Relaciones Peligrosas (EunHae+18)

7. Deseo Insaciable

Eche la cabeza hacia atrás cuando sentía como HyukJae entraba y salia de mi con rapidez y fuerza, mis uñas se enterraron en su espalda.

— Joder —Gruño sobre mis labios —, eres tan rico —

— Ah, ah —Su pene tocaba mi próstata haciéndome delirar de placer — m-más...m-más —Enrede mis piernas en su cadera provocando que entrara aún más en mi.

— Profesor Lee —Gruño cerca de mi oído — ¿te gusta, eh? —

— ¡S-si, oh mierda, si! —Grite.

Vi como sonreía de lado y me besaba con salvajismo, mordió mis labios. Nuestros cuerpos se encontraban sudorosos y es que era la cuarta vez que lo hacíamos en menos de seis horas.

HyukJae se detuvo y yo me queje.

— Tranquilo, profesor —Dijo riendo — te llenaré en un momento, pero ponte sobre tus rodillas y manos —

— N-ni siquiera l-lo pienses —

— Shhh —Llevo sus manos a mi cadera — quiero ver tu culo mientras te lleno como te gusta, ahora ponte sobre tus rodillas y manos y alza tu culo —

— H-Hyuk —

— Ahora —Gruño, dándome la vuelta — ves...no es tan difícil complacerme —Dijo abriendo mis nalgas.

Apreté las sabanas con mis manos cuando sentí su lengua pasando por mi ano. Jadee cuando su lengua entro en mi.

— H-Hyuk...ah...—

Se separo de mi y a los segundos sentí como me penetraba, fuerte y húmedo. Mordí la almohada escuchando como la cama rechinaba debido a los fuertes embistes.

— Quiero escucharte —Me dijo quitándome la almohada — gime mi nombre, profesor di el nombre del hombre que te lleva al paraíso y el infierno al mismo tiempo —

— ¡H-Hyuk ah! ¡ah, ah, ah! —

— Eso es —Gruño — mmmm delicioso...ah...—

Mis brazos flaquearon, y mi pecho toco la cama quedando solo mi culo alzado. Mi próstata estaba siendo maltratada llevandome al paraíso, corrientes de placer traspasaban mi cuerpo hasta llegar a mi pene que estaba goteando presemen.

HyukJae seguía penetrandome fuerte como me encantaba. Un cosquilleo muy agradable se instaló en mi vientre, estaba por correrme. Sentí como tomaba mi pene y me masturbaba.

— H-Hyuk...ah...¡Hyukkie! —Me corrí en su mano.

— Joder...ah...me aprietas tan rico...ah...—

Con un par de penetraciones más se corrió de nuevo dentro de mi. Sentí su semen llenarme.

Mi respiración es agitada. HyukJae se acuesta a mi lado con su respiración igual que la mía, nos quedamos en silencio.

— Ya es tarde —Habla mirando el reloj en su mesa y bostezo.

— Es mejor que te vayas —Dije levantandome, un gemido salió de mis labios al sentir mi culo arder y mi cadera doler un poco.

— ¿A donde vas? —

— A tomar una ducha —Respondí, mis piernas estaban un poco temblorosas.

— Mmmm iré contigo —Se levanta y pasa mis manos por mi cintura empezando a besar mi cuello.

— N-no...basta —Trate de apartarlo — ¿es que no te cansas? Lo hemos hecho en la sala, en la cocina, en la mesa del comedor, aquí...—

— Nunca me cansaré de follarte —Susurro mordiendo mi lóbulo — tengo un deseo insaciable por tu cuerpo —Sus manos fueron a mi trasero.

— No, basta —Me aparte y lo mire — vete a tu casa, HyukJae —Le dije con seriedad —...ha sido suficiente por hoy —

— ¿Disculpa? —Él se río y negó con la cabeza — creí haberte dicho que él que manda soy yo —Dijo y se acerco a mi tomandome de la cintura — y yo no he tenido suficiente de ti, así que hoy me quedare contigo —

— No —Dije y trate de liberarme — sueltame ya —

— Okey, okey —Dijo y me soltó — ¿feliz? —

— Si, ahora escuchame cuando salga de bañarme ya no te quiero ver aquí ¿has entendido? —Le pregunte.

— Si, como usted diga profesor Lee —Dijo con su estúpida sonrisa maliciosa.

Bufé y me encerré en el baño. Fui hasta el espejo y mis ojos se abrieron sorprendido al ver mi cuello con un par de marcas.

— No, no, no —Decía horrorizado. — maldita sea —Abrí la puerta del baño y mire a HyukJae que se abrochaba los pantalones.

— ¿Cambio de opinión, profesor? —

— ¡Tú! —Gruñi — ¿¡por qué me has dejado marcas!? —Señale mi cuello.

— ¿Por que no dejarlas? —Tomo su camisa y empezó a abrocharla.

— ¿¡Por qué!? ¡Mañana debo trabajar! —

— ¿Y? —

— Oh por el amor de Dios —Gruñi — cualquiera puede ver las malditas manchas en mi cuello —

— Mejor para mi —Se encogió de hombros —, así sabrán que tienes dueño —

— Haber yo no tengo dueño no soy un maldito objeto —Le dije.

— Te equívocas, cariño —Se acerco a mi rozando nuestros labios — tú eres mio, yo soy tu dueño hasta que mi deseo por ti se agote —Me beso — nos vemos mañana, profesor Lee —

HyukJae salio de mi habitación, a los pocos minutos escuche la puerta principal siendo cerrada. Suspire.

¿En que me había metido? ¿por qué...por qué de entre tantos hombres debía ser él? ¿Por qué Lee HyukJae, por qué mi alumno?