60. De Vuelta A Casa

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No siento nada. La mañana se cierne sobre mi, mi despertador sonó hace cinco minutos pero yo sigo aquí tumbada en la cama, sin pensar en nada porque si lo hago voy a llorar.

Me obligó a mi misma a levantarme, ya que si no estoy lista antes que el auto que contraté llegué se me hará tarde. Tomo mi bolsa de aseo de encima de mi maleta de ruedas y voy a las duchas. Un recuerdo cae sobre mi.

-¿Amigos? -levantó una ceja acercándose a mi.

-¿Es una broma? -di un paso atrás.

-Llevamos dos años yendo a la misma clase y no hemos formalizado nuestra amistad.

-¡Me llamaste zorra!

-Dijiste que me disculparias.

-¿Podrías dejar de acercarte?

Sus pasos eran lentos y pausados, con cada mirada que lanzaba me enviaba un mensaje a todo el cuerpo que me hacía temblar. Dios, estaba en solo una toalla y me había visto desnuda.

-¿Te pongo nerviosa? -nuestros pechos no se tocaron solo porque mis manos estaban de por medio. Tenía que mirarlo hacia arriba por lo alto que era.

-Eres un arrogante...

-¿Sabes que descubrí al verte en la ducha desnuda, Zoé? -me sonroje. No dije nada -. Que no solo quiero que seas mi amiga, quiero que estés en mi cama, quiero poder saborearte debajo de mi...

Y lo logro.

Doy un largo suspiro y cierro los ojos tratando de que más recuerdos como ese no lleguen a mi mente. No quiero ver de nuevo la cara de Chris cuando dije que no quería nada con ninguno de los tres.

Terminó de ducharme y vuelvo a la habitación ya cambiada, solo hace falta que me cepille el cabello. Cuando entro, Tammy y Sally tienen unos cuantos globos en el techo y ramos de rosas, me entra la nostalgia y corro a abrazarlas con lágrimas en los ojos.

¿Tanto me tarde en la ducha?

-Te vamos a extrañar muchísimo -dijo Tammy contra mi cuello.

-Ya no tendremos una historia divertida que seguir... -dijo Sally.

-Es una lastima que ustedes tengan que quedarse -sonreí limpiando un lágrima -, pero vendré a visitarlas siempre que mi trabajo me lo permita.

-Y nosotras iremos a visitarte, espero que no perdamos ese contacto.

Volvimos a abrazarnos y mientras yo me terminaba de alistar, contábamos algunas anécdotas mías en el campus.

Una llamada anuncio que el auto que me llevaría a mi hogar ya había llegado. Las chicas muy amablemente me ayudaron a bajar mis pertenencias y meterlas en el coche. Un recuerdo, de nuevo invadió mi mente.

-Son cinco dólares -dice.

-¿Que?

-Son cinco dólares. A no ser que quieras pagarme en especie... -pervertido.

-No tengo varo -choco su mano -y tengo mal aliento para darte un beso, además de pocas ganas.

-Eso no importa -se baja de la moto y baja la palanca para apoyarla y sentarse con los brazos cruzados -. Te recibo un besito.

Hero...

Exhaló el aire que contuve y trate de concentrarme, ¿por qué mierdas recordaba estás cosas ahora?

-¿Los has visto? -le pregunté a Sally.

-No, trate de contactar a Finn para que viniera a despedirse pero no lo toma...

-No creo que venga a despedirse -digo entristecida.

-Ay Zoé, no te sientas mal, bueno... sé que no es fácil pero supongo que pronto todo estará olvidado -me dio un abrazo -. Por favor ven a visitarme y yo lo haré cada que pueda...

-De acuerdo.

-Listo -dijo Tammy sacudiendo sus manos -. Ya es hora...

Sonreí y volví a darles un abrazo, al menos no las había perdido a ellas. No todo estaba tan mal.

Me subí al auto y me puse el cinturón de seguridad esperando a que el conductor arrancará antes de que otro recuerdo volviera a mi, pero fue imposible.

-Podría divertirme un poco con la situación... -susurra -. Y quien sabe, podría conseguir algo que siempre quise de ti pero el antiguo Finn no se atrevía a decir...

-¿Que sería eso? -. Alguien que me ayude, me falla el oxígeno.

Él sonríe y de nuevo se acerca a mi oído para susurrar. No puedo describir las sensaciones que manda a todo mi cuerpo son solo hacer eso. ¿Que paso con Finn?

-Quiero hacer que grites mi nombre mientras hacemos el amor...

¡Basta, basta, basta!

Niego con la cabeza y me dejó llevar por el motor que ruge debajo de mi, pronto iniciamos marcha y en mi mente le digo adiós a todo este hermoso lugar y a sus recuerdos.

El viaje es largo pero el camino está despejado y tranquilo, trato de mantener la mente en blanco para no echarme a llorar.

El conductor muy amablemente me ayuda a llevar mis cosas hasta la casa después de saludar a mi padre solamente, ya que mi madre está en la ciudad pagando algunas facturas.

Con mis cosas en mi habitación, papá y yo bajamos al comedor para tomar café y hablar un poco.

-¿Estás bien, Zoé? -me pregunta mi padre de repente.

-Si, ¿por qué la pregunta?

-Estás algo pálida y con ojeras. ¿Dormiste bien?

No muy bien.

-Debe ser por el viaje -contesté.

-¿Segura? -me mira con los ojos entrecerrados -. ¿Que sucedió con los chicos que me contaste la otra vez que viniste de visita?

Di un respingo. Él sabía de Chris y de Hero pero no de mi mejor amigo Finn. No quise hablar mucho del tema, así que le dije que había decidido no estar con nadie, que era lo mejor para mí y blah blah. Pura y física mierda.

-¿Y estas bien con esa decisión? -me pregunto.

-Admito que me dolió un poco, pero ya pasará ¿no?

-Esa es mi niña...

...

Dos semanas después.

Había decidido que antes de empezar a trabajar ejerciendo mi carrera, iba a descansar, ayudar a mi madre en casa, a mi padre en la granja, liberarme un poco de tensiones vividas en la universidad sin sentirme agobiada por el trabajo. Pronto empezaría a trabajar y así mismo me iría de casa, no muy lejos a un apartamento.

Como todas las mañanas en casa, me levanté, me dirigí a mi armario y saqué un albornoz para cubrir mi pequeña pijama, a papá no le gustaba verme así, decía que era ropa de dormir muy pequeña, pero sufría de calores nocturnos así que ni modo.

Bostezo antes de salir a la habitación y trato de peinar un poco mi cabello, no quiero amarrarlo.

Bajo unos cuantos escalones viendo que mis padres están sentados en el sillón mirando algo... o alguien.

Cuando llegó a la mitad de las escaleras, unos ojos azules se fijan en mi.

-Hola Zoé...






Ya sabemos quién es no, pero ¿¡QUE MIERDA HACE EN ESA CASA!? AAAAHHHHH

De Amores Y Amigos A Los 22 [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora