saber?- preguntó JiMin un poco relajado. Había controlado la irregular respiración que le había dejado su llanto anterior.

- ¿Cómo te enteraste?- preguntó YoonGi, dirigiendo la mano que estaba colocada en la cintura del rubio, hasta su vientre, el lugar que fue el hogar de esos dos pequeños a los cuales ama.

- Uh...- JiMin sonrió- HoSeok y TaeHyung habían llegado al apartamento que compartímos durante la universidad, Tae llevaba comida y de repente sentí nauseas, llevaba algunos días sintiendo un ligero dolor de cabeza, pero lo atribuí a la falta de sueño por las evaluaciones...- mencionó recordando- TaeHyung estuvo un poco alterado, y me dijo que lo mejor era descartar cualquier problema antes de que fuera grave de verdad... paranoias de médico supongo...- YoonGi rió y siguió acariciando las manos de JiMin entre la suya- Me hice el examen de sangre, y el doctor dijo que quizás sería una posible anemia o una baja de azúcar... a los dos días, volví por los resultados, Tae me acompañó, no quise decirte nada porque estabas muy estresado con la beca a Canadá...

- ¿Sabías eso?- YoonGi preguntó asombrado.

- Claro...- JiMin sonrió y levantó la mirada para ver al mayor- No nos teníamos secretos...

- Pero tú no me dijiste que te sentías mal...- reprochó el mayor con un puchero.

- Porque sé que tus niveles de protección se duplican y elevan a la enesima potencia con cualquier cosa...- JiMin le sonrió con ternura.- Iba a decirte una vez me entregaran los resultados, ser mimado por tí es muy provechoso- ambos rieron ante el comentario- Cuando me los entregaron pensé que se habían equivocado, TaeHyung los leyó y pensó lo mismo... aunque... bueno, habíamos tenido nuestra noche de aniversario semanas antes y...- JiMin susurró sonrojado.

- ¿Creamos a nuestros hijos en la noche de aniversario? Perfecto- YoonGi mencionó con gracia. JiMin lo golpeó levemente.

- Basta... no te burles- se quejó el rubio- Nosotros... íbamos a casarnos...-mencionó, YoonGi le miró, todo en esa noche había sido una sorpresa pero esa noticia superaba espectativas.- Iba a decírtelo cuando regresaras de Daegu, dijiste que hablarías con tus padres sobre nuestro compromiso, y regresarías... pero no regresaste...- JiMin sollozó escondiendo su rostro en el hombro del mayor.

- Estoy aquí...- dijo besando la cabellera rubia de JiMin- Estoy aquí, amor...

- Tenía dos meses, pero al ser mellizos, comenzó a notarse y ya no podía asistir a las materias prácticas, porque podría lastimar a los bebés sí hacía algun movimiento brusco...- suspiró- Estaba emocionado y asustado a partes iguales, regresé a Busan con mi padre, le expliqué un poco, habían pasado dos semanas desde que te ví la última vez y nunca supe de ti, busqué a tus padres para hablar con ellos y preguntarles pero nunca me respondieron...- susurró dolido- Quizás por todo el estrés acumulado, fue un poco mas dificil...

- ¿Qué pasó?- YoonGi preguntó.

- No lo sé... entrando al séptimo mes, quizás solo me desmayé- dijo recordando esos días tan complicados y locos- TaeHyung pidió un traslado a Busan para hacer sus prácticas, una vez le concedieron el permiso, me estuvo cuidando pero una tarde simplemente ya no lo soporté... la doctora que llevaba el control de gestación, estuvo asustada, pasé en emergencias una semana, presenté un riesgo de aborto, pero yo apenas estaba consciente, TaeHyung dijo que me suministraron oxígeno pues por momentos dejé de respirar...

YoonGi abrazó a JiMin, eso había pasado hace cuatro años, pero el hecho de saber que su Mochi estuvo a punto de morir, y él no estuvo para cuidarlo y protegerlo, en silencio pidiendo disculpas por no estar con él, incluso por no recibir un buen golpe del señor Park por todo. Joder, sí hasta él mismo quería golpearse.

- No lo lamentes...- JiMin le dijo- Fue mi decisión, pero me aterraba mas el hecho de perderlos, debía ser fuerte por ellos... ellos fueron fuertes, no dejaron de luchar, incluso aquí- JiMin se separó, sonriendo y llevando una mano de YoonGi a su vientre. YoonGi acarició el abdomen plano del menor, como si en ese momento le hubieran dado la noticia de ser papá.

- Gracias...- YoonGi dijo- ¿Patearon mucho?- preguntó.

- Sobre todo cuando había música- mencionó divertido, recordando las noches en las cuales sus bebés no dormían y se movían constantemente, quitandole el sueño a él también.

- ¿Tienes fotos?- YoonGi preguntó. Quizás debía preguntar sí sabía quien le había enviado las fotografías anteriores pero omitió la pregunta.

- Tengo algunas...- dijo.- ¿Quieres verlas? Todas están en mi casa, incluso tengo sus ecografías de cada mes...

YoonGi dijo que sí, pero luego una duda vino a él.

- ¿Está bien si los niños se enteran?- YoonGi preguntó temeroso y con cautela- Digo... saben que salimos, y reconozco que son muy inteligentes... pero, ¿qué pasa si me odian?- miró a JiMin, dejando entrever ese temor que crecía en él, desde que se enteró que eran sus hijos.

- Yoon...- JiMin tomó sus manos y le sonrió- Escuchame bebé, ellos no podrían odiarte, te aprecian mucho, y tú los has dicho, ellos son inteligentes, además, saben que su otro padre tuvo que irse por un tiempo pero que va a regresar con ellos...

- Gracias... JiMin.. gracias pequeño Mochi...

Se fundieron en un abrazo. Habían muchas cosas que resolver, pero juntos iba a ser mas fácil...
Depués de todo, ellos quizás estaban destinados a encontrarse siempre...


Black SwanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora