De Amores Y Amigos A Los 22 [✓]

54. Su Huída

Finn

Me muerdo el labio inferior mientras juego con mi móvil encima de mi abdomen. Mis ojos están en el techo mientras me decido.

¿Le hablo o no lo hablo?

No la he visto en semanas, ya pasaron las fiestas y creo que ha estado ocupada con Hero y Chris.

Maldita sea.

Ni siquiera debería estar pensando en ella, ni siquiera debería preocuparme porque me prometí a mí mismo que no volvería a sentir ese tipo de cosas por ella, me hizo tanto daño que solo quise que fuera una mujer más.

—Estoy harto de estar de estar detrás de ti, eso es todo. Voy a alejarme para ver si así puedo recuperarme...

—Finn... —lloró.

La abracé, no sabía si ese sería el último día en que la viera.

Salí de esa habitación como alma que lleva el diablo. Recuerdo muy bien que ese día me embriague como no lo había hecho en toda mi vida. No quería verla en mi pensamiento pero el alcohol no ayudaba. Solo quería estar con ella.

—Debe ser muy grave el asunto para que te pases ese whisky como si fuera jugo...

Tammy estaba frente a mi con una sonrisa provocativa y un vestido que deja ver el tatuaje que tiene en la pierna.

—Algo así... —le contesto.

—Creo que ya sé que es lo que te pasa, se trata de Zoé ¿verdad?

—Tu más que nadie lo sabe. Ella ha preferido a esos dos idiotas que a mí... que he estado todo el tiempo junto a ella.

—Yo tendré que ser muy dura contigo al decirte esto: ¿Sabes que tienen esos dos idiotas que tú no? Presencia, son chicos malos y nosotras, por alguna razón nos encanta los chicos malos...

—¿Tu sugieres que yo...?

—Eso no se logra de un día para otro pero puedes trabajar en ello. Debes ser fuerte y alejarte de ella, no volverla a ver es la mejor opción...

—¿Como puedo hacer eso sí no sale de mi cabeza?

—Un clavo saca otro clavo —sus ojos brillaron bajo la luz tenue del bar.

—¿Que...? —tartamudee.

—¿Me acompañas al baño, por favor?

La seguí y todo se resume a postrarla en los lavabos del baño del bar y hacérselo como un desquiciado. Fue mucho alcohol en la cabeza y demasiado sexo.

Después de ese desliz con Tammy, le dije que entre los dos no podía haber nada y supongo que lo entendió, luego mi mudanza a la fraternidad, un tatuaje, actitud de chico malo, etc. Pero eso no fue nada, todo se esfumó cuando la vi salir de la casa de fraternidad llorando.

Entonces me propuse ayudarla a que se vengará de las personas que le hicieron eso sin nada a cambio, me propuse no querer nada de ella pero luego ella llegó a mi esa noche de fiesta.

Me hubiese gustado hacerlo con más delicadeza pero estaba luchando contra mis sentimientos, fue un sexo rudo pero delicioso y eso me bastó. Y luego le dije que no podía enamorarme de ella.

Tenía una lucha interna y ahora volví a alejarme, no quería verla porque me debilitaba y agradecía que no me llamara, no quería ir a buscarla y decirle que me había enamorado de ella... de nuevo.

Había creado a un monstruo... y me encantaba.

Paro de jugar con el móvil y trato de aclarar mis pensamientos. Necesito aire fresco y que mejor que salir al jardín.

Salí de mi habitación y saludé a un par de chicos bajando las escaleras, la casa era un completo desastre pero había logrado adaptarme.

Le doy la vuelta a la casa y saco un cigarro de mi chaqueta.

—He hecho algo terrible —me dice moviendo los hombros como coqueteandome.

—No me digas ¿Chris? —asiente con la cabeza. Tiene una mirada traviesa que me encanta —. Pues si esta es la recompensa para mí no me importa lo que hagas con ese cabrón...

Mis manos viajan por todo su cuerpo como si quisiera rasgarle la piel mientras nos besamos, sus manos juegan con mi cabello y yo no dejo de pensar que esto es todo lo que quiero para ser feliz, había deseado tanto esto que se me hacía imposible creer que fuera a pasar.

—Había planeado esto desde que te conocí, Zoé —murmuro besando su cuello. Tiene ese aroma que me encanta —. Unas velas, pétalos de rosa en la cama, champagne, sexo suave y delicado... Pero creo que esto es mejor, esto es mucho mejor... Cuando ansío escucharte gritar mi nombre...

Le quitó el vestido por encima de la cabeza y me quedó un rato observando su cuerpo en ropa interior negra. Es tan perfecta, es jodidamente perfecta y yo soy suyo, me tiene a su merced, puede hacer conmigo lo que quiera, puede destruirme y volvería por más con todo el gusto del mundo.

—Deja de pensar tanto... —me dice.

Exhaló el humo del cigarro y dejó que mi cabeza descanse en la pared de ladrillo de la casa. Esos recuerdos no abandonan mi mente desde que sucedió y estoy a un pelo de ir a buscarla como un loco, volver a ser ese poeta idiota, el que le regalaba poemas por cualquier cosa y declararle mi amor eterno, aunque no sabría si ella me rechazaría.

Cuando abro los ojos veo a alguien que no quería ver en mucho tiempo.

Hero está hablando animadamente con algún chico de la fraternidad hasta que sus ojos ven los míos y me pongo tenso... Como mencioné a Zoé, no sé lo que haría.

Para mi sorpresa se despide del chico y se dirige hacia mi. Lanzó el cigarro a un lado y me preparo para dar el primer golpe.

—Finn...

No dejo que diga nada más y lo tomo de la chaqueta de imitación de cuero para estamparlo con la pared.

—¿¡Que me quieres decir!? ¿¡Que me vas a restregar en la cara!? —le grito.

Con toda la paciencia del mundo y total seriedad en el rostro, toma mis manos suavemente y me aparta de un empujón.

—No hagas eso, ambos sabemos quién perdería aquí —me mira con burla —. Tu eres tan solo un intento de chico malo y yo... llevo mucho tiempo siendo parte de esta fraternidad...

—¿Quieres comprobarlo? —me recojo más mangas de mi saco gris.

—No he venido para eso, así que ahórrate el papel de pavo real...

Lo miro con extrañeza.

—¿Que necesitas? —le pregunto.

—Quiero que hagamos un trato...

Uuuhhhh ¿Como están, amix?
Espero les haya gustado este intento de capítulo culero :v

¿Que tal la Tammy en todo?

Nos leemos mañana.