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𝐑𝐚𝐞 𝐂𝐚𝐦𝐛𝐫𝐚Bese los labios de Tomi en forma de saludo, el me miraba mientras sonreía, estábamos intentando algo, cosas pasaron por eso estamos donde estamos, bueno les digo desde ese día que Tomás termino con Candela el me consoló durante días y semanas, esas palabras que había usado ella me habían lastimando mucho, desde esos días el y yo venimos tratandonos diferentes, osea algo más que amigos y es algo que me gusta, nunca hemos llegado a otro nivel, solo besos que aveces se intesifican,pero los dos paramos.
Tenía la cámara entre las manos mientras hacía algunas cosas para poder tomar las fotos bien.
—reinaaaa¿y si tomamos las fotos hasta mañana?—pregunto Tomás alargando la primera palabra,lo mire y sonreí de lado.
—Daleeeee—insistió alargando la "e" y haciendo puchero, ¿les dije que cuando hace eso es prácticamente irresistible?.
—no, Tomi tenemos que terminar esto hoy—respondí y el me miró mal.
—les digo que me sentía mal y que no podíamos tomar las fotos así—respondió, este tiene una respuesta para todo lo que le pregunto.
—bueno dale,pero más te vale que mañana tomemos esas fotos—accedí y al ver su cara de alegría reí empujándolo un poco.
—vamos a mí departamento—dijo y yo lo miré raro.
—¿que? vivo con los pibes,pero también tengo un departamento para mí solito cuando quiero desaparecer de todo—dijo y yo asenti, el tomo mí mano,nuestras cosas y nos guió hacia el auto, el empezó a manejar hasta que paro enfrente de un edificio alto y re cheto,bajamos del auto, el volvió a tomar mí mano y empezó a caminar hasta la entrada.
—Rodrigo ella es mí wacha, cuando venga dejala pasar—le aviso Tomi al portero supongo, era un señor ya viejo,pero no tanto, le calculo ¿unos 67 años?masó, el señor asintió con una sonrisa para después volver a su trabajo.
Con Tomás entramos al ascensor y el marco el piso 23 que parecía que era el último, al abrirse las puertas del ascensor me sorprendí un toque al ver cómo el departamento era un piso completo, el tiró las llaves por algún lado, deje mis cosas en un sillón que estaba ahí.
El tomo mí rostro e impacto sus labios contra los míos, no tarde mucho en corresponder, la ropa empezaba a sobrar y el calor empezaba a aparecer poco a poco.
Sus manos fueron hasta el final de mí camisa y la quito,tirándola por algún lugar, mis manos llegaron hasta el final de su camisa,pero a diferencia de el yo metí mis manos y toque su pecho, el empezaba a tocar poco a poco mí cintura haciendolo lento y tiernamente, de un momento a otro quite su camisa haciendo que nos separemos un poco, nos miramos con las respiraciones agitadas para después seguro besándonos, sus manos quitaron el botón del short que anda, poco a poco iba metiendo su mano en mis partes rozando sus dedos sobre mis partes haciendo que suelte uno que otro gemido.
Lo tiré al sillón haciendo que el quedará sentado en éste, pase mis piernas una a cada lado de el, estaba arriba de el sentada a horcajadas, sus manos bajaban a lo largo de mí cintura, mí pelvis se movía en círculos sobre su miembro haciendo que poco a poco podría sentir su erección.
De un momento a otro el estaba arriba de mí, quito mí short de un solo movimiento, sus ojos se conectaron con los míos, una pequeña sonrisa se asomo de su boca, sus dedos empezaron a jugar con la tela de mí tanga, la desprendió poco a poco quedando completamente desnuda ante sus ojos.
Abrió mis piernas poco a poco, sus dedos se fueron introduciendo poco a poco haciendo que largué un suspiro largo, el empezó a meter y sacar sus dedos, mientras que con su lengua manejaba mí clítoris, era la mejor sensación de mí puta vida.
Poco a poco el orgasmo de iba acercando, el al darse cuenta de eso hizo los mismos movimientos minutos después hasta que llegue al orgasmo, ahora era yo la que estaba agachada adelante de el, mis manos masturbaban su parte para después introducirla en mí boca, el suspiró pesadamente, empecé a hacer movimientos, el le hizo una colita improvisada, pase así algunos minutos hasta que sentí un loquido,blanco y caliente en mí boca, lo trague ante su mirada.
El tomo mí cuerpo adueñándose completamente de el, lo tenía a él apunto de entrar a mí, solo se estaba poniendo el forro ante mis ojos, me miró y guiño el ojo, puso sus manos en mí cadera acomodándome, entro en mí lentamente, agarre con fuerza los cojines del sillón al sentir el placer que eso me generaba. Empezó a entrar y salir de mí lentamente para después intesificar sus movimientos.
El sonido de nuestra piel rosando, los gemidos y jadeos que salían de parte los dos, era lo único que se escuchaba en ese lugar, era una sensación inexplicable, sentir todo ese placer con una sola persona, era hermoso,era querer estar ahí toda la vida, su cara de concentración y placer era hermosa, su pelo en su cara le deba un toque,le daba su toque, ver cómo gotas de sudor caían por su torso desnudo era un sueño hecho realidad, era ese sueño que nadie sabía que tenía,pero al descubrirlo te das cuenta lo mucho que lo necesitabas, creo que en verdad estoy enamorada de él, el era perfecto en todos los sentidos, verlo a el fumando es todo lo que está bien, verlo sudando después de llegar al orgasmo es algo único, las miradas,besos, palabras, sonrisas, los celos de parte de el, es algo que nunca demuestras, esa parte de el muy pocas personas la conocen y saber que soy una de esas personas se siente tan bien, saber que el pudo confiar en mí para demostrarse de esa manera, alguien cuando mira a Tomás lo suele juzgar muy rápido tal vez por sus tatuajes y su típico semblante serio, pero es todo lo contrario a eso, es una persona tierna y sencible.
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Nada que decir al respecto
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𝐂𝐚𝐲𝐞𝐧𝐝𝐨 𝐞𝐧 𝐥𝐚𝐬 𝐫𝐮𝐢𝐧𝐚𝐬 | 𝐂.𝐑.𝐎
Teen FictionPRIMER Y SEGUNDO LIBRO. Rae Cambra, siempre tuvo problemas familiares y su escondite era su pieza, hasta que un día descubrió un viejo vagón de tren donde conocerá a el, Tomas Campos, un chico igual de roto que ella, chico que se escapa y escabulle...