Capítulo 9

165 11 8
                                    

-¿Por qué el no podrá verme ni oírme?-preguntó Dana confusa mientras seguía a Harry por los pasillos.

-Es por que es la única forma de que lo veas...-dijo Harry a la chica y la llevó al despacho de la directora.

Dana se asusto al pensar que la iban a castigar y pensó enseguida en lo que había hecho para evitar algo peor que un castigo.

-Lo siento... Hice explotar las copas... Pero fue sin querer de verdad.-intentó excusarse Dana.

-¿Qué?-preguntó confuso Harry.

-He... Nada, que muy bonito el despacho de la directora.-intentó desviar la conversación Dana y miro como Harry se acercaba a uno de los armarios y sacaba un cuenco de uno de los estantes y lo puso encima de la mesa, parecía contener algún tipo de gas o líquido. Tenía un montón de símbolos extraños marcados en el.-¿Para qué sirve eso?

-Servirá para qué veas a tú padre...-ínformo Harry acercando su varita a la cabeza y saco una fina línea de humo y la hecho en el cuenco.- Acércate Dana.

Dana se acerco con cuidado al cuenco y miro con curiosidad en el interior de este inclinandose más para ver mejor en su interior cuando noto que aparecía en otro lugar. Delante de ella estaba un hombre de ojos negro y pelo del mismo tono, además de una barba adornado su cara. A su lado estaba el que parecía Harry sólo que muchísimo más joven. Entonces ese debía ser su padre, no pudo evitar las ganas y lo intentó abrazar pero lo traspaso como un espectro.

-Será un niño...-decía el que era su padre mirando un gran tapiz en la pared.-Y tendrá sangre mestiza.

-¿Qué tiene de malo Sirius?-preguntó Harry y Dana los miro a ambos.

-Nada ¡Oh Harry! Me encantaría tenerlo en brazos como te tuve a ti, regalarle su primer juguete... Ver su primera sonrisa y... Oír que me diga papá... -Sirius se sentó apoyado en la pared del tapiz.- Pero... Sí Elenae repudia...

Harry se sentó a su lado y le puso la mano en el hombro para reconfortarlo.

-Cuando todo acabe le pediras a Elena que venga contigo, cuando derrotemos a Voldemort y todos estemos a salvo... Podrás criar a tú hijo con ella...-Sirius le sonrío ampliamente imaginandolo.

-Pero prometeme que sí me pasará algo tú la cuidarias.

-Te lo juro.- sentenció Harry y en cuanto dijo eso Dana saco la cabeza del cuenco un poco asustada por el cambio de momento.

-Mi padre... Quería estar con nosotras...-musito Dana y miro a Harry.-Mi madre siempre dijo que nos había abandonado cuando era muy pequeña.

-Estaría enfadada con el hecho de tener que cuidarte ella sola.-Explicó Harry y luego la acompaño hasta la salida del despacho.-Esa cosita con la que has podido ver a tú padre se llama Pensadero, y esos que has visto eran mis recuerdos...

-Este mundo cada vez es más extraño.-Admitió Dana en un suspiro y luego miro a Harry divertida.-Pero me gusta mucho.

-Me alegro por que te toca Historia de la magia.-Sonrío Harry y sí ahijada puso cara de asco.

-De eso tal vez pueda pasar un poco...

Los dos rieron por lo que Dana había dicho. Al final del día estaban todos reunidos en la sala común de su casa.

-¿Un partido mañana?-preguntó Dana mientras escribía con su pluma los deberes.

-Sí, el primero de la temporada.-informó James ilusionado.-Gryffindor contra Ravenclaw.

-No creo que vaya yo al menos.-respondió Olivia que no levantaba la vista de un libro.

-Será divertido.-apuntó Mónica.-Además sí no me equivoco Teddy también jugara ¿no?

Harry Potter GenerationsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora