Estaba siendo un día normal de trabajo, Ainara trabajaba en el departamento de Marketing de una empresa de entretenimiento, más dedicada a la música. Trabajaba con una de sus mejores amigas allí, Tina, ella era la entrenadora vocal, ayudaba a los idols a mejorar vocalmente y les ayudaba con los arreglos vocales. Jackson era uno de los Idols con los que ella trabajaba de vez en cuando, pero no solía coincidir mucho con él. Mientras que Ainara coincidía casi todo el tiempo con él y se habían hecho bastante amigos.
Tina llevaba bastante tiempo embobadita por Jackson, cosa que era normal, era un chico simplemente espectacular, divertido, guapo, sexy y con talento. No se le podía pedir muchos más. Cada vez que le veía no era capaz de decirle más de dos palabras seguidas hasta que se ponían a trabajar.
Su empresa estaba absorbiendo a una más pequeña y estaban a punto de trasladar a Ainara de centro de trabajo, necesitaban a una persona de confianza de la empresa para ayudar a la empresa a salir adelante y generar dinero. Ella tenía la carrera de empresariales y tenía un máster en marketing, para el presidente la convertía en la mejor candidata para el puesto.
– Tina, hoy vete sin mí, tengo que ir a ver la empresa en la que empiezo a trabajar mañana y así conocer al jefe de allí. -Ainara no estaba convencida del todo de si eso era lo mejor para su carrera, a pesar de ser un ascenso-.
– Ten cuidado, luego me cuentas en casa.
Nuestras amigas vivían juntas, pero aun nos falta una amiga más que presentaros. Ella se llama Sirina, pero todos la llaman Siri. Ella y Ainara se conocen desde que eran adolescentes y siempre han estado juntas y desde que conocen a Tina se han convertido en las tres mosqueteras, son inseparables y van a todas partes juntas. Siri es profesora de guardería, de una de prestigio y siempre llega muy cansada del trabajo, aunque sólo trabaja de lunes a jueves.
Ainara ya había llegado junto con el presidente a la nueva empresa, estaba muy nerviosa, realmente no sabía mucho de esa empresa salvo que la había creado un Idol y que generaba dinero. El presidente la había puesto al día durante el viaje en coche, el Idol que la llevaba ganaba mucho dinero, pero las campañas de marketing y publicidad eran un desastre, las audiciones para buscar talentos, eran un caos y esa empresa lo que necesitaba era alguien que pudiera dirigir la empresa y llevarla por el buen camino. El CEO necesitaba un buen asesor, en este caso, asesora, ya que Ainara iba a tener ese puesto. El puesto de directora.
Entraron en la empresa, el logo le parecía muy llamativo, algo positivo en esta industria, negro y rojo, discreto y llamativo al mismo tiempo. El presidente tranquilizaba a Ainara diciéndole que el CEO era una persona agradable con muchas ganas de convertir su pequeña empresa en algo grande, pero aún así ella estaba muy nerviosa, no sabía lo que iba a encontrar, al llevar años en la industria sabía que los Idols tienen varias caras, la que muestran a los responsables, la del público y la del staff...
Subieron a la segunda planta, dónde estaba ubicado el despacho del CEO y llamaron a la puerta, a Ainara le pareció raro que no tuviese una secretaria, eso lo hacía más accesible, pero menos profesional. Escucharon una voz de hombre que les dijo "adelante". El presidente abrió la puerta y pasaron al despacho.
– Bienvenidos, pasen y ... ¿Ainara? -Ella estaba observando el despacho, le parecía elegante hasta que su nombre la llevó de vuelta a la conversación. Dirigió su vista hasta la voz que la había nombrado mientras un escalofrío recorría su cuerpo, estaba plantado frente a ellos con un traje negro y corbata a juego, alto y rubio, era Zico-.
– No puede ser... -Miré a mi jefe, estaba sonriendo-.
– Que bien que ya os conocéis, así será más fácil para todos. -Los dos miraron al jefe atónitos-. A partir de mañana trabajareis juntos aquí. Créame JiHo, no existe nadie mejor para ayudarte con esta empresa, todas las campañas que ella ha dirigido han sido un éxito. Haréis un gran equipo.
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KOZ: Te encontraré.
FanfictionTres amigas viven juntas en un acogedor piso del centro de Seúl. Ainara, Tina y Sirina. Viven una vida normal, aunque dos de ellas trabajan en una empresa grande de entretenimiento. Zico y Ainara estuvieron muy enamorados hace muchos años, hasta qu...