Planes San Valentín
Abro el casillero y es un error hacerlo. En ese momento un montón de cartas se esparcen en el suelo. Oigo murmullos y con vergüenza me acerco a recogerlos.
Empiezan los días de invitar a alguien a San Valentín.
Para no verme como un patán o un ser sin sentimientos, cosa que muero por hacer. Tomo las cartas y las guardo en mi mochila. Ya las botaría en casa, por ahora...debía cargar con ellas en la mochila.
Suspiro recogiendo las últimas cuando unos zapatos se asoman.
-¡Vaya! ¿Cuántas cartas has recibido, Alan?-pregunta Darwin atónito. Ni me molesto en responder, solo abro mi mochila y suelta un silbido-¡Joder! Son muchas, ¿por qué siguen invitándote si saben que tienes novia?
-No tengo idea. Incluso esta mañana una chica me ha interrumpido en clases para que salga.
-¿Eso molestó a Martins?
-No.
-¿Seguro?
-Sí, ella fue la que salió en mi lugar.
-¿Qué?-pregunta y empieza a reírse-¡No puedo creerlo! ¿De verdad? ¡Vaya! La pequeña Abi sí que tiene agallas. Entonces no tienes de que preocuparte-me rodea el hombro con su brazo-¡Ya tienes a una pequeña fiera para defenderte!
Su brazo alzado de manera heroica me hace fruncir el ceño y negar.
-Cállate Darwin-mascullo y él ríe negando.
-Mira la mía-saca una funda de su mochila y la sacude-Este año parece que me he visto más solicitado.
-¿Y aceptarás alguna?-pregunto con interés.
-¿Por qué? ¿Celoso?-mueve las cejas y ruedo los ojos haciendo que ría-No, no quiero ir. Así que tranquila mi Julieta, que tu Romeo se quedará en casa.
-Pero te llevas muy bien con ellos-señalo confundido e ignorando el hecho de que me ha llamado Julieta.
-Tú también.
-Yo tengo pareja.
-Y yo no quiero ir-se encoge de hombros.
-¿Darwin Sanders no quiere ir a una fiesta?-pregunto irónico y niego. No le creo.
-Los milagros existen.
-Las malas excusas también.
Rueda los ojos.
-Como sea Julieta, no quiero ir.
-Como tú digas-me encojo de hombros y se ofende.
-¿No vas a insistir en saber el por qué?
-No me vas a decir-me quejo.
-En eso tienes razón, pero al menos lo hubieras intentado-ríe y luego se detiene y tira de mi mochila haciendo que retroceda.
-¡Joder! ¿Qué demonios...
-Shh-sisea y me apega a la pared-Mira eso.
Frunzo el ceño hacia él pero hago lo que dice y me sorprendo cuando veo a Cristina.
-¿Ella está guardando las cartas?-pregunto aturdido y le miro-¡Ella siempre las bota! ¡Detesta a todos los de ese colegio!
Darwin asiente pero la verdadera sorpresa es cuando se le cae una carta y alguien se la recoge.
-Eso es algo muy cliché-se burla Darwin pero luego se enseria al ver quién es-Mierda, Alan...ese es... ¿de verdad mis divinos ojos no me fallan y ese es...
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Escenas extras de Te enamoraré
Novela JuvenilToda historia tiene dos lados. Alan Cooper es conocido por todos como el chico que rompió el corazón a Abigail Martins. Pero antes de eso ya tenía una reputación muy dudosa. Un rompecorazones, frío, directo e incluso insensible. Pero para Abigail...